- “Es urgente que se adopte un modelo de vinculación nacionalista basado en el rigor académico y en las capacidades y fortalezas de las instituciones nacionales”: Sánchez Sesma
- Se debe fomentar una colaboración tripartita entre el sector empresarial, la academia y el gobierno con una visión estratégica enfocada en metas a largo plazo
El desarrollo nacional se alcanzará de forma más efectiva si el gobierno comienza a tomar sus decisiones con apoyo de la ciencia y en colaboración con la industria, pero aún quedan retos pendientes en la materia, como se mencionó durante el panel La vinculación desde los organismos académicos y gubernamentales, en el marco del Foro Binacional Canadá-México. Ciencia, tecnologías y desarrollo, el nexo academia-empresas.
“Es urgente que se adopte un modelo de vinculación nacionalista basado en el rigor académico y en las capacidades y fortalezas de las instituciones nacionales. Hoy en día tenemos la capacidad de desarrollar tecnología pero sí tenemos que tener la participación directa del Estado en tener planes”, comentó el premio nacional de Ciencias, Francisco Sánchez Sesma.
Para ello, es importante fomentar una colaboración tripartita entre el sector empresarial, la academia y el gobierno con una visión estratégica enfocada en metas a largo plazo y a desarrollar una economía del conocimiento más allá de una economía basada en la explotación de la mano de obra y de los recursos naturales.
José Francisco Albarrán, presidente de la Academia de Ingeniería, explicó que “si las empresas tuviesen un enfoque más tecnológico y vieran a más largo plazo entonces comenzarían a solicitar a las academias desarrollos científicos que saben que son de más largo aliento pero que lo consideren estratégico para estar en la posición que quieren estar en el mercado”.
La doctora Cecilia Noguez, del Instituto de Física de la Universidad Nacional Autónoma de México, ratificó la importancia de que las decisiones gubernamentales estén basadas en el conocimiento científico y tecnológico como un reto nacional que aún está pendiente: “(Es importante) poder crear un círculo virtuoso entre la academia y los aparatos gubernamentales. Los científicos, la academia, siempre enfrentamos algún problema complejo, el gobierno nos tiene que poner esos problemas, nos tiene que decir cuáles son”.
Coincidentemente y a propósito de que la doctora Julia Tagüeña, coordinadora general del Foro Consultivo Científico y Tecnológico y moderadora del panel anunció que en esos precisos momentos, en el Senado de la República, se habían aprobado las modificaciones al Artículo 3 constitucional “y con ello se reconoce en México como un derecho humano el acceso a los beneficios que la ciencia puede brindar”. Sobre esto, el presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, José Luis Morán dijo: “Esta legislatura en el Congreso de la Unión pasará a la historia por lo que acaba de lograr: introducir a la ciencia y a la innovación a nuestra constitución. La AMC siempre ha estado pendiente de las discusiones que las que ambas cámaras nos han invitado y seguiremos participando con el mismo entusiasmo”.
Con información del FCCyT