El diputado federal panista, Ernesto Ruíz Velasco, evaluó que incrementar la presencia de Acción Nacional, sus militantes y los programas sociales impulsados por los gobiernos blanquiazules es el principal reto a vencer de cara a las elecciones de 2010 en Aguascalientes.
Consideró que la pérdida del segundo distrito en las pasadas elecciones y la poca diferencia de votos en el primero y el tercero, son una llamada de atención para el PAN y el PRI, que son quienes “llevan punta”, en cuanto a que ninguno tiene la victoria segura.
Para conservar la gubernatura del estado y recuperar las alcaldías y la mayoría en el congreso local que ha perdido, Ruíz Velasco de Lira señaló que “es necesario que la población sepa quién está gobernando la federación, quién está gobernado estado” y que “Acción Nacional está dando resultados”.
Para ello, dijo, se debe primero procurar una mejor coordinación federal y estatal en los programas sociales y, en segundo lugar, “saber vender públicamente” los resultados de los mismos, pues aseguró que en Aguascalientes existe una buena cobertura, como es el caso del seguro popular, al que el 90 por ciento de quienes no cuentan con IMSS e ISSSTE están afiliados.
El legislador describió que el candidato que aspire a un cargo por el PAN el próximo años, deberá ser electo por la militancia y no determinado por las dirigencias, “por caprichos de grupo o intereses particulares”.
Se dijo convencido de que los procesos internos son una garantía de unión del partido, aparte de que hacen sentir respaldado al candidato que lo ha de representar.
La militancia deberá evaluar qué es lo que ciudadanía está pidiendo para así elegir al hombre o mujer que pueda responder a estas exigencias; además, si bien será necesario que el candidato tenga liderazgo al interior del instituto político, se deberá tomar en cuenta que tenga carisma y capacidad de atraer el voto y que “pueda ser un buen gobernante”.
Ruíz Velasco aseguró que hasta el momento no tiene en mente algún favorito para ostentar candidaturas en Aguascalientes.
Finalmente, el candidato habló sobre el segundo distrito como bastión de batalla entre las dos primeras fuerzas políticas, indicando que es en éste en el que debe centrarse la atención de todos los niveles de gobierno por el aumento en la pobreza que ha sufrido su población y el desencanto electoral que reflejaron los votantes de esta demarcación.