Como en un subibaja estamos recibiendo la información producida desde o con datos estadísticos, ya que así se manifiestan en nuestras emociones, una vez que las conocemos. Baste con retomar la nota sobre el crecimiento económico del país para cerciorarnos. El viernes pasado 31 de enero, recibíamos datos publicados por México ¿cómo vamos? Cuya cabeza titulaba: Aguascalientes, entidad con crecimiento económico más alto en la última década. Y cuyo gráfico estadístico sobre el promedio de 10 Años de comportamiento, el Gobierno del Estado editorializó: “De acuerdo a la última actualización del observatorio México ¿cómo vamos?, Aguascalientes se coloca como la entidad con el crecimiento más alto en la última década, con una tasa anual promedio del 5.1 por ciento. (…) Además de Baja California Sur y Quintana Roo presentan un crecimiento mayor al 4.5 %, lo cual indica un crecimiento sobresaliente respecto del promedio nacional”.
Después de esta subidota, perdonando la expresión, nos dan este martes 4 de febrero, un implacable bajón: Para julio del 2019 la entidad había aprobado siete de los ocho indicadores propuestos por la asociación, situación que, desde entonces, ha ido a la baja. (Fuente: Organización México, ¿cómo vamos?, realizado con base en información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Que publica: LJA.MX. Adrián Javier Flores Nieves. Economía. De los Ocho Semáforos Económicos, Aguascalientes sólo Obtuvo Dos en Verde. 04/02/2020).
Información que la misma fuente explica: “De acuerdo al indicador de crecimiento económico de la Aguascalientes es una de las 17 entidades de la República mexicana que tuvo una tasa negativa de actividad económica, registrando un -.5% en el tercer trimestre del 2019 en comparación con el mismo trimestre pero del año 2018”.
Lo que se contrasta con lo que era una expectativa: “La meta propuesta por México, ¿cómo vamos? Era tener un crecimiento del 4.5% anual, lo cual no se logró en poco más de la mitad de los estados”.
Para el caso específico de Aguascalientes. La medición es puntual y severa: Según el semáforo obtuvo rojo en tres indicadores, amarillo en otros tres y verde sólo en dos.
El primer indicador que se observa es precisamente el del “crecimiento” económico en donde, en vez de acercarse a la meta del 4.5%, se obtuvo un -.5% anual. También reprobó con el número de empleos formales generados acumulados para el cuarto trimestre del 2019, donde sólo se tomaron cuenta de 6,993 trabajos, cuando la propuesta era crear 12 mil empleos acumulados al cuarto trimestre del mismo año. El último foco rojo es el de ocupación del gobierno; la meta era la media nacional, un 3.9% de ocupación del gobierno laboral, sin embargo, Aguascalientes creció del tercer trimestre del 2018 al tercer trimestre del 2019 de un 4.1% a un 4.5%.
Las candilejas de luz mediana, siguen a continuación: – La productividad del estado bajó de $191 a $186 del penúltimo trimestre del 2018 al penúltimo trimestre del año pasado, por lo que el semáforo se marcó en amarillo; aunque se tuvo una mejor productividad que el dato nacional ($160), también se tuvo una disminución mayor. En Aguascalientes la pobreza laboral subió de un 34.8% a 36%, del tercer trimestre del 2018 al mismo del 2019, dado que no se pudo reducir el porcentaje de la población que no puede adquirir canasta alimenticia con su ingreso a laboral, pero se tuvo un desempeño mejor al del nacional, es que se le dio también amarillo. La desigualdad laboral también fue calificada con amarillo ya que no se logró disminuir la disparidad en el ingreso laboral, del .310 que se obtuvo en el tercer trimestre del 2018 se subió a .333 para el mismo trimestre del año pasado.
Y luego siguen las claridades más intensas. Los dos indicadores obtenidos en verde fueron el de la informalidad laboral y el de deuda pública: del tercer trimestre del 2018 al mismo del 2019 se redujo de un 40.7% a un 38.2%, además, con base en información del 2017 al 2018 Aguascalientes redujo su deuda pública de 1.2% a .9%.
Total que ¿cómo nos pintamos en crecimiento económico, con perspectiva de desarrollo social?, que al final es lo que importa, porque o hay bienestar o no lo hay, como hay calidad de vida o no la hay. Ahora lo intuimos, La estadística como la estratigrafía es una visión abstracta de la realidad -más o menos precisa-, pero siempre relativa y condicionada al punto de vista del cual parte. Dicho de otra manera, el o los marcos conceptuales de referencia efectivamente encuadran el espacio o los objetos que visualizan. Lo que no es sino una verdad de prurito de la certeza que aporta una metodología científica, incluidas desde luego las ciencias sociales. Lo que ya en los años ochenta dio pie al extenso debate sobre lo que conoció como la miseria de la Sociología.
Dicho lo cual, a lo que sin duda tenemos derecho es a tratar de obtener una imagen creíble de nuestra realidad. Y esta es posible proponiendo rasgos y elementos verosímiles, que podemos visualizar como términos en contraste. Veamos.
En primer término. Sí tenemos delineado un rostro, y es el de una mujer: Queda explícito al identificar el rubro de Embarazo Adolescente en el que Aguascalientes se ubica en la posición 23 y un valor de 72.42 a nivel nacional, que mantiene en los datos de 2012 y con un valor de 71.99; comportamiento que rubrica con este comentario: Es en el renglón de Sociedad incluyente, preparada y sana, resalta la entidad hidrocálida por los embarazos en adolescentes. Es decir, por el número de hijos que tienen las mujeres adolescentes. La maternidad temprana puede reducir la probabilidad de educación tanto de la mujer como de sus hijos.
Así lo constató la última lectura sobre Aguascalientes, (del Índice de Competitividad) en Estado de Derecho, Economía Estable y Aprovechamiento de las Relaciones Internacionales; y descendió en el ranking nacional en Manejo Sustentable del Medio Ambiente, Sociedad Incluyente y Preparada, Gobiernos Eficientes y Eficaces, Mercado Laboral, Precursores e Innovación en los Sectores Económicos. (Índice de Competitividad Estatal del IMCO 2014 con datos al 2012, con reseña de Eugenio Herrera Nuño. Cita mía: LJA. Nuestra sopa demográfica. Sábado 17 de Enero, 2015).
También tenemos delineado un torso, un tanto asimétrico: Aguascalientes no está en el aire, no viene del cielo azul ni descansa en el éter del Hiperuranio. “avanzó en Relativo a “sociedad incluyente y preparada” frente al conjunto de las variables que conforman la misma tabla, destaca la relativa al coeficiente de desigualdad de los ingresos, en donde descendemos de la posición 10 a la 14, en el mismo periodo 2010-2012, con un valor de 0.59.
Y vuelve a repetir la silueta de la mujer aguascalentense: En la fuerza laboral, ella, desciende de la posición 12 (2010) a la 18 (2012); pero, en el ingreso promedio de la mujer hay una sensible mejoría al pasar de la posición 17 con valor de 0.76 (2010) a la 11 con 0.8 (2012), siempre a nivel nacional. Datos que hoy son actualizables. . (Nota mía: LJA. Ideas hechas programas. Sábado 18/05, 2019).
En tercer término. Se ensaya de darle a esa fisonomía un grado, una dinámica y un sentido humano: En términos de compromiso institucional, se quiere una ciudad que considere a los seres humanos como sus protagonistas más importantes; una ciudad en donde lo verdaderamente significativo sea la gratitud de la convivencia humana. Si este postulado se hace verdad, entonces el “desarrollo urbano” no dice referencia inmediata a desarrollos inmobiliarios, vialidades, movilidad, infraestructura, equipamiento, expansión, etc., sino –en primer lugar- a posibilitar un espacio de encuentro y convivencialidad del tamaño y proporciones humanas. En donde la jerarquización de los elementos físicos parten de la dimensión humana y, por tanto, de la interacción social. // Así lo imaginó y diseñó el Programa de Desarrollo Urbano 2030.
Lineamientos bajo los cuales queda claro que la ciudad futura de Aguascalientes debe ser una ciudad que crezca en forma sustentable y bien ordenada territorialmente; que favorezca la cohesión social, la seguridad pública y la capacidad participativa de sus ciudadanos; que sea competitiva y creadora de empleos dignos; que sea incluyente, compacta y diversa
¿Qué tanto lo ha logrado? Estudios serios todavía bosquejan una ciudad distante de esos objetivos. – La situación especialmente crítica prevalece en algunos municipios del estado, cuya descripción es la siguiente: Municipios con porcentajes de población en situación de pobreza extrema: 1. San José de Gracia 5.3%, El Llano 5.3%, Asientos 4.4%, Rincón de Romos 3.3% y Calvillo 3.1 por ciento. En pobreza, se encuentran: 1. San José de Gracia 59.6%, Calvillo 56.8%, El Llano 55.1%, 4. Asientos 54.0%, y Tepezalá 50.7 por ciento. (Estimaciones del Coneval con base en el modelo estadístico 2015 para la continuidad con el MCS-ENIGH y la Encuesta Intercensal 2015). (Cfr. Nota mía. LJA. El desarrollo como imperativo. Sábado 25/05, 2019).
Pues bien, está métrica para nuestro estado, produce el siguiente retrato hablado: -Balance y prospectiva del desarrollo social en Aguascalientes 2018. El Informe Anual sobre la Situación de Pobreza y Rezago Social en el estado de Aguascalientes y sus municipios destaca la reducción consistente de la población en condición de pobreza y de la población en condición de pobreza moderada en el periodo comprendido entre 2010 y 2016. Así lo indican las cifras recabadas: Población en Pobreza, (2010) 456,837 / Coeficiente Gini, CG. 0.507; (2012) 467,560 / CG 0.479; (2014) 442,866 / CG 0.486; (2016) 369,652 / CG. 0.416 -* Estimaciones del Coneval con base en el MEC 2016 del MCS-ENIGH. (Monitoreo periódico del Coneval que publica la Sedesol en su Informe Anual sobre la Situación de Pobreza y Rezago Social 2018. Con datos del Presupuesto de Egresos de la Federación 2017).
El coloso que pudimos esbozar, en la primera imagen, se nos torna con pies de barro -en la segunda-, lo cual nos permite inferir que tenemos un largo reto por avanzar, y que la imagen estadística es absolutamente relativa al punto de vista sobre el cual debamos enfocar.