- Sólo 4 de cada 10 víctimas denuncian a su agresor: Mujer Contemporánea
- Tres por ciento de las mujeres atendidas vuelven a padecer violencia
El consumo del alcohol y otras drogas está presente en casi la totalidad de los casos de violencia de género atendidos por la asociación civil Mujer Contemporánea, informó su presidente Roxana D’Escobar López Arellano, quien explicó que normalmente el varón perpetra los actos violentos en contra de su pareja cuando éste se encuentra en estado etílico o de intoxicación: “El detonante ahorita es mucho el alcohol, el consumo de drogas ilícitas, sobre todo el cristal, las parejas consumen muchísimo cristal. El 98 por ciento de las mujeres que están en el refugio están por violencia a causa del alcohol, el alcoholismo es un factor determinante, una vez que el hombre está alcoholizado pierde la dimensión de su fuerza y de las acciones que está realizando, entonces empieza a golpear y no para de golpear porque él mismo ya no tiene control”.
Dicho organismo de la sociedad civil actualmente atiende a 30 mujeres víctimas de agresiones domésticas, de las cuales apenas un 40 por ciento llega a presentar una denuncia contra su pareja ante las autoridades ministeriales, no obstante a decir de Roxana D’Escobar, las víctimas en su gran mayoría desisten de la querella, “ellas llegan incluso con una demanda puesta y a lo largo del proceso ellas se dan cuenta que quieren regresar con él, para nosotros es una postura válida, pero lo que se hace ahí es tratar de empoderarlas, a poner límites, a detectar los brotes violentos”.
Caso contrario, indicó, muchas de las víctimas de violencia alojadas en el refugio de Mujer Contemporánea inclusive se niegan a abandonar el apoyo al concluir el periodo reglamentario de tres meses dado por el organismo porque temen nuevas agresiones de sus parejas.
“En 20 por ciento que le decimos que ya llegó su tiempo de salida y no se quieren ir porque sienten miedo de qué va a pasar cuando estén afuera, temen que él vuelva aunque ya se haya resuelto incluso legalmente la situación, temen que regrese y que la violencia sea más (…), muchas veces vienen remitidas por las procuradurías, justicia, los institutos de las mujeres o hasta de los hospitales”, señaló la activista, quien explicó que se consideran los casos para determinar la extensión del alojamiento a la víctima, “de acuerdo a los casos, se hace un estudio del caso y de seguridad, pueden permanecer hasta cuatro o cinco meses, legalmente no las podemos retener y ellas pueden salir al día siguiente de su ingreso si es su decisión”.
Otro punto importante, dijo Roxana D’Escobar, es que hasta un tres por ciento de las mujeres atendidas vuelven a solicitar protección de este organismo civil dado que vuelven a ser víctimas de agresiones, “en algún momento de su vida, no importa si fue este año, hace cinco o diez pero sí regresan al refugio, pueden regresar las veces que sean necesarias, son procesos muy largos y nosotros no podemos adivinar si en una de esas no la recibimos y la matan, sería mucha responsabilidad saber eso”.