Se duermen por las esquinas, dicen que sólo hacen su papel,
espían por rendijas a otros que jamás los ven.
Y también se hacen los muertos, eso es algo bastante común,
padecen varias fobias que no se han descrito aún,
dirías que son igual que tú…
Actores poco memorables. Nacho Vegas
En esta edición de Memoria de espejos rotos aprovecho para tocar brevemente tres temas: algunos apuntes sobre la cadena Russia Today (RT en español), la “unción” de José Antonio Meade como virtual candidato del PRI a 2018 y la coyuntura de la designación del titular en la Comisión Estatal de los Derechos Humanos.
RT en español, la propaganda
A pesar de que Russia Today (RT en español) ha funcionado como un medio periodístico que pretende la seriedad informativa, no es sorpresa encontrar que en sus contenidos subyacen tres cosas evidentes: la propaganda pro rusa; el apoyo a la agenda de política exterior que Putin proyecta al mundo; y algunos contenidos que van desde la imprecisión periodística sesgada, hasta la franca emisión de fake news.
¿Por qué nos debería importar esto? Básicamente porque RT en español tiene dentro de su línea editorial el apoyo a figuras y eventos cuestionables en la política interior de diversos países, como lo han sido -por ejemplo- Nicolás Maduro, el Brexit, la campaña de Trump, el DAESH islámico, el movimiento independentista de Cataluña, las acciones de Kim Jong-un dentro y fuera de Corea del Norte, y -por supuesto- la propaganda a favor de AMLO. Poner a todos estos personajes y eventos en un mismo campo semántico es riesgoso; pero lo es más permitir la confusión entre periodismo y propaganda, sobre todo cuando estamos ya en el proceso electoral que renovará a nuestro ejecutivo federal, y el contexto del país es un bollo que no está para hornos.
Dejo el apunte, sólo como un recordatorio de que Rusia tuvo participación cuestionable en la elección de Donald Trump, y que esto obedece a una agenda estratégica para impulsar a candidaturas o proyectos de gobierno de carácter populista, en detrimento de la democracia occidental y en beneficio de la política exterior de la poderosa Rusia.
Meade, el ungido
Durante el fin de semana pasado ocurrieron dos cosas que provocaron un entusiasmo de masas con el que pudimos viajar hacia el anacronismo: el evento de “Miss Universo”, y la “liturgia” de “destape” en el PRI. José Antonio Meade Kuribreña fue alfil de Felipe Calderón, lo ha sido también de Enrique Peña Nieto. Al parecer, el proyecto de Meade-Videgaray se sobrepone al poderoso grupo de Osorio Chong en la carrera por la candidatura del PRI, y ya ha comenzado a colectar las “ofrendas” de elogios que los rancios sectores del priismo le deparan. Con este movimiento, Luis Videgaray da prueba de quién es el poder detrás del trono; igual que con la visita del candidato Donald Trump, ahora aconseja a EPN sobre las posibilidades de su sucesión.
Esta sucesión está complicada para el PRI, arranca en tercer lugar, mientras que AMLO goza de la ventaja que le da una campaña de décadas, sin autocrítica ni democracia real a lo interno de su movimiento; al tiempo de que el Frente Amplio todavía se debate entre sus filias y fobias intestinas, no acaba de dar visos de una verdadera propuesta ciudadana, y va con retraso en la nominación de un perfil competitivo. El reto de Meade es triple: desmarcarse del PRI (por eso se modificó el estatuto interno del partido, para abrir los candados de candidaturas a no militantes), pero a la vez, como segundo reto, atemperar el conflicto de grupos dentro del PRI, ya que en muchos sectores no se vio con buenos ojos la designación de Meade. Históricamente, cada elección que el PRI contendió con evidente división interna y con candidaturas sin consolidación (Labastida y Madrazo pueden dar testimonio), obtuvieron rotundas derrotas; el tercer reto es mostrar que es mejor opción que sus contendientes, en medio de un clima de justificado hartazgo social hacia la clase política. El tema es complicado, por más dinero que el partido y el Gobierno Federal destinen a la payola política en los medios nacionales y en las redes sociales.
CEDH, la oportunidad
En Aguascalientes se avecina la renovación del titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos. Esto llega en una coyuntura interesante, y que nos ocupa a todas y a todos: la amenaza de retroceso conservador que está latente, para imponer políticas y directrices retrógradas en detrimento de poblaciones históricamente vulneradas, como las mujeres o los conglomerados LGBTTTI, por mencionar ejemplos. No es una decisión menor el saber qué perfil será idóneo para nuestra CEDH.
En ese sentido, llaman la atención dos candidatos que acreditaron los requisitos de la postulación, y han pasado a la etapa de consulta pública en el Congreso del Estado, a realizarse el día de mañana, viernes 1 de diciembre, ahí en el recinto de nuestro Palacio Legislativo. Estos dos perfiles llaman la atención, además por lo disímbolo entre ambos, porque anuncian los riesgos y las oportunidades que los legisladores tienen enfrente.
Pedro Edmundo Becerril Alba quiere ser Comisionado Estatal de Derechos Humanos, en su historial cuenta ser presidente y miembro de la asociación México es uno por los niños, que forma parte del Consejo Mexicano de la Familia y que ha auspiciado actividades del Frente Nacional por la Familia; también ha promovido marchas y manifestaciones ante el Congreso del Estado para penalizar el aborto, eliminar la legalización del matrimonio igualitario o la adopción homoparental; y una más ¿Recuerda usted la polémica local por unos espectaculares del Consejo Nacional para la Prevención y el Control del SIDA y VIH (Censida) que mostraba a parejas del mismo sexo, por la que la Pía Sociedad de Sociedades Pías acusó el brinco en el escapulario para exigir su remoción? Ah, pues esos son los derechos humanos que busca defender el postulante Becerril Alba; un riesgo para la sociedad diversa y plural que somos.
Por otro lado, el perfil de Wilfrido Salazar Rule representa una oportunidad; gestor cultural; diseñador gráfico; abogado especializado en Derechos Humanos y Género; activista desde hace décadas en la erradicación del estigma del VIH, de la inclusión plural de la comunidad, y de la equidad de derechos; es un perfil que los legisladores deberían tener en cuenta a la hora de realizar la alta responsabilidad que implica designar la titularidad de la CEDH. Más allá del jaloneo partidista, esta es una preciosa oportunidad de avance en beneficio colectivo.
En esta paleta de contrastes está la contienda por la CEDH, e insisto que no es una decisión menor, que pondrá a prueba la catadura de los legisladores y su compromiso con las ciudadanas y ciudadanos a los que se deben, en un actuar laico, libre de tufos confesionales, y orientado a salvaguardar derechos y libertades civiles que no admiten retrocesos. Me permito reproducir un fragmento del boletín del Congreso del Estado en el que invitan a la Sociedad Civil a participar en la consulta pública: “Pedro Edmundo Becerril Alba, de 13:30 a las 14:15 horas… Para el horario de las 16:00 a las 16:45 horas está programado Wilfrido Isamí Salazar Rule… en la consulta pública podrá participar toda Asociación Civil legalmente constituida, Colegios de Profesionistas e Instituciones de Educación Superior. Su registro podrán solicitarlo en las oficinas de la Secretaría General del Congreso del Estado, ubicada en Plaza de la Patria 109 Oriente, Zona Centro (hasta) 24 horas antes del inicio de la citada consulta”. Estamos a tiempo de escuchar y hacernos escuchar.
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