- Coesamed y Derechos Humanos comparten atención a las quejas según su naturaleza
- El IMSS encabeza las quejas por negligencia ginecobstétrica
Según la asociación civil Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), en todo el país y de manera diaria, más de seis mil 800 mujeres sufren de la denominada violencia obstétrica la cual consiste en malos tratos, insultos, burlas, e incluso negligencia por parte de personal administrativo, de enfermería y médico de clínicas y hospitales públicos. No obstante el atacar este tipo de situaciones no se ha dado de manera contundente por parte de las instituciones gubernamentales, toda vez que no existe una instancia que por sí misma se encargue de atender estos temas.
José Antonio Medina Rodríguez, titular de la Comisión Estatal de Arbitraje Médico (Coesamed), explicó que esta dependencia estatal recibe quejas recurrentes en ese sentido, no obstante no es posible su atención integral por parte de esta instancia dado que las facultades de ésta no abarcan en su totalidad las implicaciones de la violencia obstétrica.
“Al decir violencia obstétrica, se refiere más al maltrato que reciben sus personas en cuanto a alterar sus derechos humanos y no tanto al hecho físico de la atención del parto (…) tenemos que ver muy claramente que el problema es multifactorial, si no se tienen los recursos suficientes, si se agrede a las personas, es un término muy diferente al propio de violencia obstétrica”, dijo el funcionario estatal.
Explicó que en lo que concierne a Coesamed, únicamente se da atención a lo referente a cualquier negligencia u omisión de parte del personal médico exclusivamente en cuanto a la aplicación de sus habilidades, mientras que cualquier insulto o violencia verbal constituye una falta que debe ser dirigida a las instancias defensoras de los derechos humanos.
“Sería el análisis del acto médico de la atención del parto, es lo que nosotros tendríamos que analizar, ya el maltrato que sucede a las personas correspondería a Derechos Humanos, o incluso si no se cuenta con la infraestructura necesaria ya es un problema de las autoridades como la Secretaría de Salud, por ejemplo”, señaló Medina Rodríguez.
El comisionado de Arbitraje Médico dijo que esta dependencia al momento de atender asuntos relacionados con violencia obstétrica, busca canalizar las quejas ante las instancias competentes según sea el caso: “Muchas personas pueden quejarse del maltrato que reciben, realmente nosotros no somos una institución para juzgar o castigar a nadie, la gente que acude a nosotros no se va con las manos vacías, la orientamos hacia la institución donde pueden resolver sus problemas”.
José Antonio Medina Rodríguez explicó que las quejas más atendidas en torno a negligencia ginecobstétrica provienen de las instituciones públicas de salud, como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y hospitales estatales, casos que giran en torno a “partos prolongados, partos en que desafortunadamente se pierde al producto o incluso se tiene que hacer la histerectomía, que es el retiro de la matriz por circunstancias de ruptura de la misma y que es necesario hacer la extirpación para salvar la vida de la madre”, finalizó el titular de Coesamed.