- No hay servicio de vigilancia por Seguridad Pública, las patrullas no suben hasta las comunidades
- Atusa retira servicio de la ruta 24 hacia Los Negritos, jóvenes estudiantes caminan hasta 5 kilómetros hacia sus casas
Nuevamente los reportes de las colonias de bajos recursos llegan al Congreso del Estado a través de la diputada Lourdes Dávila, quien indicó su preocupación por la falta de atención que se les da a estas colonias en específico, tanto de seguridad como de transporte.
Por tercera ocasión, le fue enviado un oficio a Atusa pues en las comunidades de El Coyote, El Edén y Los Negritos, donde habitan poco más de 500 familias, desde hace unos meses la única ruta (24) que pasaba por el rumbo dejó de llevar el pasaje a las comunidades, bajando a todos a más de cinco kilómetros de distancia, “a partir de las 5:00 o 6:00 de la tarde ya no los llevan hasta adentro y en la noche es muy peligroso”, sobre todo para los jóvenes estudiantes que regresan de las escuelas del turno vespertino.
Esta situación se une con otro problema que ya se observa muy constante en colonias de la ciudad: peleas de perros y de gallos clandestinas; Dávila detalló que durante su última brigada de distrito, una cantidad importante de vecinos mostraron preocupación y temor a dichas actividades pues por falta de vigilancia de Seguridad Pública municipal y estatal delincuentes utilizan esas zonas para alcoholizarse, drogarse y pelear a estos animales, “al igual que con los camiones sucede con los policías, las patrullas no suben hasta las comunidades se quedan en la tienda de la avenida”.
La situación se agrava durante los fines de semana cuando grupos de jóvenes aumentan el consumo de sustancias haciendo más intensas las peleas, la diputada ha enviado ya por tercera ocasión el llamado directo al presidente municipal para que se le exija a los elementos de seguridad que vuelvan a entrar a estas comunidades y pongan orden, pues la misma situación se ha encontrado en la Miravalle, Curtidores y San Marcos.
Aunque en estas comunidades aún no se reportan ataques hacia personas por efecto de las peleas de perros o de gallos, la funcionaria exigió control inmediato pues en el caso de la colonia Miravalle ya se tuvo un caso donde por falta de cumplimiento de la norma, un perro atacó a una niña por la espalda, “los perros no son agresivos por naturaleza, el humano lo hace”, muchos de los vecinos que han presenciado este tipo de delito no han querido denunciar por temor a represalias.