Como se recordará, el maltrato a los animalitos caseros fue consentido por los diputados del Partido Verde Ecologista de México, al aprobar el IVA a la croqueta de La Familia Perruche, compuesta por 27 millones de perros y gatos, de los cuales, más del 52 por ciento (14 millones) hacen travesuras en hogares mexicanos que albergan a 52 millones de personas.
Atento a la sentida demanda, el Partido del Trabajo asumió la defensa de las mascotas domésticas masacradas por la Reforma Fiscal, en respuesta a la exhortación suscrita en el seno de la Conferencia Nacional de Gobernadores Perrunos (Conagoper), presidida por El Góber Pechocho, mi querido perro pug.
El PVEM, maletero del PRI, fue rebasado por la izquierda con la Iniciativa con Proyecto de Decreto presentada el jueves reciente por el senador David Monreal Ávila para derogar el numeral 6, inciso b), fracción I, del artículo 2º-A del la Ley del IVA, a fin de concluir con semejante estulticia.
En el documento de siete páginas publicado Gaceta Parlamentaria del Senado, se argumenta que las mascotas juegan un papel social que va mucho más allá de ser un artículo de lujo, como lo considera la vigente ley del IVA, pues de acuerdo con algunos estudios, cuando las personas deciden abrir la puerta de su hogar a una mascota, lo hacen con el pleno convencimiento de que será parte importante de la familia, al proporcionar “apoyo social y emocional a cada uno de los integrantes de la misma”.
Mientras esa lacra llamada PRIartido Verde Ecológico se dedica a joder a los animalitos en los circos, a las corridas de toros, a las peleas de gallos, a las pequeñas especies y a considerar a la croqueta un diamante, el PT está convencido que el IVA al alimento representa un daño directo a los animales, a los millones de familias aztecas y al bienestar de la sociedad.
A los 14 millones de perros y gatos que vivían en la calle antes de la aplicación de la Reforma Fiscal, debieron sumarse anualmente a la informalidad entre 250 mil y 500 mil animales abandonados por sus dueños, ante la incapacidad de seguirlos manteniendo, porque están muy lejos de ubicarse en la categoría contributiva que les endilga el gobierno, ilustra el columnista financiero David Celis (Excélsior, septiembre 30,2014).
La titular de la Sedesol, Rosario Robles, debiera apurar el diseño de una Cruzada Nacional Contra la Inanición Canina, reitero.
Porque alguien debe de decirlo: Por fin, el Comité Ejecutivo Nacional del PRI dejó de mandar chalanes con etiqueta de delegados generales. El viernes reciente se apareció el nuevo bombero, Miguel Ángel Chico Herrera. Rindió la protesta estatutaria en un acto privado, al que no fue convocada la espesa nata del tricolor. Su tardío arribo y la presentación exclusiva para la prensa, en primera instancia, dejó muy mal sabor de boca entre la feligresía priista.
Las fuentes de información consultadas hace cuatro días (El Universal, Wikipedia y Senado) enteran que el personaje nació en Irapuato, Gto., el 17 de marzo de 1961. Es abogado y notario público. Cuenta con un despacho jurídico en la notaría 37 ubicada en Celaya, Gto. Fungió como director de dos diarios del bajío, presidente del PRI en Guanajuato y diputado local a la LXI Legislatura. Es senador de la República por primera minoría.
Su huerto electoral está lleno de amargas toronjas en lugar de dulces naranjas. En calidad de candidato perdió las elecciones para gobernador de Guanajuato, senador, presidente municipal de Celaya y diputado federal.
Encontrará el senador Chico Herrera un PRI Aguascalientes que viene de derrota en derrota en el actual sexenio estatal. Se supone que la condición perdedora de ambos les permitirá identificarse mejor, compartir amargas experiencias y tomar decisiones acertadas para no volver a morder el polvo por enésima ocasión.
Es muy probable que su apreciado amigo y compañero de escaño, Miguel Romo Medina, en calidad de confidente, le haya interpretado la radiografía política correspondiente. Quizá lo puso al tanto de las condiciones existentes, de quién es quién de los políticos, de cómo mueven el abanico los grupos al interior de esa formación y de la cercanía o lejanía (recíprocas) de algunos personajes con el jefe nato de los priistas aguascalentenses.
El delegado general seguramente escuchará versiones tendenciosas y distorsionadas de la situación que priva al interior del PRI Aguascalientes. Algunos les entregarán sus filias y su fobias para que las compre. Escuchará el mejor argumento de los siempre inútiles (“perdimos por los traidores”) que han dinamitado al tricolor en las últimas elecciones federales y locales.
Con el tiempo, el delegado general se dará cuenta de quién mintió o pretendió engañarlo, pero por lo pronto, aplicar la receta de los 41 ingredientes sugerida por The Times, el influyente rotativo inglés, antes de publicar una nota, le sería de un gran provecho para no verse sorprendido por las versiones perversas.
Revertir el marcador de las diputaciones federales es parte de su obligación para cumplirle al presidente Peña Nieto, necesitado de conservar la mayoría en la Cámara baja en el segundo trienio de su mandato, pero al estar rodeado de los padres de las recurrentes derrotas, el resultado difícilmente será distinto en 2015: Mario Luis Ramos Rocha y Carlos Penna Charolet.
¿Cómo distribuirá su tiempo Chico Herrera? ¿Los días que le queden libres se los dedicará a la delegación general del PRI o se los entregará al Senado, donde se procesa intenso trabajo legislativo? Veremos, dijo un ciego.
