- Se debe regresar, al menos, al presupuesto federal destinado a la ciencia en el año 2015, afirmó el nuevo presidente de la Academia Mexicana de Ciencias
Se realizó hoy la ceremonia en la que tomó posesión como presidente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) el doctor José Luis Morán López. En el marco de la inauguración del LVIII Año Académico de la más importante organización de científicos del país, el doctor en física, originario de San Luis Potosí, afirmó que se debe regresar al menos al presupuesto federal destinado a la ciencia en el año 2015, ya que aunque la administración federal actual ha dado muestras de una visión positiva sobre lo que necesita el país para transitar hacia una sociedad y economía del conocimiento, el impulso inicial en este sexenio se vio frenado por reducciones importantes en el presupuesto para el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
El investigador hizo hincapié en que México necesita una política científica transexenal: “Es altamente dañino modificar o cancelar los programas y acciones cada vez que hay un cambio de administración gubernamental. Esto nos hace considerar la conveniencia de establecer mecanismos que permitan dar continuidad a los programas de ciencia y tecnología, así como a los funcionarios responsables de los organismos a cargo de estos programas, de manera independiente a los cambios de administración gubernamental. Esto es, dar una estructura transexenal a la administración de la ciencia y la tecnología, de manera tal que se tenga continuidad en las políticas científicas y en los programas que impulsan”.
Apuntó que uno de los mayores obstáculos para un desarrollo integral y armónico de la ciencia y tecnología es el alto grado de centralización en el país.
“Aunque el porcentaje de miembros del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) que laboran fuera de la Ciudad de México se incrementó a partir de 2004, todavía se deben implementar programas de fomento para el desarrollo científico y tecnológico en todas las entidades federativas, sobre todo en aquellas que son indicadores de desarrollo más bajo, o bien, en aquellos que registren indicadores bajos, aunque sus niveles de desarrollo sean razonables”, indicó el doctor Morán.
Agregó que deben existir elementos que compensen las asimetrías de un desarrollo científico de las regiones en los programas de apoyo a la ciencia. Un programa que incorpora ese tipo de elementos compensatorios es el de Cátedras para Jóvenes Investigadores del Conacyt. Por otra parte, se debe buscar un desarrollo ad hoc en cada región en función de sus necesidades y fortalezas.
El presidente saliente de la AMC, Jaime Urrutia Fucugauchi hizo un recuento de las actividades realizadas durante su gestión y destacó el papel de las Academias de Ciencia en el desarrollo de los países.
“El mundo moderno está basado en la ciencia y en la tecnología y paradójicamente, la mayor parte de la sociedad entendemos poco de ciencia y tecnología, con ello, llegamos a la mezcla explosiva entre el poder que tiene ahora la ciencia y la ignorancia. Es una combinación con capacidad de afectar al planeta”, señaló Urrutia.
En su intervención, el secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer, destacó la importante colaboración que existe entre la AMC y la dependencia que dirige, a partir de tres grandes proyectos: “Por un lado, algunos investigadores de la Academia colaboran para elaborar los nuevos planes y programas de estudio basados en el nuevo modelo educativo. Este nuevo modelo que busca romper con la antigua forma de enseñanza basado en la memorización para pasar a un método basado en el razonamiento. Junto con ello se están elaborando los nuevos libros de texto en donde participan distintos expertos tanto de la Academia Mexicana de Ciencias como de otras, aunque la AMC está comprometida para revisar los contenidos científicos de los libros.
“La última parte de este proyecto educativo que está apoyando la Academia se centra en fortalecer y transformar a las escuelas normales de nuestro país mediante el diseño de nuevos planes y programas de estudio, pues el cambio educativo de nuestro país está en el fortalecimiento de las escuelas normales en donde se estarán formando a los nuevos profesores del país. Es ahí donde el cambio pedagógico que estamos buscando en el nuevo modelo educativo se va a consolidar. Recordemos que no puede existir un país exitoso sino tiene un proyecto educativo sólido”, concluyó Nuño Mayer.
El director del Conacyt, Enrique Cabrero Mendoza, dijo que este año complicado presupuestalmente, sigue siendo en términos reales el presupuesto más alto del gobierno federal en ciencia y tecnología, en lo histórico.
“Efectivamente rompimos una racha bonita que empezó en 2013 con un incremento de casi el 10 por ciento del presupuesto anual para el sector y esto nos permite decir que de 2013 al 2017 -incluido este año de recortes- en términos reales, el gasto ejercido es un 39 por ciento superior al que se dio en el mismo periodo en la administración pasada”, destacó el doctor Cabrero.
El líder nacional de la política en CTI detalló que en los últimos cinco años se han logrado avances, por ejemplo, el crecimiento en el número de becas e integrantes del SNI.
En la ceremonia, también se realizó la entrega de los Premios Weizmann 2016 a las mejores tesis de doctorado en Ciencias Exactas, Naturales, e Ingeniería y Tecnología; los Premios de la Academia a las mejores tesis de doctorado en Ciencias Sociales y en Humanidades 2016; y de las Becas para Mujeres en las Humanidades y las Ciencias Sociales 2017.
Con información del Foro Consultivo Científico y Tecnológico