- Son cinco unidades de combis en la zona metropolitana, el servicio será para los socios, con posibilidad de abrirse a la población en general
- Viable el servicio alternativo de transporte público con garantía de seguridad a grupos vulnerables
Al trabajar bajo el esquema de cooperativismo se considera viable la creación de un transporte alternativo al que ofrece los actuales concesionarios, que ofrezca garantías de seguridad a las mujeres, personas de la tercera edad y discapacitadas, señaló María Escalante de Ávila, presidente de la Unión de Mujeres Trabajando en Cooperativas: “Cuando hay problemas económicos y sociales nosotras hablamos de cooperativismo, y la cooperativa de transporte público viene a paliar las necesidades de las personas que no han sido visibilizadas, como las personas con discapacidad y de la tercera edad, por ser riesgoso y de mala calidad (…) ustedes saben que siempre ha estado condicionada lo que son las concesiones por parte del gobierno que las regula, nosotros a través de la modalidad del cooperativismo podemos operar”, expuso la activista.
Ante esta necesidad social, la organización civil abrió ya una convocatoria a la que ya respondieron otras organizaciones sociales interesadas en el tema de un servicio de transporte público al existente, el cual consideró viable en su operación de manera totalmente lícita y a través de la modalidad del cooperativismo.
La idea es ofrecer este servicio de transporte público a través de las combis que circularán en la zona metropolitana, el cual -dijo- no se antepone dentro de cómo regula la Secretaría de Gobierno del Estado, al estar trabajando con sus propios asociados de la organización.
Agregó que la idea surgió por el hartazgo, principalmente de mujeres, con las condiciones de seguridad del transporte público, y que en el proyecto los beneficios llegarán también a los choferes, ya que participarán como copropietarios de los vehículos que operen, y aunque el servicio se abrirá inicialmente a los afiliados de la sociedad después es posible que se ofrezca a la población en general.
Acerca de cuándo podría comenzar a operar el servicio, Escalante de Ávila explicó que dado que el principal obstáculo es el económico, aún es necesario cuantificar la requisición del recurso, pues por lo pronto pretenden iniciar con cinco unidades, pues así se los exige la Ley de Sociedades Cooperativas.
Explicó que la modalidad de cooperativismo primero se enfoca a ofrecer el servicio a los afiliados que confían en el proyecto, aunque ya hay antecedentes de otro tipo de sociedades que han abierto paulatinamente el abanico y llegar a la población en general.
Los trabajadores del volante que presten ese servicio no estarían en la modalidad como trabaja un taxista, por ejemplo, pues se vuelven socios dentro del servicio que ofrecen.
La activista detalló que actualmente cuentan con al menos 625 personas que acceden a los productos y servicios que ofrecen a través de sus redes de trabajo, a través de cuatro cooperativas que ya están en funciones.