- El presidente sostuvo que el coronavirus precipitó la caída del neoliberalismo
- Adelantó que ya no habrá otras medidas más que las expuestas el domingo pasado
En el plan para el bienestar y el empleo con el que el Gobierno de México hará frente a la crisis generada por Covid-19 se prevé rescatar de manera prioritaria a los olvidados, a los marginados, a los pobres y a los que siempre se les ha hecho menos, insistió el presidente Andrés Manuel López Obrador en la conferencia matutina.
Subrayó que se va a poner por delante el interés general, el interés de la nación, “No puede haber, como antes, un gobierno faccioso, al servicio de una minoría”, el presidente repitió en la conferencia la estrategia para la reactivación económica que presentó en el informe del domingo: los Programas Integrales de Bienestar llegarán a 22 millones de beneficiarios; se crearán 2 millones de nuevos empleos y habrá 2 millones 100 mil créditos para vivienda y pequeños empresarios.
López Obrador se refirió a que en redes se le criticó porque no había un plan e indicó que no habría medidas extra, “decían: ‘¿Dónde está el plan?, no escuchamos nada’, por eso quise ahora empezar con este resumen: 22 millones de beneficiarios, dos millones de créditos en nueves meses, dos millones de nuevos empleos, porque no escucharon nada. Y los más condescendientes con nosotros, los que no actúan de mala fe o no son del bloque conservador, como también todavía traen la influencia de lo que eran los planes de choque, como les llamaban, o los planes emergentes, algunos pusieron: ‘Bueno, el presidente dio a conocer los lineamientos generales, pero ya en esta semana el secretario de Hacienda va a puntualizar, a desglosar las medidas, vienen otras medidas’. No, ya”.
De acuerdo a las cifras de López Obrador, los apoyos representan una inversión de más de 500 mil millones de pesos para los más pobres y vulnerables, es decir, cerca del 60 por ciento de los mexicanos. Proyectos de desarrollo como el Tren Maya, la reactivación de la industria de la construcción y el mejoramiento urbano en zonas marginadas generarán fuentes de trabajo. Los trabajadores al servicio del Estado recibirán créditos desde 50 mil pesos con descuentos a plazos en la nómina y alrededor de un millón de créditos para la vivienda de Fovissste e Infonavit. Un millón de micronegocios accederán a créditos que se distribuirán en pequeñas empresas del sector formal e informal de la economía. En este rubro la inversión será de 25 mil millones de pesos.
El presidente reiteró que su administración no ejecutará las “recetas del periodo neoliberal porque no resuelven el problema, sino que lo agravan y profundizan la corrupción”. Ante las críticas de diversos sectores acerca de que no había presentado ninguna novedad y que no había plan, López Obrador desestimó los señalamientos indicando que sus críticos “Están acostumbrados a que se rescate a los de arriba, que no se les cobren impuestos, a que aumente el precio de las gasolinas, a que no haya aumentos en los salarios, que se despida trabajadores, etcétera. Todo lo que se resume en decir que se aprieta el cinturón el pueblo. Ahora el gobierno se está apretando el cinturón por eso algunos dicen dónde está el plan para reactivar la economía porque lo que quieren es un banderazo de salida para de nuevo instaurar la corrupción en México y eso no”; agregó, “la fórmula era privatizar ganancias y socializar pérdidas. Eso ya no se puede seguir aplicando. Es juicio práctico, no es por carga ideológica. Es que no podemos seguir con un modelo que nos ha llevado a la ruina, al empobrecimiento del pueblo”.
López Obrador recordó que en años atrás durante tiempos de crisis las deudas privadas de unos cuantos se convirtieron en deuda pública y “se dejó un boquete en las finanzas. Todavía estamos pagando los mexicanos esa enorme deuda”.
El presidente sostuvo que el coronavirus precipitó la caída del neoliberalismo, “un modelo fallido; por eso la crisis mundial en todo sentido. No es posible que afecte tanto una pandemia en lo económico, en lo social”. Consideró además, que con su plan, pronto se va a reactivar la economía porque “es un nuevo modelo” e insistió en que él ya sabía lo que pasaría con la pandemia: “Nosotros nos adelantamos, ya sabíamos. Esto es lo que está en el Plan Nacional de Desarrollo, no es algo nuevo, es profundizar lo que ya está en el Plan Nacional de Desarrollo porque nosotros, no lo olviden, dijimos que ya no íbamos a seguir aplicando la misma política económica que una y otra vez ha fracasado y que nos llevó a esta crisis, a la decadencia”.
En atención a una pregunta sobre si habría cambios en su gabinete, el presidente señaló que no habría movimientos porque está completo y muy tranquilo con su equipo de trabajo, “estamos trabajando más de lo acostumbrado, estamos aplicados. Tuvimos trabajo el sábado, trabajamos el domingo, se reunió el Gabinete Ampliado el domingo, ayer, estuvimos definiendo todo lo que se está llevando a cabo o, mejor dicho, revisando y definiendo las políticas hacia adelante”. Indicó que ha tenido reuniones y logrado el consenso en medidas de austeridad como la disminución gradual de sueldos a altos funcionarios públicos: “Es un equipo y les agradezco mucho a mujeres y hombres, es gente muy preparada, inteligente y sobre todo con muchas convicciones, con mucho amor al pueblo”.
También se le pidió un mensaje para los mexicanos a los que les preocupa quedarse sin empleo, López Obrador señaló que al momento no ha habido despidos masivos y aunque se prevén, él va a esperar “¿por qué nos adelantamos?, ¿por qué no somos optimistas?”.
El presidente llamó a seguir actuando de manera responsable quedándose en casa y a no confiarse para superar la epidemia: “Lo vamos a lograr a pesar de los pesares; vamos a salir adelante. No nos va a vencer el coronavirus”.