Ya lo decía el líder de los actuales tecnócratas en el poder Carlos Salinas, no se hagan bolas, pero con el madruguete que le hicieron al actual secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, respecto al destape del secretario de Hacienda, José Antonio Meade, ya se empezaron las bolas a formarse y con ello la encarnizada pelea por la nominación del candidato a la Presidencia de la República, esto es lo que actualmente vive el PRI y la mala gobernabilidad del presidente Peña Nieto, quien ni en su propio equipo de colaboradores tiene el control de lo que pasa al interior de su gobierno, hoy los tecnócratas se están adelantando a los priistas de sepa, mismos que se saben perdidos en el proceso de selección de candidatos y el dedazo ocurrirá como siempre desde Los Pinos, por más que el propio presidente digo lo contrario, no fue casual el destape que se hizo, lo pudo haber planeado el propio Peña Nieto y después hacerse el sorprendido, o quizá en realidad se le salieron de control sus funcionarios, aunque se dice que en política no existen las casualidades.
Esto nos muestra la desesperación de mantener el poder de los tecnócratas mexicanos desde el gobierno para seguir vendiendo nuestra patria a kilómetros y nuestra bandera a metros a las empresas extranjeras y al mismo vecino de Norteamérica, pero en esta ocasión no le han medido que el PRI puede llegar a ser la tercera o cuarta fuerza política en el proceso electoral que se avecina y con ello solo quieren justificar su derrota al mostrarse divididos desde ahora, con acciones como lo que sucedió esta semana, más lo que se avecina dentro del actual partido en el poder.
La declaración del primer priista de México solo es para calmar las turbias aguas que se mueven en el partido que comanda y que tiene sometido a su voluntad para mantener la supuesta gobernabilidad que por ningún lado se ve, sin operadores políticos fuertes, sumidos en crisis internas, con gobernantes en procesos judiciales y otros más prófugos, amén de los que han sido señalados por estar coludidos con el narcotráfico, este es el verdadero dilema que tienen los priistas en todo el país, cuestión muy difícil de poder desviar la atención de los votantes y de la crítica internacional que tendrá sus ojos puestos desde ya para lo que se verá el año entrante con el proceso electoral de renovación en el congreso de la unión y del propio poder ejecutivo.
Actualmente se tiene solo la certeza de que AMLO estará en la papeleta electoral postulado por Morena y al parecer el ya muy desprestigiado PT del próximo año, por lo que se especula en las demás fuerzas políticas e inclusive en el Frente Ciudadano por México, de las fuerzas políticas que no han signado alianzas electorales estarán en espera de lo que suceda al interior del PRI y del PAN para buscar a quienes se sientan desilusionados de no poder ser candidatos a la Presidencia e ir en busca de ellos para buscar obtener los votos suficientes y lograr colar algunos diputados y senadores por la ganancia electoral obtenida aparte de las prerrogativas que lograrían para mantener su registro que marca el código o ley electoral.
Viene tiempos de cambios en los que el sufrido pueblo mexicano podrá renovar y dejar atrás a un gobierno sumido en la peor crisis política y económica de este siglo, se puede apostar a lograr un triunfo de ciudadanos que quieren cambiar para bien la política y los proyectos para los mexicanos, mismos que pueden ser actores de este proyecto, sin duda el distractor montado por el ex presidente del país Felipe Calderón que con las figuras de los candidatos independientes busca postular a su esposa Margarita Zavala podrá vencer a un proyecto de ciudadanos y partidos que busca recuperar el poder para gobernar del lado de los ciudadanos comprometidos con la democracia, este proyecto signado por el PAN-PRD-MC tiene objetivos de gobernabilidad a largo plazo y no solo para el próximo proceso electoral, viene pues la oportunidad de hacer mejor las cosas con y para el pueblo y está en nosotros ese horizonte, creo que sí podemos hacerlo posible, por lo pronto que los priistas se sigan haciendo bolas, ya que es lo único que les queda frente a la inminente derrota en el año que está por llegar a escaso mes y medio.