La Fiscalía General de Bolivia ordenó este domingo la detención de los miembros de los tribunales electorales nacional y departamentales, para someterlos a un proceso penal con base en la auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA) que dijo haber detectado irregularidades en el reciente proceso electoral del país.
“Se ordena el inicio inmediato del procesamiento y juzgamiento de los vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y los tribunales departamentales, por los hechos irregulares que fueron expuestos en la auditoría electoral que realizó la OEA”, organización que recomendó la realización de nuevas elecciones, dijo en un comunicado a media tarde el fiscal general, Juan Lanchipa.
El órgano electoral ha estado en el centro de la crisis política boliviana por haber cerrado los comicios del 20 pasado con un cómputo oficial que dio victoria en primera vuelta, y con ello tercera reelección, a Evo Morales.
La presidenta del TSE, María Eugenia Choque, anunció inmediatamente después su renuncia en las redes sociales, poniéndose a disposición del fiscal casi al mismo tiempo que el presidente Evo Morales confirmara su dimisión en un mensaje por televisión.
La policía informó posteriormente que, en cumplimiento de órdenes de fiscales, había detenido a los presidentes y vocales de al menos tres tribunales electorales departamentales y se disponía a ejecutar ordenes de detención contra las demás autoridades electorales.
De los siete miembros del TSE, seis son designados por la Asamblea Legislativa Plurinacional y el restante por el presidente del Estado.
Con información de La Jornada