- La FEMESS ha propuesto por años la integración a la descripción de violación, la penetración por medio del pene como de otros objetos
- La falta de datos duros se debe a la confianza inexistente de la sociedad hacia las autoridades penales
A propósito de la iniciativa de aumento a la penalización del abuso sexual en Aguascalientes aprobada el jueves pasado por la LXII Legislatura, Marcela Martínez Roaro, presidente de la Federación Mexicana de Educación Sexual y Sexología (FEMESS), subrayó que más allá de la necesidad de aumentar la pena se requiere analizar y describir mejor los delitos sexuales.
Desde hace años atrás han trabajado en una propuesta legislativa no en el sentido de las sanciones, que a su parecer sí son bastante altas, sino en relación con el abuso sexual por cómo está gravemente tipificado en el estado.
El Código Penal del Distrito Federal, que es considerado punta de lanza en todo este tipo de legislaciones, define la cópula como la penetración del pene en la vagina, boca o cualquier orificio pero también el introducir en el ano o vagina cualquier objeto que no sea el pene, es decir, abarca las dos cosas como violación pues contiene los mismos elementos.
Por lo general una violación va asociada con una serie de tocamientos, “el hombre que viola a una mujer la manosea, la toca, la besa, la chupa, la muerde y luego introduce el pene”, pero si no lo hace, de igual manera efectúa estas acciones para después introducir otro objeto, por lo tanto Martínez Roaro vociferó que sea como sea la lesión es la misma, la ofensa es igual, la violación a la libertad a la salud sexual y a la intimidad sexual se da en ambas formas.
Sin embargo en Aguascalientes el término violación es explicado sólo si se introduce el pene, mientras que si se introduce cualquier otro objeto es llamado abuso sexual y la violación por lo tanto es menor. Para la especialista en el tema sexual, el trabajo urgente no es tanto en la sanción sino en incluir en la definición de cópula de la violación no sólo la introducción del pene sino de cualquier objeto vía anal o vaginal.
En términos de sexualidad nunca se acaba de trabajar en materia penal, siempre hay nuevos delitos, por ello FEMESS continuará luchando porque se efectué el análisis minucioso de la ley sobre todos los tipos penales y actualizarlos, sobre todo en nuevas conductas que hay, pues en términos de delitos sexuales siempre hay que estar revisando la ley; esto requiere de un largo proceso de análisis con expertos en las diferentes materias incluidas, tanto las legales como las sexuales.
Al solicitarle datos duros sobre delitos sexuales, la activista lamentó su inexistencia por la falta de denuncias que van de la mano de la integridad, culpa y vergüenza de las mujeres y niños violentados, así como de la falta de confianza que se tiene hacia la Procuraduría, “por años hemos exigido que se haga un buen trabajo y que las autoridades busquen intensamente cómo generar la confianza de las personas”.
Lo que sí se conoce es que entre quienes son víctimas de agresiones sexuales se destacan las mujeres, los hombres como los sujetos activos agresores y un número estratosférico de menores agredidos, “las mujeres lo llegan a expresar, los niños jamás, lo cual causa severos daños en su persona”, puesto que en la mayoría de los casos exteriorizan tal agresión hasta que son adultos, creciendo con traumas diversos.
Sólo para referenciar recordemos que la FEMESS se apoya en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en los principios básicos de la Ley General de Salud, en la Ley General de Educación y en los compromisos internacionales asumidos por México tales como: el Programa de Acción de la IV Conferencia Internacional de Población y Desarrollo y la Plataforma de Acción de la IV Conferencia Mundial de la Mujer; a lo largo y ancho del país cuenta con especialistas activistas que han sido parte de iniciativas en materia penal sobre delitos sexuales.