- Jorge Álvarez Máynez aseguró que no cambió la postura de Movimiento Ciudadano
- “Estancarse en la fiscalización de actos pasados es una idea poco constructiva para la política”, opinó el diputado federal
Confrontamos a Jorge Álvarez Máynez, diputado federal por Movimiento Ciudadano, sobre el Frente Ciudadano por México; contrario a nuestra expectativa, no hubo una defensa férrea pues “no merece que la gente confíe en él”; en cambio, dar el beneficio de la duda a esta agrupación política fue su solicitud. Los cambios en el discurso de los integrantes, dice, legitima la existencia de esta coalición.
El 4 de septiembre de este año se anunció la unión de los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC). Una coalición que a botepronto, parece disímil dada la carga ideológica que cada fuerza política representa, pero que promete alinearse bajo los mismos objetivos.
Llegado el momento, expulsar al PRI de la silla presidencial será la meta de la alianza, que por el momento se ciñe al ámbito legislativo.
–¿Cómo confiar en un partido como el PAN, que se desprende del sistema que se contrapone al discurso de toda tu carrera política?
–Acaba de cumplirse un aniversario más de las 95 tesis de Martín Lutero, que significó esta aportación desde el punto de vista de la racionalidad, de desmitificar la idea de que la duda le estorba al florecimiento de las humanidades, los conocimientos, la ética y la moral.
La duda contribuye a la posibilidad de crear un mundo mejor y yo creo que a la política mexicana, a nuestra cultura caudillista y unipersonalista, nos hace falta incorporar esta idea. Lo que debemos hacer frente a la clase política no es confiar de ellos, sino desconfiar, dudar y constantemente estar cuestionando. El Frente Ciudadano por México no merece que la gente confíe de él de entrada. Merece el beneficio de la duda y que la gente lo evalúe en función de sus acciones.
En defensa de la alianza tripartita, Álvarez Máynez aseguró que se ha tratado de moldearla, dándole contenido a partir de causas específicas relativas a impuestos, ley de ingresos, financiamiento público a partidos y el cerco al fiscal carnal, cuando se impidió que Raúl Cervantes -abogado personal de Peña Nieto- fuera electo titular de la Fiscalía General de la República. A esto añadió que por primera vez, el grupo parlamentario blanquiazul votó por eliminar las pensiones de los expresidentes de la República, gracias a que el equipo político que acompañó los gobiernos de Fox y Calderón, hoy está aglutinado alrededor del PRI y de la candidatura presidencial de José Antonio Meade, dijo.
En esa misma línea, se le preguntó acerca de una de las medidas que mayor polaridad desató en San Lázaro: El aumento a las gasolinas.
–Hablando de cuestionar, hay voces que se preguntan ¿qué hay sobre el gasolinazo, a diferencia de Movimiento Ciudadano el PAN dio su voto de respaldo a las leyes que sustentan esta medida?
–Pues que tienen razón, tienen que exigirle cuentas a los diputados que avalaron esa reforma. Además, no soy quién para hablar a nombre del PAN, lo que el PAN dice es que ellos dieron un instrumento de política al gobierno y que este no cumplió con lo pactado. Nosotros creemos que fue un error haberle creído a este gobierno.
“Pero más allá de eso creo que estancarse en la fiscalización de actos pasados es una idea poco constructiva para la política. Yo creo que es una idea difícil sostener la de buenos y malos en la política mexicana.
“Hay dos formas de hacer política: para incidir en la historia y para alimentar la vanidad personal; esta última practicada por una amplia corriente, a la política ‘espejito espejito, quién es el más purito’ de quién habla desde la superioridad moral pero que no hace mejor la vida de las personas. Yo creo que hay que hacer una política menos cargada de vanidad moral y más enfocada en transformar la realidad de las personas.
“Si el FCM sirve para que no haya Ley de Seguridad Interior, fiscal carnal o más legislación a favor de los poderes fácticos, aunque no gane la elección de 2018 habrá servido para la vida pública del país.
“La abolición de la esclavitud se dio gracias a los mercenarios, los conservadores y los que querían ganar votos con esa medida, así se conforman las coaliciones que transforman la historia, por mayorías que son complejas y contradictorias”.
Jorge Álvarez Máynez reconoce que Ricardo Anaya -presidente del CEN panista- se ha convertido en más allá de una pregunta de cajón, la curiosidad misma de averiguar si existe respuesta digna para defender la alianza con un personaje que ha acompañado a las medidas más repudiadas por el pueblo mexicano. Álvarez Máynez mencionó nuevamente el beneficio de la duda. Si bien la postura de Movimiento Ciudadano no cambia hacia al gasolinazo o el fiscal carnal, el discurso adoptado por el blanquiazul es lo que legitima la existencia del Frente: “Hoy tenemos a Anaya declarando que va en reversa el gasolinazo, el fiscal carnal y que fue un fracaso la estrategia de calderón en materia de seguridad, que se le faltó al respeto al ejército y que hay que pedirle una disculpa por la política errática de seguridad que hubo en ese sexenio”.
–Sin embargo, medios nacionales hablan de una desbandada de militantes de MC debido a contrastes con el FCM.
–Si tú googleas el nombre de esta persona, van como seis veces que anuncia su desbandada (…). Hay mucho interés público por magnificar las decisiones del Frente. El Universal dedicó 27 primeras planas en 35 días a notas negativas sobre Ricardo Anaya y nosotros entendemos eso. Ojalá tuviéramos dirigentes con 120 mil votos como este cuate, me parece muy poco serio que alguien te declare que representa 400 mil personas que representan a este frente y que los medios lo publiquen sin perseguir la evidencia que sustenta ese dicho.
El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó la creación del Frente conformado por PAN-PRD-MC, con una vigencia hasta el año 2024. Durante esa sesión, el resto de los partidos acusó al FCM de tratarse de una simulación pues a pesar de que la ley no permite que se conformen con objetivos electorales, su meta es contender en los comicios de 2018.
–¿Hay temor a las cuotas partidistas en las que el PAN dice que lleva mano?
–Sería un error que cualquiera de las fuerzas políticas optara por esta visión partidocrática, si el Frente no tiene candidaturas ciudadanas será sólo una coalición de partidos y eso no va a ser atractivo, ni un factor de cambio de decisión para muchos mexicanos. Yo a lo que llamaría es a que se ponga un criterio de interés general y justo creo, que las tribus internas de los partidos son menos significativas cuando hay una mesa más amplia como la del Frente; si fueran los partidos solos, el peso de estas corrientes crecería. En esta lógica plural y de convivencia disminuyen esos riesgos.
Movimiento Ciudadano no será un aliado incondicional, de suerte que si el FCM se aparta de la agenda consensada, no habrá continuidad, sentencia Álvarez Máynez; recuerda que ante el planteamiento de la alianza, el partido anaranjado se enfrentó a dos posibilidades: construir una identidad a futuro sacrificando la oportunidad de participar activamente en la elección de 2018 “viéndola desde la barrera”, o bien, constituirse como un factor de incidencia. Los resultados en los comicios del Estado de México, dijo, fueron reveladores en la toma de esta decisión ya que el que muchas fuerzas políticas decidieran permanecer al margen perpetró “el régimen autoritario e hiper corrupto que representa el PRI”. Advirtió que “si MC no se inclina como el fiel de la balanza, el PRI repetirá en la presidencia de la República”.
–¿Qué opinas de las candidaturas independientes?
–Creo en la figura de la candidatura independiente como instrumento para ratificar la democracia, pero no creo en esas más de 50 personas que aspiran. Lo que tiene que ver con la candidatura presidencial difícilmente votaría por ella si estuviera en la boleta, pero lo que sí creo es que sería un acto simbólicamente significativo para el país y refundador de nuestra idea de democracia tener a una mujer indígena como María de Jesús Patricio Martínez en la boleta electoral. Le daría una dimensión distinta a la política electoral en México, de un sector de la población que ha sido excluido, ignorado y no ha tenido voz en los debates presidenciales. En sí mismo modificaría la conversación pública en el país (…). Son un mecanismo para refrescar la democracia sin abandonar la idea de que los partidos son entidades de interés público y que también tenemos el derecho de refundarlos.
