- Durante 23 años, Las Patronas han ayudado a 2 millones 384 mil migrantes y este doctorado abrirá las puertas para fortalecer su labor; señala Rigoberta Menchú
- Número de migrantes centroamericanos retornados desde México ha sido más grande que todos los deportados de Estados Unidos
En sesión solemne del Consejo Universitario y con motivo del 45 aniversario de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, el rector Francisco Javier Avelar González, en compañía de la Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú Tum, realizó la entrega del Doctorado Honoris Causa a Norma Romero Vázquez, coordinadora del grupo Las Patronas, por su extraordinaria labor humanitaria a los migrantes.
Al rendirles homenaje al ser merecedoras del máximo reconocimiento que puede brindar la Institución, el rector de la UAA, Francisco Javier Avelar González, destacó el trabajo que realizan las mujeres de la comunidad de La Patrona (en Amatlán de Los Reyes, Veracruz), quienes desde 1995 han dedicado su vida a brindar agua, alimentos, hospedaje, servicios básicos de salud y asesoría a los inmigrantes centro y sudamericanos, que diariamente atraviesan el país en los vagones del tren denominado como La Bestia, cuyo destino es la frontera con territorio estadounidense.
Mencionó el privilegio de integrar a Las Patronas al claustro de académicos que han recibido el Doctorado Honoris Causa y renovar, a través del ejemplo que dan estas mujeres todos los días, los votos de humanismo que han distinguido a la UAA desde que fue concebida como Universidad hace 45 años; razón por la cual se dará fuerte impulso a la comunidad universitaria en su quehacer integral.
Tras ser investida con el Doctorado Honoris Causa, Norma Romero Vázquez, comentó en representación de Las Patronas que alza la voz por los 2 mil 300 niños que han sido separados de sus familias desde abril a la fecha, entre ellos 100 menores a los cuatro años de edad, al momento de que sus padres son repatriados a causa de políticas antimigratorias; escenario que se recrudece, pues ya se observan familias completas viajando sobre los vagones de La Bestia, en su tránsito por México hacia los Estados Unidos.
Al mencionar la labor que realizan desde 1995, brindando asistencia humanitaria a los migrantes, Romero Vázquez señaló que la migración no sólo afecta a Centroamérica, sino también a México, un dolor compartido que no sólo debe verse, sino sumar acciones.
La doctora Honoris Causa por la UAA manifestó que, a lo largo de 23 años, Las Patronas se han enriquecido con las historias y sueños de cada una de las personas que pasan por su albergue o a quienes les brindan alimentos, por lo que ante los señalamientos que han recibido al considera que fomentan una práctica ilegal -la migración sin documentación, enfatizó que son los gobiernos quienes fomentan la migración al no brindar a sus habitantes óptimas condiciones de desarrollo, y que es gracias, a su familia unida, con amor y trabajadora, lo que le ha impulsado junto a sus padres, hermanas y otras personas a a actuar a favor de sus congéneres, por lo cual destacó que seguirán luchando para que las familias vuelvan a reunirse y en espera de que el fenómeno migratorio se reduzca.
La Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú Tum, honró la entrega del Doctorado Honoris Causa a Las Patronas porque gracias a su labor durante estos 23 años, cerca de 2 millones 384 mil personas provenientes de países como Guatemala, Nicaragua, El Salvador y Honduras recibieron algún tipo de ayuda, ya que anualmente son apoyados 108 mil migrantes; de tal forma que hizo un llamado de conciencia a todos los asistentes a realizar acciones positivas diariamente a favor de la sociedad sin importar el origen del que provengan y rompiendo brechas de desigualdad mediante labores desinteresadas, como lo hacen Las Patronas.
Menchú Tum resaltó la importancia de que este grupo de mujeres reciben el galardón que la UAA les entregó, ya que les permitirá abrir aún más las puertas de todas las universidades y la academia universal para ser portavoces de una sociedad humanista e integral, haciendo de su labor una educación para la vida.
Durante su intervención, el gobernador constitucional del estado de Aguascalientes, Martín Orozco Sandoval, destacó la labor de la UAA desde hace 45 años, que significó para muchos jóvenes, sobre todo para las mujeres, tener la posibilidad de acceder a más opciones de educación superior, sin la necesidad de emigrar hacia otros estados y permanecer al lado de su familia.
A casi medio siglo, la Universidad Autónoma de Aguascalientes ha entregado a la comunidad miles de mujeres y hombres que desde las más diversas actividades económicas y sociales, contribuyen al desarrollo del país y la entidad, por lo que enfatizó que la UAA nació para trascender y para que sus egresados también lo hagan en la ciencia y el conocimiento, pero sobre todo en la práctica de los más elevados valores del servicio y del humanismo.
Al señalar que la educación impulsa el desarrollo de las naciones, al igual que la labor de mexicanas y mexicanos ejemplares, como Las Patronas, manifestó que el gobierno estatal se une al reconocimiento de la UAA a este grupo de mujeres campesinas, por su invaluable labor de ayuda humanitaria que representa una luz de esperanza en el duro camino de aquellos quienes dejan patria y familia para ir en busca de una mejor vida en tierra extraña, por lo que indicó que la Autónoma de Aguascalientes y los aguascalentenses comparten el ideal de fortalecer la unidad de las diversas familias, de que no tengan la necesidad de migrar y de que en México puedan desarrollar todo su talento.
Jan Jařab, representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, apuntó que en los últimos años, el número de migrantes centroamericanos retornados desde México ha sido más grande que todos los deportados de Estados Unidos, por lo que ante la brecha existente entre el discurso y la realidad es necesario emprender políticas públicas que eviten ampliar las problemáticas y vulnerabilidad de las personas en tránsito.
Señaló que las personas migrantes deben evitar el contacto con las autoridades del estado para no ser deportados, por lo que esta circunstancia les obliga a ir a canales de tránsito más peligrosos, pero lo correcto es lo contrario: brindar apoyo a los migrantes bajo un principio de servicios abiertos y respeto a los Derechos Humanos.
El representante de la ONU-DH en México explicó que se puede considerar un modelo al cual llamó cortafuegos o firewall, una regla que se va aplicando en varios países y ciudades como Portugal, mediante la cual se brindan servicios de salud, educación, entre otros, sin que se realicen denuncias a autoridades migratorias, un proyecto en ciernes que, de instrumentarse, sería compatible con la sociedad mexicana para la generación de políticas públicas específicas en favor de los migrantes.
Destacó que, la entrega del Doctorado Honoris Causa a Las Patronas por parte de la UAA es un espacio que contribuye a la concientización y constitución de una sociedad en defensa de los Derechos Humanos, ante lo cual las universidades mexicanas han jugado un papel fundamental para la formación, no sólo de profesionistas y técnicos, sino también de seres humanos íntegros.
Jan Jařab manifestó que es necesario emprender acciones para atender los peligros a los cuales se enfrentan las personas en situación obligada de movilidad por fronteras nacionales, ya que proceden de las mismas comunidades afectadas por los mismos problemas de pobreza, inseguridad y violencia, lo cual les ha obligado a abandonar sus hogares, víctimas de desplazamientos y migración forzada, ante lo cual destacó el papel de las organizaciones de la sociedad civil, como Las Patronas, quienes defienden y brindan asistencia humanitaria.
El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Luis Raúl González Pérez, manifestó la relevancia de reconocer a Las Patronas como un impulso para reflexionar sobre lo que se puede lograr en el país y la sociedad, si las decisiones y acciones que se emprenden partieran de un análisis objetivo de la realidad para dar respuesta a las necesidades y retos que demanda el entorno; por lo que enfatizó que México no necesita nuevas utopías, sino un reconocimiento de su realidad e instituciones superiores de calidad para enfrentar las demandas de la sociedad con inteligencia, valor, hechos y acciones concretas.
Indicó que la existencia de la Autónoma de Aguascalientes es un referente educativo al servicio de todo el país que honra cabalmente el lema del estado donde se fundó: “tierra buena, gente buena, agua clara, cielo claro”; al cual dijo que agregaría “universidad de excelencia”.
Con información de la UAA