¿Se puede reconocer que Evo Morales cambió la situación económica de su país (generando tasas de crecimiento que para México serían milagrosas en este momento) y ayudó, según apuntan los números que conocemos, a disminuir de manera importante la pobreza en Bolivia?
Sí.
¿A pesar de ello se puede considerar desafortunado, autoritario y dictatorial que haya intentado perpetuarse en su encargo, a través de formulaS legislativas a modo que desafiaban lo que era el clamor popular?
También.
¿Es bueno para las democracias, en particular, que un presidente deje su cargo luego de perder y violar un referéndum para su continuidad y, en general, que haya sucesiones presidenciales por mejor que el desempeño del presidente haya sido?
Sí.
¿Es mal augurio que en esa coyuntura democrática una presidenta autoproclamada tenga como primer acto decir que la biblia regresa a palacio nacional?
También.
¿Llevan razón nuestro presidente y nuestro canciller en ignorar diplomáticamente a quienes se han presentado como “presidentes” legítimos tras el golpeteo político en Venezuela y Bolivia?
Sí.
¿El presidente de México hizo lo mismo, aduciendo las mismas razones, al proclamarse presidente legítimo en 2006?
También.
¿Se puede reprobar que cualquier presidente sea autoritario, busque la manera de prolongar su mandato y sostenga su presencia hegemónica a través de una idea de superioridad moral?
Sí.
¿Se puede, sin embargo, también reprobar que detrás de las luchas políticas intestinas de los países se presente la sombra de los Estados Unidos de Norteamérica?
También.
¿Es deseable que las diferencias políticas se resuelvan siempre a través del diálogo y los caminos pacíficos, a través de las propias instituciones?
Sí.
¿Es, por definición, casi imposible que todo conflicto pueda resolverse a través del diálogo y los caminos pacíficos, a través de las propias instituciones?
También.
¿Es absurdo que se compare la permanencia al frente del gobierno de Angela Merkel como canciller federal en la república parlamentaria de Alemania con la permanencia de Morales en Bolivia, en un sistema hegemónico?
Sí.
¿Independientemente de esto, es posible considerar que la raza y la etnia nos hacen ver a las personas de manera diferente, que, de manera suscita, México puede ser calificado de un país racista?
También.
¿Algunas personas han, por un lado, celebrado que los militares apoyen al pueblo en sus manifestaciones en Chile y, por otro, criticado que en Bolivia lo hagan?
Sí.
¿Es posible que se deba a sesgos personales, a que la consistencia suele ponerse después de las filiaciones políticas?
También.
¿Se puede siempre cambiar las reglas del juego de la democracia?
Sí.
¿Es antidemocrático cambiarlas no para quien venga posteriormente, sino para beneficio propio e inmediato, violando así las propias reglas con las que un presidente se erigió como tal?
También.
/Aguascalientesplural | @alexzuniga | TT CIENCIA APLICADA