- Aguascalientes se convierte en socio y cómplice del INBA para la generación de más proyectos de teatro
- Se formaliza una nueva red de jóvenes creadores de todo el país
- 28 compañías realizaron más de 60 presentaciones teatrales en once espacios de la ciudad
Durante diez días de trabajo 28 compañías conformaron la 36 Muestra Nacional de Teatro en once espacios culturales de Aguascalientes bajo la coordinación de teatro del Instituto Nacional de Bellas Artes y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), en una reunión de la comunidad artística, público asiduo y nuevos públicos, que concluyó anoche tras un ciclo especial a cargo de los estados de Nuevo León, Guerrero, Jalisco, Veracruz y Sonora, así como una muestra de la Maroma Mixteca de San Miguel de Amatitlán, Oaxaca, creada por Alfonso Jiménez Fernández.
Para el equipo organizador, el día de ayer cerraron no sólo diez días de actividad sino todo un año de arduo trabajo con una inesperada respuesta a la variante estructural que desde su convocatoria tuvo esta muestra gracias a la dirección artística, la cual estuvo integrada por Sandra Muñoz, Jorge Gayón, Alberto Villarreal, Luis Manuel Aguilar y Alejandro Ricaño.
“Ya con nostalgia vemos cómo todo este tiempo de trabajo, tanto en el terreno operativo como el de contenido, valió la pena; tuvimos un Congreso Nacional, un primer encuentro de jóvenes creadores y una gran respuesta del público”, destacó César Tapia, representante de la coordinación nacional de teatro del INBA.
Durante la muestra se tuvo la visita de 62 jóvenes provenientes de 31 estados del país para la generación de una nueva red de jóvenes creadores que tiene como finalidad el conocerse entre regiones e intercambiar sus conocimientos y experiencias artísticas: “se buscó principalmente conocer lo que existe en otros estados para diseñar nuevas estrategias de trabajo”, los primeros acercamientos funcionaron para establecer los planteamientos, inquietudes, cuestionamientos y propuestas, con base en ellas se irán definiendo poco a poco las bases para trabajar entre las instituciones gubernamentales y la comunidad artística.
Gran parte de esta red dependerá de estos jóvenes, pues aunque las instituciones los han acompañado a lo largo de su formación artística, al ser jóvenes creadores tienen la responsabilidad de mejorar este intercambio, que la distancia no sea una limitante para compartir lo que hacen: “la idea es generar una gran red de información que nos ayude al INBA a mejorar nuestro trabajo, estos chicos serán nuestros cómplices artísticos”.
El coordinador David Jiménez Sánchez generó una serie de dinámicas con ellos durante estos días, entre ellas se destaca la red de información e intercambio constante mediante distintos medios, para continuar con el establecimiento de objetivos específicos y modelos de trabajo.
El primer Congreso Nacional de Teatro surgió a partir de cuatro ejes temáticos encontrados en otras muestras, que son los espacios y salas independientes; subsidios y financiamientos (ámbito gubernamental e iniciativa privada), red de circuitos y festivales; así como la misma MNT.
A nombre del INBA, Tapia celebró la aceptación que tuvo la muestra en la comunidad aguascalentense después de 24 años de ausencia. De alguna manera este nuevo modelo de quitar lo muy académico y hacerlo más de intercambio, de conocerse entre comunidad, le dio otra visión al trabajo del otro: “hay muchas cosas que afinar, como el control hacia las clínicas que impartían, nos comentaron en el cierre que les gustarían que fueran más una cuestión práctica que una teórica”, aquí es donde los resultados de esta 36 edición serán el punto base para optimizar la plataforma y entregar una próxima edición mejor que la anterior.
Si bien la MNT por sí misma tiene la gran capacidad de convocatoria de públicos, en esta ocasión se disparó (en beneficio) la diversidad de nuevos públicos, niños, jóvenes, adultos y hasta adultos mayores en grupos organizados llenaron las salas; aunado a los visitantes asiduos de Jalisco, Guanajuato, Zacatecas, San Luis Potosí hasta Sonora y Coahuila: “la ventaja de Aguascalientes es su accesibilidad geográfica, está tan bien ubicada que permitió a más entidades visitar la muestra”, de esta manera las más de 60 representaciones de las 28 compañías participantes mantuvieron en su máxima capacidad a los espacios teatrales.
Entre las conversaciones escuchadas del público presente y comunidad teatrera participante fue que el teatro en México se encuentra en su mejor esplendor, esto para César Tapia significa un acto “muy halagador” que pone como reto al INBA el seguir mejorando y abrir nuevos modelos de trabajo en conjunto: “siempre habrá mucho por hacer, ahorita está bien pero hay que seguir en la mejora, compartir más para que el esplendor sea mayor”.
A su parecer, las líneas curatoriales planteadas en esta convocatoria permitieron que el público viera una gran diversidad de propuestas, desde un teatro campesino de la sierra mixteca de Oaxaca hasta un espectáculo lleno de comedia y llanto.
La convocatoria de esta 36 edición tuvo una gran respuesta de 381 proyectos de todo el país, de los cuales poco menos del diez por ciento quedó en programación porque de lo contrario se necesitaría un mes para presentar más proyectos: “para todos fue un gran trabajo, nos vamos muy contentos y con un socio, con un cómplice llamado Aguascalientes para seguir creando cosas”.
Uno de los resultados que dejó esta edición en la entidad es el regreso del programa nacional de teatro escolar del INBA así como un Encuentro Estatal de Teatro; por lo que a nombre de todo el equipo y participantes de esta 36 Muestra Nacional de Teatro se concluyó haberse logrado los objetivos principales y las metas planteadas: “Una de las principales virtudes fue que intentó ser un modelo constructivo, el construir es para conocer, compartir, saber qué es lo que está sucediendo más allá de mi propia comunidad en la que me desarrollo, esto es el núcleo de una Muestra Nacional de Teatro”.