- A lo largo del año se han concretado alrededor de 20 adopciones; ya hay 20 niños listos para asignación y 30 familias listas para adoptar
- Cuando un niño se acostumbra a la vida en los Centros de Asistencia Social, en ocasiones se niegan a acercarse a las familias
Ayer se llevó a cabo la primera sesión de trabajo del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), Alianza Centro-Bajío-Occidente 2019, donde participaron la presidente del DIF estatal, Yolanda Ramírez, y sus homólogas de Guanajuato, Adriana Ramírez Lozano, y de San Luis Potosí, Lorena Valle Rodríguez, y en la que se trató desde diferentes perspectivas el tema Familias de acogida.
La procuradora de Protección de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Karla Yazmín Esparza Lazalde, dijo que, aunque en la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes ya estaba previsto el término familia de acogida, no fue hasta el 29 de mayo que fue lanzado el reglamento. Éste fue tratado en parte por el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), y en conjunto fue pulido por la misma Procuraduría, que a su vez ha estado laborando de la mano con la Red Latinoamericana de Acogimiento Familiar (Relaf) para definir los lineamientos del término Familia de acogida.
Relaf es una organización en pro de los derechos de los niños y jóvenes, que además ve por sus necesidades una vez que éstos se ven separados de su familia.
Karla Esparza Lazalde expuso que hay un problema con los Centros de Asistencia Social: debido a que los niños que viven ahí se acostumbran a la vida en ese lugar, cuando una familia se acerca para llevárselo algún fin de semana, éstos se niegan.
Lo que se propone, dijo la procuradora, es evitar que los niños se acostumbren a vivir en un Centro de Asistencia Social. También cree que estos lugares sí deben de existir, pero sólo para adolescentes. En consecuencia, ofrecen como opción la familia de acogida, que según la ley se define como: “Aquélla que cuente con la certificación de la autoridad competente y que brinde cuidado, protección, crianza positiva y la promoción del bienestar social de niñas, niños y adolescentes por un tiempo limitado hasta que se pueda asegurar una opción permanente con la familia de origen, extensa o adoptiva;”.
Esta elección no es lo mismo que una familia preadoptiva. La familia preadoptiva es aquella que toma a un niño provisionalmente con el fin de acogerlo permanentemente, distingue la procuradora. El proceso que lleva la familia de acogida también se lleva a cabo a través del DIF, aunque no es completamente igual.
Nancy Xóchitl Macías, directora general del DIF, aclaró que el proceso de adopción, de la misma manera que el de familia de acogida, no es largo, de hecho, puede ser de entre tres a cuatro meses. A pesar de que por ciertas circunstancias terapéuticas el proceso se demore un poco, en general es ágil. El DIF estatal ha simplificado los trámites. El organismo también está dando con más frecuencia cursos con los que se podría movilizar más eficazmente el proceso.
Se está teniendo un acercamiento con el Poder Judicial a fin de que los juicios de pérdida de patria potestad de algunos niños -que ya llevan más tiempo albergados- puedan concluir para que sea posible ser asignados con alguna familia. Son 30 las familias que ya están listas para adoptar, mencionó Xóchitl Macías. A lo largo del año se han concretado alrededor de 20 adopciones y ya hay 20 niños listos para asignación, comentó.
La directora general dijo que es más difícil que los niños menores de ocho años encuentren hogar. Hace entender que la reunión de presidentes del DIF tiene como iniciativa enseñarles a los niños de Centros de Asistencia Social que existen otras opciones para que no crezcan de manera institucionalizada.