- Dentro del dictamen del PEF 2020 viene contemplado un recorte de mil 71 millones pesos para el Instituto Nacional Electoral, el cual tendrá resonancia en las elecciones del 2021
- El INE recibirá 11 mil 367 millones de pesos para su operatividad
- En caso de que el INE no pueda ejercer todo lo que está obligado podría delegarle actividades a los institutos estatales electorales y éstos tendrían que erogar de sus propios recursos
En el dictamen del Presupuesto 2020 vienen contemplados recortes considerables en los recursos de organismos autónomos como el Instituto Nacional Electoral (INE) y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), los cuales vienen acompañados de fuertes críticas hacia el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF); que ya fue aprobado en lo general. Contrario a lo que se les sucedió a éstas dos instancias, así como a la Fiscalía General de la República (FGR), en dicho documento la Secretaría de Bienestar, por obvias razones, resultó beneficiada.
Dentro del proyecto del presupuesto lanzado por el propio INE, se consideraba un monto de 12 mil 493 millones 356 mil 325 pesos, que serían suficientes para cumplir todas las obligaciones del órgano nacional electoral que, de hecho, desglosó en el proyecto.
De acuerdo al PEF, el INE recibirá mil 71 millones de pesos menos para su operatividad en el próximo año; 11 mil 367 millones serán los que se etiqueten para la operación del instituto, aparte, cinco mil 239 millones serán para el financiamiento de los partidos nacionales. La reducción es de aproximadamente .6 por ciento.
Al respecto, Luis Fernando Landeros Ortiz, consejero presidente del Instituto Estatal Electoral (IEE) de Aguascalientes, comentó que sin duda estos recortes serán un reto sobre el modo que estas instancias tendrán que operar. Agregó que “obviamente que tienen que buscar, bajo la filosofía de hacer lo mismo con menos, ya dejen ustedes que se va a hacer más con menos. Aquí creo que la meta o el reto será conservar la operatividad de los institutos, de todas las autoridades autónomas, con menos presupuesto”.
Explicó que cada uno de los presupuestos que presentan las autoridades tienen sustento en las actividades que desempeñan y en sus obligaciones constitucionales: “No son ministraciones o partidas que soliciten por solicitar, sino que tienen un sustento en actividades sensibles, y no sólo para la propia autoridad, sino para la misma ciudadanía”.
Luis Fernando Landeros Ortiz señaló que incluso este recorte también afectaría al mismo IEE. Lo anterior derivado de que hay actividades que el INE retoma, y con la disminución de capital, el instituto tendrá que delegar actividades a las instancias locales, lo cual representaría un impacto presupuestal en las arcas estatales: “Sí lo vemos con preocupación, es un reto y este último cierre del año tendremos que estar analizando de qué manera vamos a hacer frente a las propias obligaciones que tenemos ya asignadas”, detalló el consejero presidente.
Si frente a una elección se tiene un INE presupuestalmente debilitado, cabe la posibilidad de que el INE descanse ciertas actividades que de su capital no podrá gestionarse en los institutos estatales, haciendo que éstos eroguen una cantidad mayor.
Landeros Ortiz señaló que las elecciones del 2021 son las más grandes que haya tenido el país, superando a las del 2018. Lorenzo Córdova Vianello, consejero presidente del INE, consideró que este recorte presupuestal afectará a dicho proceso electoral. Éste comenzará desde septiembre del 2020; ahí, las 32 entidades federativas tendrán elecciones locales de diferente índole.