CONDICIONES DE LA POBREZA EN LA ENTIDAD - LJA Aguascalientes
17/11/2024

El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL 2005) ofrece una estimación sobre el número de personas que a escala municipal se encuentran en condiciones de pobreza alimentaria ($584.34 por mes por persona en el medio rural, por $790.74 en el urbano) pobreza de capacidades ($690.87 por mes por integrante de familia rural, por $969.84 en el urbano) y pobreza de patrimonio ubicada en $1,060.34 en el rural y $1,586.54 en el medio urbano. Aunque por desgracia la metodología que utiliza no permite la posibilidad de contar con datos para unidades político administrativas de menor escala, tales como localidades y/o colonias, que resultan fundamentales para identificar zonas de atención prioritaria en un programa o en programas orientados a la atención de la pobreza urbana.

En Aguascalientes la pobreza patrimonial se redujo de 1994 al 2000 de un 52% a un 37.8% para de nuevo regresar prácticamente a su nivel original en el 2005  (51.1%). En materia de pobreza de capacidades, contenida básicamente en el conjunto anterior, tenemos que ascendió al 25.4% en 1994, se redujo sustantivamente a sólo el 16.9% en el año 2000, para incrementarse de nueva cuenta en el 2005 hasta 23.6%. Finalmente en pobreza alimentaria, la más lacerante de las tres, teníamos al 17.5%  en estas condiciones en 1994, se redujo al 11.2 en el 2000 y aumentó a 14.9 en el 2005.


Mientras los valores nacionales de las tres categorías de la pobreza
disminuyeron del 2000 al 2005 en Aguascalientes se agudizaron.

De la Zona Metropolitana destacaremos que tenía en el 2005 menos
pobreza alimentaria San Francisco de los Romo que el propio municipio
de la capital del estado. Jesús María está por encima de la media
nacional en materia de pobreza alimentaria.

 

CONEVAL: Porcentaje de Pobreza alimentaria en el estado de Aguascalientes por municipio 2005 Nivel

Socioeconómico

Por otra parte la Asociación Mexicana de Agencias de Investigación
de Mercados y Opinión Pública (AMAI), propone otro método para conocer
el poder adquisitivo de los hogares realizando una medición de niveles
socioeconómicos en la que divide a estos en seis grandes rubros:

1. Nivel A/B: representa a los hogares con mayor poder adquisitivo


2. Nivel C+: son los hogares de la clase media alta

3. Nivel C: incluye a los hogares de clase media

4. Nivel D+: representa a los hogares con poder adquisitivo de sobrevivencia

5. Nivel D: son los hogares con un ingreso que en la mayoría de las veces no les permite adquirir lo necesario

6. Nivel E: son los hogares más desprotegidos

Para la AMAI, el país presenta sólo un 3.8 por ciento de viviendas
con nivel socioeconómico “A/B” que son los de mayor poder adquisitivo.
En el caso de Aguascalientes, se encuentra ocupando el décimo sexto
lugar nacional en niveles “A/B” pues pertenecen a él 3.6% de los
hogares. Un 19.6% de las viviendas se presenta con el menor nivel
socioeconómico “E” cuyo poder adquisitivo no alcanza ni para obtener la
canasta básica necesaria; en Aguascalientes, de nivel “E”, sólo se
cuenta con el 4.7% del total, ubicando a la entidad en el lugar 28 de
32 entidades federativas (diez por ciento menos que los reportados en
pobreza alimentaria)  El 30.8% de los hogares en el ámbito nacional se
encuentra clasificado como “D+” cuyos ingresos son apenas suficientes
para adquirir lo indispensable.[1]

Para el caso de Aguascalientes tenemos que el 60 por ciento de
nuestros hogares pertenecen a los niveles socioeconómicos  “D+ y D”,
cuando la media nacional apenas llega al cincuenta por ciento. Es decir
que es un nivel socioeconómico típico de Aguascalientes. De hecho somos
el tercer lugar nacional en este renglón. Los niveles D y D+, están muy
propensos a perder su exiguo poder adquisitivo, por incremento de
precios, por aumentar un miembro en la familia, por pérdida de empleo,
gastos imprevistos, o incremento en los intereses de sus deudas.
Gracias a estas características incurrimos con facilidad en un
incremento de pobreza urbana en CONEVAL. Recapitulando: en clases
altas, los hogares aguascalentenses se ubican dentro del promedio
nacional; los hogares de clases medias son más típicas de
Aguascalientes y pierden con facilidad el suficiente poder adquisitivo,
incurriendo en pobreza urbana patrimonial; además tres de cada diez son
de clase baja.

El ingreso familiar por nivel socioeconómico en el país para la AMAI
se estima de $0.00 a $2,699 para nivel E; de $2,700 a $6,790 para nivel
D; de $ 6,800 a $11,599 para nivel D+; de $11,600 a 34,999 para nivel
C, de $35,000 a $84,999 para nivel C+ y de $85,000 o más para nivel
A/B. Los datos son familiares a diferencia de los de CONEVAL que son
por persona, dada nuestra mayor fecundidad al dividir por persona nos
queda menos por repartir en lo individual.

Del total de localidades urbanas mayores a 40,000 habitantes, el
7.5% corresponde a nivel A/B; el 13.6% a nivel C+; el 18.8% a C; 32.6%
a D+; 19.5% a D y el 8% a nivel E (nivel más bajo). Los datos de la
AMAI son muy semejantes a los obtenidos a partir de la Encuesta de
Ingreso Gasto de los Hogares (ENIGH) del INEGI.

El promedio de educación del jefe de familia por nivel
socioeconómico es en su mayor porcentaje de licenciatura completa para
el caso del nivel A/B; Licenciatura incompleta para C+; carrera técnica
o licenciatura incompleta para C; primaria completa o secundaria
incompleta para D+; de primaria completa para D y de primaria
incompleta para nivel E.

Niveles Socioeconómicos por Entidad Federativa 2007-2008

Fuente: Consulta Mitofsky Niveles Socioeconómicos por Entidad Federativa 2007-2008 aplicando la regla 13×6 de la AMAI 

Y aprovechando las bases de datos   de encuestas nacionales aplicadas en el 2007 y 2008.

Lo anterior significa que contamos básicamente con personas, que
pertenecen a hogares que destinan entre el 40 y el 50 por ciento de sus
ingresos para alimentos y bebidas consumidas dentro del hogar; pago de
servicios (gas, agua, electricidad) y transporte público. Es el tipo de
hogar que con cualesquier alza en los precios de los bienes o servicios
propios de la canasta básica familiar se descompensan de inmediato.
Máxime cuando se presentan gastos catastróficos, relativos a la salud o
a la quiebra de un negocio. Lo anterior requiere el planteamiento claro
y programático de políticas públicas direccionadas y especializadas en
apoyar familias de nivel d y d+, para resarcirles permanentemente el
poder adquisitivo. Valga el proponer, por ejemplo, el de obtener
ingresos adicionales en casa ofreciendo servicios de oportunidad como:
repostería, corte de cabello, aplicación de inyecciones, clases de
regularización de materias escolares u ofrecer otros oficios a
proporcionar entre vecinos como arreglos de pintura, electricidad,
fontanería, carpintería entre otros, dados a conocer a través de
directorios vecinales que contienen a manera de una sección amarilla
los nombres, direcciones y teléfonos del vecindario con el agregado de
cuáles servicios ofrecen a la comunidad con miras a obtener un ingreso
adicional, por lo demás muy necesario, sin salir de casa o del
vecindario.

 

EL INDICE DE MARGINACIÓN EN AGUASCALIENTES

Otra forma de medir pobreza, básicamente “estructural” o “puertas
afuera” y que valora el cumplimiento institucional con quienes se
encuentran en rezago, es el índice de marginación cuya fuente de
información es el Consejo Nacional de Población que los calcula a
partir de los Censos Generales de Población y Vivienda, del Instituto
Nacional de Estadística y Geografía  (INEGI), por lo que se ha
calculado el índice con los censos de 1990 y de 2000; así como con los
Conteos Generales de Población y Vivienda de 1995 y de 2005. Podemos
apreciar que el municipio de la capital y los dos conurbados adyacentes
son los que cuentan con un índice de marginación menor.

Acá se valora el que los habitantes de una localidad cuenten con los
servicios necesarios como luz, agua y drenaje; que cuenten con escuelas
oficiales y clínicas del Sector Salud.- Se trata de que la gente viva
en calles pavimentadas,  guarniciones y banquetas  de cemento; tenga
escolaridad y por ello un ingreso suficiente; no viva en hacinamiento y
tenga prácticas de control de la natalidad.

 

Componentes del

Índice de Marginación

Educación

Al hablar de sus principales componentes se hace referencia en
primera instancia al correspondiente a la educación en donde se
considera que el acceso a esta constituye un aspecto muy significativo
para que las personas puedan realizar exitosamente sus proyectos de
vida. En este sentido se considera que la mayor intensidad de la
marginación social, deriva de la falta de participación en el sistema
educativo, para tal efecto se registra a la población que carece de los
conocimientos que se adquieren en los primeros niveles de la educación
básica, cuya desventaja se acentúa entre los adultos. Los indicadores
que reflejan los rezagos más significativos y la población con mayor
desventaja son:

a).- Porcentaje de la población de 15 años o más que es analfabeta.

b).- Porcentaje de la población de 15 años o más sin primaria completa.

Al analizar a estos dos indicadores se puede observar que el
municipio de Calvillo es el que presentaba el menor grado de desarrollo
en estos rubros; en estos aspectos estas situaciones originan desde su
base una precaria estructura de oportunidades sociales para sus
ciudadanos. También hay que destacar que los municipios de Asientos,
Tepezalá y el Llano observaban una situación de desarrollo educativo
muy precario, situación contraria al de Aguascalientes que es el de
mayor concentración poblacional y observa los valores más bajos en
estos dos aspectos.


Vivienda

La población que habita viviendas que carecen de los servicios
básicos o de los espacios adecuados están expuestos a mayores
impedimentos para gozar de una vida digna. En este sentido se toman
cinco indicadores básicos que son:

–       Porcentaje de ocupantes en viviendas particulares sin agua entubada

–       Porcentaje de ocupantes en viviendas sin drenaje, ni sanitario exclusivo

–       Porcentaje de ocupantes en viviendas particulares sin energía eléctrica

–       Porcentaje de ocupantes en viviendas particulares con piso de tierra

–       Porcentaje de viviendas con algún nivel de hacinamiento

 En primer lugar destacar que la región oriente del estado que es la
más marginada y está conformada por los municipios de Asientos, el
Llano y Tepezalá, los cuales ocupan respectivamente los tres primeros
lugares en marginación de la entidad; a este conjunto de municipios
habría que dotarlos de los servicios básicos y las oportunidades de
desarrollo para de esta manera impulsarlos al bienestar. Por otra parte
se observa al municipio de Calvillo el cual a pesar de tener una buena
dotación de servicios es el más bajo en lo referente a la educación;
con acciones encaminadas a orientar el abatimiento del indicador en
este rubro, el municipio se ubicaría dentro de los lugares con mayor
bienestar en la entidad. La Zona Metropolitana de Aguascalientes
presenta las localidades con menor índice de marginación en el estado.


[1] Consulta Mitofsky Niveles Socioeconómicos por Entidad Federativa
2007-2008 aplicando la regla 13×6 de la AMAI  y aprovechando las bases
de datos de encuestas nacionales aplicadas en el 2007 y 2008.


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