Luego de darse a conocer los robos de combustible de los que ha sido la principal víctima Petróleos Mexicanos (PEMEX), el senador panista, miembro de la comisión de energía, Rubén Camarillo Ortega exigió que las investigaciones de los vínculos de funcionarios con el fraude “llegue hasta sus últimas consecuencias”.
Camarillo pidió que la Procuraduría General de la República (PGR) y las autoridades correspondientes intervengan para detener a quienes sean los responsables de dicha situación.
Dijo que la situación es complicada aunándole a ello los problemas financieros por lo que atraviesa la paraestatal. Señaló que las pérdidas van mas allá de los 10 mil millones de pesos, considerando que la situación se agrava con los robos y las complicidades que se practican en el entorno.
Desde su perspectiva es la propia paraestatal la única responsable de estas acciones, en el entendido de que PEMEX levantó la denuncia de este ilícito y fue la PGR quien absorbió el trámite, subrayó que las mismas se encuentran en este momento en una fase inicial y se espera que continúen con objetividad y castigando con argumentos a quienes resulten ser los responsables, “caiga quien caiga”.
Dijo que como parte de las tareas del senado, ya se ha presentado un punto de acuerdo en el que se pide la comparecencia del director de PEMEX, Jesús Reyes Heroles, mencionando que aun no se vota pero la expectativa es que puedan sentar a comparecer al funcionario.
Apuntó que como parte de la comisión de energía se ha mantenido al tanto, por lo que detalló que la problemática no es una cuestión novedosa, por el contario tiene varios antecedentes donde se relacionaba con la delincuencia organizada. Aquí lo nuevo es la complicidad de los mandos dentro del servicio público.
En este sentido, dijo que hace falta trabajar en las acciones preventivas, sobre todo en los ductos donde transita el combustible, a través de ello concibió que se pude conocer el ligar de las tomas clandestinas, “hay sistemas tecnológicamente hablando muy avanzados que detectan de manera puntual y rápida donde hay diferenciales de presión que pudieran suponer” una fuga.
Insistió en que la paraestatal tiene la capacidad financiera para poder sostener nuevas aplicaciones que garanticen la seguridad del combustible, ejemplificando en sistemas que son de rastreo aplicados a la tubería y que señalan inmediatamente el problema.
Confió en que las sentencias para quienes estén cometiendo este tipo de ilícitos serán más rígidas porque el marco jurídico de esta índole fue apenas modificado hace algunos meses.
Finalizó con la reflexión de que esta es una de las muchas actividades que se desarrollan de manera cíclica, explicando que quienes hurtan con miles de litros, siempre tendrán un cliente potencial que permitirá la sobrevivencia de este tipo de delincuencia, con ello puntualizó en que no todos los gasolineros incumplen en esta perspectiva, pero es importe la conciencia de los compradores del combustible.