La diputada federal por Aguascalientes, Lorena Martínez Rodríguez, consideró la reducción de los sueldos, específicamente el de los altos mandos de todos los niveles de gobierno, como una buena medida –pero temporal- para eficientar el gasto de todo el aparato gubernamental, luego de los recortes anunciados a nivel federal.
La legisladora expresó que un ajuste salarial sería menos grave”, pues despedir a las personas o reducir los salarios de quienes menos gana sería contraproducente en tanto que no hay opciones laborales; sin embargo, lo vio como una “medida temporal y emergente” y apuntó hacia el gobierno federal como el responsable de brindar una solución de fondo que reactive la economía, en vista de que sus políticas contracíclicas no han dado resultados.
Explicó que el gobierno de Aguascalientes padece un “ahogo presupuestal”, pues depende económicamente en un 92 por ciento de las participaciones federales, lo que calificó como “un problema estructural fuerte”, pero eso no deberá afectar a la prestación de servicios que es obligación del estado.
En ese sentido, se mostró de acuerdo con el ejecutivo en que se reduzca el gasto corriente en cuestiones como teléfonos celulares, eventos, gastos de representación y viajes, pues “si hacemos un análisis”, éstos rubros tienen un peso importante en el presupuesto.
De igual forma, consideró que los proyectos de obra pública, tanto en lo estatal como en lo municipal, deberán priorizarse, de modo que los recursos que ya estén etiquetados para eso se ejerzan, pero al mismo tiempo las instituciones públicas cumplan con sus obligaciones de brindar servicios.
Criticó, por ejemplo, que a inicios de año Felipe Calderón anunciara la reducción en las tarifas de electricidad, gas y diesel en un 17 por ciento y ante la emergencia en la recaudación se opte por elevar los costos de esos servicios básicos.
Al respecto, Martínez Rodríguez expresó que sigue pendiente la comparecencia del secretario de Hacienda, Agustín Carstens, de quien reiteró la obligación de “dar una explicación y presentar una alternativa viable, congruente, de reactivación económica”.
Esperó que el punto de acuerdo sea dictaminado por la comisión correspondiente y aprobado por el pleno del congreso de la unión en el transcurso de la próxima semana, para que Carstens comparezca a la brevedad, ante una situación que la diputada vio como un divorcio entre las políticas del gobierno y las demandas del empresariado, así como una falta de decisión y compromiso de “involucrar a todos los actores políticos, económicos y sociales, para que la estrategia sea conjunta”.
Si no es candidata, trabajará para que gane el PRI
Con respecto a la contienda electoral del próximo año, la legisladora priista aseveró que ha trabajado para lograr la candidatura; sin embargo, dijo que respetará los tiempos y mecanismos que el Revolucionario Institucional (PRI) establezca para definirla.
Se mostró dispuesta a trabajar para que, aún cuando ella no ostente la candidatura, el PRI recupere la gubernatura, de lo cual apreció que se tiene buena posibilidad.