Urge la presencia del CEN del PRI en Aguascalientes

• Necesaria la renovación de la dirigencia para trabajar rumbo al 2018: Isidoro Armendáriz
• Norma Esparza tiene todo el apoyo de las distintas expresiones del partido

Resulta urgente que el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) atienda las demandas del priismo aguascalentense, toda vez que a decir de Isidoro Armendáriz García, ex presidente estatal de este partido, ha sido la desatención de la dirigencia nacional la que ha retrasado el proceso de designación del nuevo Comité Directivo Estatal, lo cual además está frenando los avances del partido en la entidad de cara a la elección de 2018.

“Uno de los puntos más debatidos fue el hacer un frente común, posicionar a Aguascalientes en el marco del CEN y demandar del presidente Enrique Ochoa la presencia cuanto antes de un delegado general del partido. La mayor parte de las expresiones coincidimos en que el PRI necesita la unidad interna, un programa estratégico y todo el apoyo del CEN, de no ser así, estaremos asistiendo a los santos óleos del PRI en las elecciones del 2018”, dijo quien funge como delegado estatal de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).

No obstante dijo el priista que ante tal incertidumbre las diferentes facciones al interior del partido decidieron cerrar filas a fin de frenar el desgaste derivado de los enfrentamientos por buscar dirigir al PRI, “Se dio el voto de confianza para sellar un pacto de unidad interna del partido, hasta en tanto no llegue el delegado del Comité Ejecutivo Nacional y se puede iniciar el tema de la renovación (…) hasta en tanto no haya un delegado del CEN y una convocatoria, Norma Esparza tiene todo el apoyo de las distintas expresiones, no hablo por todas, hablo por mí en lo individual, pero por lo pronto varios actores de estas corrientes de pensamiento, le han solicitado continúe como un elemento clave para la unidad interna en la transición y renovación del partido”.

Indicó Isidoro Armendáriz que en tanto se renueva la dirigencia, se pretende mantener la cohesión al interno del partido, esto con el objetivo de trabajar los cuadros que participarán el próximo año en busca de recuperar posiciones en el Congreso de la Unión y el Legislativo local, “Se requiere de un partido fuerte, dinámico, cohesionado para que se arribe a un cambio de dirigencia en condiciones de mayor certidumbre y eficacia (…) urge una visión diferente de partido para poder reposicionarlo y seguir ganando elecciones , ésta es la oportunidad en la coyuntura política de la sucesión presidencial para que nos organicemos y le demos vida útil al partido, no como un partido burocrático, un partido anquilosado, desmotivado, por ello la unidad de los cuadros es fundamental para que todo mundo salga a las calles”.

Isidoro Armendáriz García atribuyó las fracturas existentes en el priismo local a las recientes derrotas padecidas por el instituto, “Las divisiones, las dimisiones, el ausentismo, el aislamiento, la huida se dan ante la sicología de las derrotas (…) cuando hay derrotas, hay desánimo, hay una cultura de brazos caídos, hay ausencia en la voluntad política, luego se pierde el ánimo para seguir integrado a un programa operativo de partido”.