- Desde el 2011, el Instituto de Educación ha invertido varios millones de pesos en diagnosticar su realidad
- Transparencia no revela sus resultados; autoridades difieren sobre la realización de más estudios
En el ambiente educativo las instituciones difieren cuando el tema a discutir son los estudios y diagnósticos, pese a que la investigación siempre genera previsiones presupuestales.
Por un lado, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) considera que las carencias y retos del sistema ya están lo suficientemente claras.
Luego de que apareciera el Censo de Escuelas, Alumnos y Maestros de Educación Básica, José García Mora, coordinador del Colegiado Nacional de Asuntos Laborales y Negociación del SNTE, salió para declarar que México no podía dejar pasar otro sexenio en actividades de planeación.
“Con todo respeto”, refirió, cualquier ciudadano puede consultar múltiples diagnósticos, aunque pocas sean las acciones que éstos producen en las autoridades.
“Los diagnósticos están en el INEGI, las escuelas necesitan atención, necesitan equipamiento, necesitan conectividad. Los docentes requerimos capacitación, los programas pertinentes, no solamente una capacitación por cubrir la obligación del Estado”.
La idea en el Instituto de Educación de Aguascalientes (IEA) es complementar el Censo de Escuelas, realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, con una evaluación propia.
Los resultados, mencionó Francisco Chávez, titular del IEA, inclusive irán de rebote a la Secretaría de Educación Pública.
En 2011 arrancó el sexenio de Carlos Lozano de la Torre. Desde entonces el IEA ha invertido varios millones de pesos en diagnosticar su realidad.
En septiembre de aquel año la Universidad Autónoma de Aguascalientes, señalan documentos de transparencia, cobró a la dependencia tres millones 250 mil pesos por realizar el proyecto La evaluación formativa en el aula, mismo que no terminará sino hasta el 31 de julio del presente, según la calendarización.
Los diagnósticos no sólo abarcan el área educativa. El IEA también ordenó uno en cuestión energética, con el objetivo de “identificar áreas de oportunidad para llevar acciones de ahorro de energía”. Greenery Energia Concecional S. de R.L. de C.V. le cobró 108 mil 784 pesos.
Transparencia no explica el impacto de las erogaciones.
Durante 2012, el Instituto de Educación sólo ejecutó estudios, sin embargo, un año después, hizo que Investigación en Proyectos S.C. le practicara “un estudio de opinión cuantitativo a través del cual se busca conocer por medio de encuestas las principales variables de evaluación y percepción de la educación en el estado”. La operación tuvo un costo de dos millones.
En diciembre de 2013 ordenó a un particular investigar “sobre el uso de los acervos de las bibliotecas escolares y de aula para el desarrollo de la competencia lectora en alumnos de educación básica”. El último trabajo de que se tiene noticia demandó 63 mil 810 pesos.
Sólo de 2011 a 2013 el Instituto de Educación de Aguascalientes destinó cinco millones 422 mil 594 pesos en diagnósticos.
El Plan Sexenal de Gobierno define las necesidades a satisfacer en el sistema educativo de Aguascalientes. El análisis, indica, debe apuntar a los datos “cuantitativos y cualitativos tales como: cobertura, absorción, deserción, eficiencia terminal, grado promedio de escolaridad, analfabetismo, tecnología, infraestructura, logro académico y competitividad”.
Pie de foto: En 2011 el Instituto de Educación incluso invirtió en un diagnóstico energético