La noche del pasado viernes 15, por cierto, Día del Maestro, felicidades a todos, dio inicio la segunda temporada del año 2015 de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes, una temporada que el maestro Román Revueltas, director titular de nuestra Sinfónica, ha llamado Obras Colosales.
En el primer concierto escuchamos un programa compuesto inicialmente por la Obertura de la ópera de Wolf Ferrari “Il Segreto di Susanna”. Después escuchamos el Concierto para Oboe y orquesta del compositor checo Bohuslav Martinu con la participación del maestro Gianfranco Bortolato como solista. Finalmente, después del intermedio el maestro Revueltas nos propuso el colosal Op. 58 de Tchaikovsky, el poema sinfónico Manfred.
Pero antes de entrar en materia, quiero comentar contigo, amable y paciente lector, que la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes se presentó el pasado jueves 14 de mayo, es decir, una noche antes de iniciar su temporada en su sede, el Teatro Aguascalientes, en el Auditorio Metropolitano de Querétaro con la Filarmónica de esta ciudad con el mismo programa que ofrecieron aquí la noche del jueves 7 de mayo, todavía dentro del contexto del programa cultural de la Feria Nacional de Sana Marcos 2015. El programa consistió en la Obertura Festiva de Dmitri Shostakovich y la monumental Tercera de Mahler, exactamente con los mismos protagonistas de aquel concierto en Aguascalientes. Sabemos que la presentación fue un éxito, los boletos se agotaron, muchas personas se quedaron afuera y, sobre todo, nos queda claro, que en Querétaro, como en Aguascalientes, y estoy seguro que en todos lados, hay más gente interesada en la música de concierto de la que nos podemos imaginar, con todo y que los medios de comunicación, sobre todo los permisionados, por no llamarles culturales, porque de eso, excepto Radio Universidad, ya no les queda nada, han desdeñado esta opción en sus barras de programación, qué lamentable, cuánta miopía intelectual hay en quienes toman las decisiones.
Pero, bueno, regresando al concierto que abre la segunda temporada del año, este primer episodio fue dirigido por el maestro Revueltas, director titular de la OSA.
La obertura de Wolf Ferrari es una página breve pero muy divertida, como todo el curso de la ópera en cuestión. En el concierto para Oboe de Martinu encontramos un solista verdaderamente solvente para encarar este repertorio del que sin duda debió salir satisfecho. Es un concierto dividido en tres movimientos, como casi todas las obras concertantes, Moderato, Poco andante y poco Allegro, es decir, en esa estructura de un movimiento lento en medio de dos rápidos. De manera especial, quiero destacar la ejecución de la cadencia del tercer movimiento Poco allegro en donde logró momentos muy intensos y de muy buenos modales. No hubo un encore, pero de verdad quedamos satisfechos con su ejecución.
Siempre he pensado que el maestro Revueltas es un gran director, pero que su lenguaje es el Romanticismo, especialmente Tchaikovsky, es en donde mejor se desenvuelve y en este concierto no me dejó lugar a dudas. Nos ofreció una muy intensa y convincente Sinfonía Manfred. Es una obra de un profundo carácter descriptivo realizada a partir del modelo establecido por Berlioz en su inmortal Sinfonía Fantástica, de hecho, encontramos cierto paralelismo entre ambas partituras, pero más allá de eso, el contacto del maestro Revueltas con este repertorio, lo hace sacar lo mejor de su potencial como director, bueno eso me parece a mí. Yo creo que hay compositores en donde nuestro titular se siente más cómodo, además de Tchaikovsky, Mahler es otro de ellos, y claro, dirigir a Mahler no es cualquier cosa. El OP. 58 de Tchaikovsky se divide en cuatro movimientos, todos ellos de carácter descriptivo: Lento Lugubre. Vivace con Spirito. Pastorale. Andante con Moto. Y Allegro con Fuoco.
El carácter Colosal de esta temporada lo encontramos justamente en esta partitura del más fino y ortodoxo romanticismo. Manfred es sin duda una obra colosal de principio a fin, en cada compás encontramos esa grandilocuencia propia del pensamiento musical de Tchaikovsky, exactamente de la misma forma que en la Sinfonía Quinta o en la breve pero intensa Obertura 1812.
Para la próxima semana, la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes, en su segundo concierto de temporada, nos ofrece dos obras de igual peso. El maestro Revueltas ha decidido prescindir de una obertura o alguna obra corta para abrir el concierto, y lo menciono para aquellas personas que llegan tarde, no tendrán acceso a la sala hasta que haya terminado el primer movimiento de la primera obra y será una verdadera lástima perderse un solo compás de este manjar musical.
El concierto inicia con el Concierto para Piano No. 2 en Sol menor, OP. 22 de Camille Saint-Saëns con la participación del maestro Alfredo Isaac Aguilar oficiando como solista. Después del intermedio escucharemos la Sinfonía No. 2 en mi menor, OP. 27 de Sergei Rachmaninov. La dirección será de nuestro titular, el maestro Román Revueltas. La cita con su majestad la música es el próximo viernes 22 de mayo a las 21:00 en el Teatro Aguascalientes, la casa de nuestra Orquesta Sinfónica. Por ahí nos veremos si Dios no dispone lo contrario. Hasta entonces.