- El BOA, aunque no sea auténtico, es propuesta real de opositores
- Recuperación económica será como una “V”: tocar fondo y hacia arriba, dice el presidente
APRO/Arturo Rodríguez
El presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró hoy que el documento “Rescatemos a México”, en el que se describe un plan para integrar el Bloque Opositor Amplio (BOA) llegó a sus manos por simpatizantes de su movimiento que por necesidad trabajan con sus adversarios.
Según él, hay quienes se proponen deponerlo y aunque dijo que eso es algo legítimo, al organizarse de manera encubierta, él hasta se divierte dando a conocer el plan.
“La oposición se propone eso. Lo que está en el escrito es un objetivo de los opositores, pero es legítimo. Lo único es que se conducen de manera encubierta y yo hasta me divierto dando a conocer esto porque se tapan tanto que piensan que nadie lo va a saber… en México las cosas se saben antes de que sucedan, todo se sabe”, dijo.
La justificación para dar a conocer el supuesto plan, que ayer admitió no tener autentificado y desconocer su veracidad, fue también una posición mencionada hoy, minimizando el impacto de la implicación de los mencionados.
“No afecta nada, el que no tiene injerencia en ese asunto pues qué le preocupa. Yo lo di a conocer porque me lo entregaron y mi pecho no es bodega ¿qué voy a andar guardando documentos? Porque además la política es asunto de todos, tengo que estar informando a la gente constantemente y es conveniente que en la democracia se actúe con transparencia, no tirar la piedra y esconder la mano”.
Según el mandatario lo que está mal “es la hipocresía” y añadió: “¿Cómo van a ponerse caretas y aparentar algo que no son? No son liberales, son conservadores ¡fuera máscaras! Además, no tiene nada mal”.
Agregó que quien no forme parte del BOA no tiene de que preocuparse, insistiendo en que lo dio a conocer porque la política es asunto de todos y rechazando el espionaje político al que aludió el expresidente Felipe Calderón:
“No nos escondamos, es legítimo ser opositor y estar en contra del gobierno y de la transformación y del cambio de política económica, eso es normal en una democracia ¿cuál espionaje? Ya no hay espionaje, si no son los tiempos de García Luna”.
Recuperación económica será como una “V”: tocar fondo y hacia arriba
La economía del país está en crisis pero ya está “tocando fondo” aseguró hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador al dar a conocer diferentes indicadores que reflejan el impacto de la pandemia por coronavirus y confió en que, de inmediato, se iniciará la recuperación.
Optimista, el presidente refirió que al “tocar fondo” hay analistas que piensan se vivirá como una “L”, es decir, caer y permanecer en el fondo por algún tiempo para luego iniciar la recuperación. Él, en su perspectiva, dice que será como una “V”, es decir, caer, tocar fondo e iniciar de inmediato la recuperación.
El mandatario, sin embargo, admitió una pérdida de empleos que supera las 900 mil bajas: 555 mil despidos en abril y aproximadamente 350 mil más en mayo según el estimado presidencial aun por redondearse.
En tanto, los primeros días de junio, admitió, siguieron registrándose despidos, por lo que estimó en torno a un millón de desempleados a consecuencia de la pandemia por el segundo trimestre de este año.
A ese millón de desempleados, de acuerdo con las cifras de asegurados permanentes del IMSS, se suma el impacto en el sector informal que, a decir del jefe del Ejecutivo, es el más perjudicado:
“El daño mayor lo ha recibido la economía informal, mucha gente que vive al día. Por eso se está apoyando con los créditos y con todos los programas sociales, con esta estrategia de apoyar de abajo hacia arriba: proteger al 70% de la población, garantizando cuando menos un apoyo a 25 millones de familias, sin dejar de atender al 30% de mexicanos que tiene más ingresos”, dijo.
En su conferencia de prensa matutina, López Obrador destacó dos indicadores: la recaudación y la recuperación de la moneda.
Sobre los impuestos, sostuvo, la recaudación está por arriba de lo obtenido el año pasado considerando el período del 1 de enero al 8 de junio, por un 0.9%.
“Esto es hasta cierto punto alentador porque estamos tocando fondo con la crisis. Sin embargo, en recaudación de impuestos, en ISR (Impuesto Sobre la Renta) tenemos 1.3% de aumento y, en IVA, un aumento de 0.5% a pesar de la situación tan complicada”.
El peso, en recuperación
En tanto, sobre el peso mexicano consideró que está en proceso de recuperación, recordando que hasta antes de la pandemia estaba entre las monedas que se estaban apreciando más en el mundo y cuya depreciación se estima hoy en -7.6% respecto del dólar estadounidense, desde el inicio de la administración a la fecha.
La moneda pues, en el balance presidencial, se está recuperando y como ejemplo mencionó que la paridad llegó a 25 pesos por dólar, y ahora está en 22 pesos por dólar, un indicativo de recuperación.
No permitiré que ninguneen la investidura presidencial
El desacuerdo entre gobernadores de partidos de oposición y el presidente Andrés Manuel López Obrador se mantiene en relación a la política económica y la atención de la epidemia de coronavirus y esta mañana el mensaje fue claro desde Palacio Nacional: “no permitiré que ninguneen la investidura presidencial”.
En su conferencia de prensa matutina, el mandatario consideró que es de “mal gusto” que culpen al Poder Ejecutivo federal de problemáticas que competen al ámbito local y, aun con esa consideración y la citada advertencia, instó al diálogo a los gobernadores inconformes, especialmente, en los procesos de reapertura económica basada en el semáforo del gabinete de salud sobre el que quieren tomar sus propias decisiones.
“Con diálogo, sin confrontación, con paciencia y no caer en ninguna provocación. Nosotros no tenemos diferencias con los gobernadores, o sea, nosotros tenemos que actuar con responsabilidad, podemos tener diferencias políticas, ideológicas… a veces se manifiesta.
“Hay un trabajo coordinado que siempre se lleva a cabo en los estados y quisieran algunos que se presentara confrontación con el Gobierno Federal”, señaló López Obrador.
En una revisión reciente a sus expresiones, realizada por Proceso en el balance del primer cuarto de su administración, se identifica que a diferencia de otros actores políticos, el trato de López Obrador con los gobernadores de los estados ha sido menos frontal en las diferencias y, aun cuando se han generado polémicas, ha tenido una actitud más conciliadora, exceptuando los casos del michoacano Silvano Aureoles y con mayor frecuencia, el del jalisciense, Enrique Alfaro, paradójicamente, los dos, aliados del presidente hasta hace algunos años.
Enrique Alfaro es quien ha sido más persistente en sus críticas al Ejecutivo, aun entre los siete gobernadores que en bloque están solicitando más recursos y en el desacuerdo más reciente, el jalisciense ha imputado a López Obrador una intromisión en las protestas sociales detonadas en protesta por la ejecución extrajudicial de un joven.
Hoy, López Obrador expuso, en el genérico “los que quieren” confrontación: “Esto es lo que lleva a que se quiera agarrar la bandera, y echarle la culpa al presidente de lo que sucede en un estado, porque es un asunto partidista. Pero es de mal gusto, eso es politiquería y yo con todo respeto no voy a permitir que ninguneen la investidura presidencial, no se puede permitir eso”.
Inclusive, ejemplificó con el caso de Javier Corral, en un diferendo relacionado con la cuota de agua que debe entregarse del Río Bravo a Estados Unidos como parte de un convenio histórico
López Obrador consideró que las críticas de los gobernadores de oposición, así como de algunos legisladores, se ubican en el contexto de la proximidad del proceso electoral de 2021, en el que se renovará la Cámara de Diputados, así como la gubernatura de 15 estados.
