- Intentó acercarse a Peña Nieto durante su visita a Aguascalientes
- “A mí me queda claro que las autoridades no hacen nada”, confiesa ciudadana
El viernes antes del mediodía, mientras decenas de policías resguardaban la Plaza de la Patria en vísperas de la llegada de Enrique Peña Nieto, presidente de México, y de los gobernadores de casi todos los estados para el acto cívico de la conmemoración de los 100 años de la Soberana Convención Revolucionaria; de entre los activistas que pedían a las autoridades dar respuesta al paradero de Cristal Acevedo, desaparecida desde hace dos meses aproximadamente, surgió otra joven, con una historia similar.
“Es algo sencillo, algo que se vive a diario en este país: mi papá desapareció hace cuatro años, poquito más, el gobernador de Zacatecas no le dio seguimiento”.
Christine Casillas Martínez es originaria de Querétaro, pero sus padres vivían en Fresnillo, Zacatecas. Su padre fue secuestrado en ese municipio; sostuvo que cuando se hizo una primera denuncia, la familia Casillas Martínez recibió amenazas.
Comenta que tiempo después encontraron la camioneta en donde presuntamente había sido llevado, ésta se localizó en Aguascalientes, por lo que presentaron una segunda denuncia ante la Procuraduría, pero “tampoco se le dio seguimiento”. Agrega que lo que busca es que se adelante el trámite por desaparición, que se le dé un fallo.
“Se sabe que se han encontrado muchísimos cuerpos ya deshechos y ni siquiera nos han dado resultados de ADN ni nada. Lo único que esperamos que nos den seguimiento con la desaparición para dar el siguiente paso. La familia ya está resignada que ya no vive”.
Christine Casillas detalló que la situación económica de su familia es difícil, “tuvimos que cerrar el negocio por las amenazas. La situación es horrible en Zacatecas, mi mamá se vino a vivir acá (Aguascalientes) conmigo. No digo nombres por no quemar pero una tía mía, hermana de mi papá, está trabajando con el gobernador de Zacatecas, al principio se le vio intención de ayudarnos y después quedó todo ahí”.
Al preguntarle si desea un acercamiento con las autoridades, subraya: “a mí me queda claro que las autoridades no hacen nada, lo he vivido muy de cerca, ahorita acabamos de vivir otra situación”. Parte de su familia vivía en Los Cabos, explica que con la llegada y estragos del huracán Odile, lo que se mostró en televisión no fue nada comparado con lo que realmente vivieron las familias.
“Las cosas fueron más graves, ellas tuvieron que ser sacadas de Los Cabos por el gobierno de Querétaro, a todos los nacidos en ese estado y sus familias les estuvieron ayudando para salir; la gente se estaba muriendo de hambre, de sed, el gobierno no hacía nada, a mi sobrina de 14 años le apuntaron con un arma en la cabeza por quererse subir al avión”, una situación muy difícil.
Por todo esto, Christine se considera una persona inconforme con lo que sucede, “y si tengo la oportunidad de cuestionar al presidente de la República sobre este tipo de acciones o sobre las cosas que no hace y que debería de hacer, para eso estoy aquí, tratando de acercarme a él y cuestionarle un par de cosas, no con un propósito en especial, sino que me llamó la atención el caso de Cristal, porque esto ya es muy común”.