- La clase política obstaculiza los derechos de la comunidad, pero socialmente hay avances
- Aguascalientes no es moderno si no garantiza bienestar a todos sus habitantes
- La UAA es un ejemplo de inclusión de lo que debería ser toda la entidad
Juan de la Cruz Bobadilla Domínguez, académico e investigador de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA), hizo una evaluación de los avances y pendientes en el estado para la comunidad LGBTI+; al dejar patente que gran parte de la garantía de derechos dependen del Congreso del Estado y los gobernantes, aunque en la sociedad se camina un poco más de prisa gracias al haber más apertura en las familias y las empresas, además de reconocer a la Universidad Autónoma de Aguascalientes como un ejemplo en el tema: “Es muy contradictorio, porque hay muchos años trabajando en la causa, hay un gran activismo por parte de las organizaciones de la sociedad civil, además de lo que se hace en lo individual y social, pareciera mentira que en términos legales, jurídicos y constitucionales estamos bastante mal”.
Calificó de desafortunado que funcionarios y diputados consideren poco importante atender las necesidades de la comunidad de la diversidad sexual porque son minorías, y por eso no son relevantes, lo que calificó de abominable, pues no consideran que los avances en derechos humanos sirven para “espejearnos como sociedad”, en términos sociales, políticos y económicos; ya que esta supuesta modernidad acaba siendo relativa, engañosa y tramposa si se habla, por ejemplo, de democracia: “La modernidad significa precisamente la ascensión de los derechos humanos, la intención real de búsqueda democrática, de inclusión, de participación, de conformación de ciudadanía, está claro; cuando tenemos tan claros estos procesos de inclusión, no podemos decirnos un estado moderno, sin igualdad y justicia social, en donde la población trans en la más vulnerable y abandonada”.
Bobadilla Domínguez se refirió al Congreso del Estado en donde sistemáticamente se deja claro que quienes integran la comunidad de la diversidad sexual son considerados como personas de segunda y de tercera, cuando limitan leyes que protejan a todos los ciudadanos por considerarla “minoría” y consideró urgente conformar una agenda estatal que se vincule en beneficio de estas poblaciones.
El investigador señaló que las últimas legislaturas estatales se han caracterizado por ser analfabetas en cuanto a derechos humanos, al verse conformadas por la gente menos capacitada, preparada y sensible en estos temas en general y en particular en cuanto a los temas LGBTI+, además de una falta de voluntad política impresionante; por lo que es posible decir que legislan con dolo, con una intención dirigida a seguir fomentando la exclusión y la polarización social que van encaminados a una doble intención y deja claro que en Aguascalientes gobierna la iglesia católica: “Esta Legislatura, al menos los diputados panistas, obedecen ciegamente lo que el obispo les dicta, y vemos así las implicaciones tan graves que representa eso, pero ellos no lo ven de esa manera; ellos lo ven normal, lo naturalizan, así está acostumbrado su criterio, su mentalidad, su ignorancia del mínimo principio de laicidad que debería permear, no solo en el estado sino en todo el país. Con eso operan totalmente al margen de la ley, aunque tengan mandatos de la Suprema Corte, son una derecha antiderechos”.
–Hay algún avance como sociedad, como comunidad
–Mira es curioso pero mira, a la par de todo lo que estamos hablando que es la parte institucional, está por otro lado la parte social, lo que se vive en la calle, con las familias, con nuestras amistades y creo ahí sí hay avances, Porque si nos ponemos a ver una cosa es que nuestra clase política insista en permanecer en la ignorancia y negar a abrirse, pero por otra parte la realidad rebasa el discurso, en este y muchos temas. Hay una distancia cada vez más grande entre nuestras autoridades, el ejercicio público y la ciudadanía, por eso su negación de derechos y la falta de políticas públicas para todos.
Desde su expertise como investigador y activista, para el doctor Bobadilla los avances de deben gracias al trabajo de la sociedad civil, de los mismos ciudadanos que van poco a poco tomando conciencia, ya sea porque alguno de los integrantes de la familia es de la comunidad y por fortuna no se da el mismo rechazo que antaño, con violencia o correr a las chicas y chicos de su casa. En lo empresarial también se están dando grandes cambios, pues se sancionan las expresiones de violencia hacia las personas LGBTI+, además de ser más incluyentes en más espacios laborales.
En cuanto a las instituciones de educación superior reconoció que la Universidad Autónoma de Aguascalientes es un ejemplo y un oasis en el estado, pues desde hace diez años trabajan los temas de inclusión y a pesar de eso no han logrado desterrar la homofobia de la institución.
“La UAA entra con una política completamente favorecedora, comprometida, lo ha demostrado, tenemos diez años de activismo en la universidad, hay gente como yo que investigamos sobre temas de la diversidad, publicamos, nos publican, hay un apoyo amplísimo; entonces creo que, como casa generadora de conocimiento, casa procuradora de bienestar social es el mejor ejemplo que podemos tener, tan abierta, incluyente y plural. Es un ejemplo de lo que debiera estar sucediendo en el estado”, enfatizó el profesor del área de comunicación de la UAA.
