- Aseguran que no se sabe dónde está el dinero que APA pidió para la construcción de su albergue
- Dicen que desde que el fundador de la asociación entró a Proespa ha habido omisiones de denuncias
- “Ninguna otra asociación independiente aprobó que ellos fueran los representantes de los animalistas”
Animalistas independientes se quejaron este miércoles por supuestas malas prácticas de la asociación civil Amigos Pro Animal (APA) la cual -dicen- aún recibe donativos para la construcción de un albergue para el que recibieron un terreno en comodato que les fue retirado por falta de avances en las obras sin que se regresara ningún reembolso a los donadores; además, aseguraron que desde que el fundador de la asociación, Felipe Márquez, ingresó a la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proespa), las denuncias de los independientes han dejado de recibirse.
Luz María Alvarado, quien se define como activista independiente, denunció que APA recibió un terreno en comodato en 2012 para que se construyera un albergue con un costo de más de tres millones de pesos, por lo cual la asociación comenzó varias actividades para recaudar fondos y sin embargo, hasta la fecha no se ha hecho nada.
Incluso a la fecha, dijo Alvarado, varios donadores de los Estados Unidos siguen depositando dinero para la construcción del albergue; sin embargo, APA no pudo pagar el terreno por lo cual este les fue retirado y la situación del proyecto es desconocida.
Mina Sugoi, también animalista, señaló que ella comenzó a trabajar con APA desde sus inicios y desde entonces se ha recaudado el dinero para dicho albergue, incluso apuntó que los mismos miembros de la asociación donaban de su dinero y confirmó que se hacían actividades para recaudar más fondos; sin embargo, el albergue nunca se construyó y el dinero no se regresó a los donadores, “los fondos ahí deberían de seguir, pero nunca los hemos visto y nunca hemos visto que se apliquen”.
Según Alvarado, al principio la asociación pedía que colaboradores como ella, les ayudaran a trasladarse y les pedían cooperación, pero desde entonces “han agarrado un hueso político en el gobierno lanzándose al estrellato malamente, siendo que ninguna otra asociación independiente aprobó que ellos fueran los representantes de los animalistas”.
APA siguió progresando y de un momento a otro ya tenía la representación de todas las asociaciones animalistas en el estado, empezó a tener más vínculos políticos y comenzaron a cobrar una cuota de recuperación por animal de 300 pesos, es decir, cada que una persona quiere adoptar a un animal debe pagar esta cantidad lo cual según Alvarado, quien hizo esta denuncia, resulta ilógico pues la asociación recibe dinero del gobierno.
Según la propia APA, este donativo de 300 pesos por parte de los adoptantes es para solventar los cuidados que brinda a los animales mientras que encuentran un dueño, sin embargo, confirmó Cynthia Prieto, quien también se identificó como independiente, al ser una asociación civil, Amigos Pro Animal recibe dinero del gobierno.
Prieto agregó que gracias a sus conexiones gubernamentales, los fundadores de APA consiguieron que Felipe Márquez, uno de ellos, se hiciera de un puesto público en la Proespa; desde ese momento, aseguró, las denuncias que han hecho las asociaciones independientes han dejado de recibirse.