Primero el programa, luego el nombre / Jorge Varona Rodríguez - LJA Aguascalientes
15/11/2024

 

Cada proceso de renovación de los poderes públicos debe ser momento de reflexión y análisis colectivo. Es tiempo de ponderar avances y desafíos; evaluar las condiciones del desarrollo de la entidad y de cada municipio; valorar qué hemos hecho y cuánto falta por hacer para que, en efecto, el bienestar de las familias y el progreso económico incluya a todos, fortalezca la paz social en un ambiente de armonía pública y eficacia en el desempeño de las instituciones.

Por ello, de cara a las elecciones de 2016, el actual objetivo del PRI es definir con precisión cuál es el Aguascalientes que quiere la ciudadanía. De ahí, la inclusión de una amplia diversidad de voces en la Plataforma Política y Legislativa que habremos de entregar antes de iniciar el proceso electoral. Construir un programa de acción política, nos involucra a todos. Es labor de diagnóstico y propósito desde la pluralidad. Es vital que el programa represente el encuentro de las causas y las aspiraciones sociales. Así, será el fundamento para los compromisos que asumirán, al momento de pedir el voto del pueblo, los ciudadanos que abanderen las candidaturas de nuestro instituto político.

Hay que edificar una legitimidad programática que genere confianza y el respaldo de los electores en las urnas se convierta en el mandato de representación de la voluntad general. En ese sentido, la plataforma contendrá los objetivos del desarrollo de nuestro estado en los próximos años; delineará las metas para construir la obra colectiva de todo el pueblo. De ahí la importancia de establecer primero el programa y, posteriormente, elegir los mejores perfiles para llevarlo a la práctica.

En la inteligencia de que este programa será punto de partida para el diálogo y el encuentro entre ciudadanos y candidatos; y, en ese ejercicio, perfeccionar y ampliar los objetivos y alcances de lo que, con el voto de las mayorías, se convertirá en un contrato social entre el elector y el elegido, lo cual transformará la plataforma político-electoral con la cual se postuló, en plan de gobierno y agenda legislativa.

La Plataforma Política y Legislativa que estamos llamados a organizar y delinear, demanda que efectuemos un proceso social de diálogo incluyente, que contribuya a integrar las opiniones, intereses e identidades de los ciudadanos de cada sector, municipio, colonia o comunidad, de las zonas rurales y urbanas; que exprese las necesidades de la niñez, la juventud, las mujeres, los hombres, los adultos mayores; que sume las voces de las zonas populares, de la gente del campo y el personal de la fábrica; que esté abierto a estudiantes, profesionistas, asociaciones y colectivos sociales; a microempresarios, pequeños, medianos y grandes productores de bienes o prestadores de servicios; que represente a la vasta diversidad de las clases medias del estado. En suma, buscaremos elaborar colectivamente un programa de acción plural y compromiso comunitario para la convivencia, el bienestar, el progreso y el desarrollo sustentable e integral. Un acuerdo político, social, económico y cultural para trabajar en lo fundamental y lo fundamental es Aguascalientes.

Reconocemos que hay una persistente insatisfacción social porque aún no incluye a todos el nivel y calidad de vida a la que sin distinción tenemos derecho. Por tanto, a fin de elevar la calidad de nuestra democracia, será necesario fortalecer el sistema de representación con el propósito de que la legitimidad política se conjugue felizmente con la eficiencia y la transparencia. De ahí que sea éste el mejor momento de llamar a todas las voces críticas a contribuir con sus propuestas a diseñar una agenda para el cambio social. La indignación y la protesta, si bien son un legítimo ejercicio democrático de manifestación de ideas, por sí mismas son poco efectivas para transformar la realidad.

Hay que comprender la representación política como un trabajo de síntesis. Debido a la heterogeneidad de la sociedad, requiere, para actuar en favor del progreso colectivo, apertura a la deliberación a fin de ir entrelazando compromisos, y proponer el acuerdo que incluya las prioridades de cada sector social y productivo, alejándonos de ideas simples, populistas, intolerantes o cortoplacistas. Precavernos de las recetas únicas o respuestas efectistas sólo de maquillaje. Por el contrario, asumir una postura equilibrada y responsable, enriqueciendo con ello los procesos deliberativos y constitutivos del interés general.

En ocasiones se piensa que la política y la ética son conceptos antagónicos, que todo lo político está contaminado o es corrupto. Si lo que demandamos es el ejercicio limpio y honrado de la política y del servicio público, el único camino posible es ampliar y vigorizar el espacio para nuestras razones y nuestras causas, y ese espacio no es otro que el diálogo, la participación y el compromiso. En nuestra República y en nuestro estado eso se llama democracia y política. Si renunciamos a ser parte de la solución, de forma involuntaria le daremos la razón a aquellos que desean que la política no funcione.


Convocar a la sociedad para establecer el interés general de Aguascalientes, es un reto que asume el PRI, edificando puentes para alcanzar acuerdos en un complejo conflicto de intereses legítimos y justas aspiraciones. Estamos comprometidos con la justicia social y el avance democrático. Por todo ello, seremos un instrumento para la reivindicación de la política, la coherencia programática y el ejercicio de la capacidad que actúa y transforma.


Show Full Content
Previous Semana del Cine Mexicano en tu Ciudad llega a Aguascalientes
Next Quería ser escritor por el placer inmenso de contar historias: Alberto Ruy Sánchez
Close

NEXT STORY

Close

Peña Nieto, la Conago y el recuerdo de la Convención de 1914 / La Purísima… Grilla

10/10/2014
Close