- 1,037 mdp son investigados por la Secretaría de la Función Pública
- La anterior administración estatal sigue dando de qué hablar en el tema de malversación de recursos
Más de dos millones 300 mil pesos es la cantidad con observaciones por desvío de fondos en Aguascalientes, de estos, mil 37 millones tienen seguimiento por parte de la Secretaría de la Función Pública y mil 300 millones por la Auditoría Superior de la Federación. Así lo dio a conocer el contralor general del estado, David Quezada Mora, quien refirió que se trata de asuntos que datan de la administración estatal anterior, del 2011 hasta el 2017, integrados por esta administración estatal.
Sobre los asuntos en manos de la Función Pública, algunos están en observación y otros ya en procedimientos para solicitar la reintegración de los recursos, en tanto que hacia la Auditoría Superior, se ha dado seguimiento a la presentación de información para evitar el pago de los montos y no se afecte a las arcas estatales.
En tanto a las presuntas irregularidades cometidas, todas se encuentran en proceso de lo que en la Contraloría se denomina “revisión”, de ahí que son 300 los expedientes iniciados por posibles procedimientos sancionatorios hacia ex funcionarios públicos y otros que pudieran estar en activo y que van desde la falta de documentos personales o desvío de recursos.
Se trata de asuntos ya enviados a la Sala Administrativa, de los cuales varios han sido regresados por algún dato que le hace falta a los expedientes, “vamos lentos, pero la idea es integrar un buen expediente para que se emita una resolución clara y en su caso se solicite la inhabilitación”.
Dejó en claro que ya con la nueva legislación en la materia, la Contraloría del Estado sólo está facultada para sancionar conductas no graves de los servidores públicos, y en caso de detectar anomalías graves, se integran los expedientes y se turnan a la Sala Administrativa del Poder Judicial del Estado y de ser necesario, hacerlo llegar hasta la Fiscalía Anticorrupción.
Lo que debe quedar de manifiesto es que la aplicación de la sanción respectiva es un proceso por demás lento, toda vez que deben ser presentadas las pruebas sobre las irregularidades administrativas encontradas, porque de lo contrario, simplemente son desechadas.
Quezada Mora aclaró que el hablar de desvío de recursos no tiene que ser que el funcionario señalado se haya quedado ellos para su beneficio personal, sino que hizo un uso inadecuado del presupuesto o bien, no respetó la etiqueta marcada de los dineros, “por ejemplo que el destino haya sido marcado para el pago de nómina y en lugar de eso se haya gastado en la compra de material de obras, en casos como esto se integra el expediente, se investiga a la dependencia y luego al funcionario”.