Desde hace muchos años el arte se ha utilizado para aliviar los trastornos mentales. La pintura, la música, el teatro y muchas otras manifestaciones han demostrado ser muy efectivas. Por esta razón las psicólogas de la Unidad de Psicoterapia Infantil Cielo Claro de la Secretaría de Salud hicieron un agradable convenio con el Instituto Cultural de Aguascalientes; favoreciendo que el grupo Artenautas hiciera una presentación ante los niños y sus familias, que asisten a terapia. La sesión fue un acto de diversión, teatro y belleza que además de aligerar considerablemente los conflictos emocionales que llevaron a estas personas a buscar la consulta, también les permitieron darse cuenta de que hay muchas maneras de encontrar la armonía y la serenidad. El plan de ambas instituciones es continuar haciendo presentaciones en el patio de juegos de Cielo Claro. Este acto demuestra mucho. Por principio que el arte bien dirigido y realizado por profesionales es terapéutico. Que las instituciones del Gobierno del Estado trabajan unidas por un bien común. Que la Salud Mental ha estado recibiendo un gran impulso en los últimos tiempos, porque a todos nos resulta claro que la vida diaria se ha convertido en una búsqueda permanente para librarnos del estrés. Todas las ciudades de nuestro estado están creciendo a ritmo acelerado, la industria, el comercio y otras actividades económicas atraen personas de los pueblos de nuestra entidad y de otros estados. El crecimiento poblacional obliga a los nuevos habitantes de nuestras ciudades a acomodarse donde puedan, en viviendas urbanas, posiblemente más pequeñas que las que tenían en sus lugares de origen. Ello ocasiona dificultades para adaptarse, insatisfacción y problemas de convivencia con los vecinos. Y esto se llama estrés social. La consecuencia es fácil de imaginar, angustia, irritabilidad, malhumor, depresión, violencia intrafamiliar y en algunos casos más graves, se puede llegar al alcoholismo y adicción a otras sustancias. Los niños son los más vulnerables ya que ellos resienten los conflictos de sus padres y además tienen que salir adelante con los suyos propios, como son el bullying en la escuela y en el barrio. Lamentablemente todo ello ha ocasionado que actualmente la edad de inicio de la depresión y la angustia se vea en niños más pequeños. La ideación suicida ya se detecta en edades tan tempranas como los siete a nueve años. El inicio en el alcoholismo y las adicciones también se comienza a ver en adolescentes, e incluso más jóvenes como doce a 14 años. Sin embargo, el panorama no es tan desesperanzador cuando podemos informar que se cuenta con unidades de Salud Mental dedicadas especialmente a niños y adolescentes, y que se tiene también el valioso apoyo de los grupos culturales que ofrecen nuevas alternativas. En Salud Mental y en Cultura vamos bien.