- La dependencia federal enfrenta cuatro juicios por información errónea en el “semáforo de gasolineras”
- El programa que mantiene la Profeco pretende promover un buen comportamiento de los proveedores ante los consumidores
En materia de combustible la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) verifica los establecimientos que expenden este producto al público en general, como gasolineras y plantas almacenadoras y distribuidoras de gas LP, ya que es una de las grandes demandas de la ciudadanía en las 32 delegaciones de la República Mexicana.
A nivel federal, la titular de la Profeco, Lorena Martínez Rodríguez, anunció la sanción de 350 gasolineras, de las cuales cerca de 80 han sido sujetas a un proceso de suspensión, principalmente por despachar litros que no son de litros, “este número va a crecer porque la procuraduría está recibiendo apoyo del Secretaría de Hacienda y de Economía”, por ello se estará duplicando el número de verificadores en materia de combustibles a partir del próximo mes.
La Profeco había estado emitiendo un “semáforo de gasolineras” como herramienta para que el consumidor tuviera la certeza de la cantidad de combustible que se les estaba despachando, en enero de este año se dejó de publicar en el sitio web de la dependencia por generar una percepción negativa de los establecimientos. Sin embargo, Martínez Rodríguez aseguró que este modelo deberá seguir existiendo para que los consumidores tengan el conocimiento de las sanciones que se están haciendo, “la Profeco está obligada a sustentar los datos en el derecho, siendo muy cuidadoso con la información que se sube al semáforo para no incurrir en ninguna falta”.
Algunas reglas de aplicación han traído como consecuencia una serie de juicios sobre probables responsabilidades administrativas por haber subido a la página del semáforo rojo unas sanciones que no corresponden a la realidad, “queremos que el semáforo sea objetivo, por eso estamos analizando los datos minuciosamente”. Hasta el momento se tienen cuatro juicios que representan la cantidad de 250 millones de pesos.
El programa que mantiene la Profeco en materia de combustible pretende promover un buen comportamiento de los proveedores ante los consumidores, que realicen una revisión periódica de los instrumentos de medición que utilizan para las operaciones comerciales y que cumplan con la normatividad vigente aplicable, específicamente en la Ley Federal de Protección al Consumidor, la Ley Federal sobre Metrología y Normalización, así como la NOM-005-SCFI-2005 sobre sistemas de despacho de combustible.
Lorena Martínez Rodríguez recordó que con estas acciones, la Procuraduría busca garantizar que las bombas de gasolina surtan litros de a litro y kilos de a kilo en vehículos, autotanques (pipas) y en repartidores de cilindros de gas LP, a fin de que las quejas vayan disminuyendo.