QEPD don Raúl Medina Reyes
Beisbol
ieleros no pudo coronarse en casa luego de recibir una sopa de su propio chocolate por parte del Águila de Veracruz. Los Rojos devolvieron la “cortesía” y los derrotaron dos juegos -tres y cuatro- en el parque Alberto Romo Chávez; el quinto juego de la serie fue no apto para cardiacos y en extra inning, la Máquina se llevó el encuentro para trasladarse al puerto jarocho con ventaja de tres juegos contra dos.
Para el juego de ayer martes, el parque Alberto Romo Chávez abrió sus puertas para que los aficionados que así lo desearan disfrutaran en pantallas gigantes el encuentro desde Veracruz, con bebidas de cortesía, por parte de la afición la medida fue bien recibida, congregándose algo así como 3 mil personas.
Hoy el séptimo y definitivo juego.
NASCAR
La décima fecha NASCAR Toyota Series se realizó el pasado fin de semana en el Óvalo Aguascalientes, y la novena en su Serie Stock V6.
El triunfo correspondió al piloto del auto número 2, Rubén Rovelo, luego de transcurridas 171 vueltas en un tiempo de 2 horas con 9 minutos. De esta forma Rovelo consigue su segunda cuadrícula en la presente temporada, y sexta en su paso por la categoría V8. En la segunda posición entró el coequipero Daniel Suárez con su auto número 3, manteniéndose en el liderato general. En tercera posición concluyó Jorge Goeters; Rubén Pardo y Salvador Durán completaron el top 5.
La carrera contó con varias banderas amarillas por accidentes y/o incidentes presentados en la pista, algunas negras penalizando a los pilotos, pero la bandera roja que determina “Carrera detenida” causó un nudo en la garganta luego del choque con el muro de contención por parte del piloto Jorge Contreras Jr. Todos los pilotos detuvieron sus vehículos, incluso apagaron motores para permitir que los servicios médicos realizaran sus labores sin contratiempos. La preocupación mayor sobre todo para Jorge Contreras Sr., fue cuando sobre el auto se colocó una manta, sin embargo ya del otro extremo del Óvalo, y con el joven piloto dentro de la ambulancia, un paramédico le explicó al padre que fue cubierto el auto para que los médicos realizaran de mejor manera sus labores, ya que varias personas se acercaron para observar la escena.
Hasta donde sabemos, el joven se encuentra en plena recuperación luego de ser intervenido quirúrgicamente en el Estado de México, de la clavícula que resultó fracturada.
Quién no corrió con buena fortuna en la competencia fue el piloto aguascalentense Rogelio López, que terminó en decimoquinto lugar.
Para la conferencia de prensa de la Stock V8, el joven Suárez no se presentó, surgiendo la versión de que fue debido a un “berrinche” quizá por su corta edad. Sin embargo, estas conductas no le abonan nada bueno a su carrera, ya que está participando en la máxima categoría, donde participan pilotos que cuentan con larga trayectoria y profesionalismo.
La decimoprimera fecha NASCAR Toyota Series está programada para el 9 de septiembre a desarrollarse en el Óvalo Miguel E. Abed de la ciudad de Puebla los días 8 y 9 de septiembre.
Respecto a la Stock V6, donde se forjan los próximos pilotos de la estelar, el venezolano Jean Franco Tomasello debutó con el pie derecho, y las tierras hidrocálidas le sentaron bien. Luego de completar 75 vueltas y una hora de competencia, la cuadrícula cayó para el auto número 77. Detrás de él llegó su compañero de equipo, Javier Campos; el tercer sitio fue para Santiago Tovar.
Para el líder de la competencia, Oscar Torres, fue complicada la participación en el Óvalo Aguascalientes, concluyó en quinto lugar.
Gisela Ponce finalizó en noveno lugar y nuevamente vio escapar la posibilidad de ganar en su tierra, sin embargo se mantiene en el octavo lugar de la Tabla General.
Por su parte, en la conferencia de prensa el venezolano no podía ocultar su alegría por el logro obtenido, mostrándose sumamente abierto con los medios; dejó en claro su madurez y objetivos: concluir la actual temporada Stock V6 y prepararse para la próxima serial en la misma categoría, y posteriormente buscar incursionar en el máximo circuito de NASCAR Stock V8.
Otro detalle palpable con el sudamericano fue el apoyo incondicional y decidido de sus padres que lo acompañaron con nerviosismo pero al ver a su “pequeño” llevarse la bandera a cuadros no pudieron ocultar su júbilo.