Las palpitaciones del corazón del Presidente de la República se mantuvieron entre 120 y 80 por minuto cuando su Secretario de Economía le presentó el Dossier que contenía el nombre de la abogada Lorena Martínez Rodríguez como su propuesta principal para ocupar una vacante en el gabinete ampliado: la Procuraduría Federal del Consumidor. El primer Mandatario externó una sonrisa de afecto y reconocimiento a la propuesta de su amigo Ildefonso Guajardo, a quien interrogó:
–¿Guajardo, con qué artes te armaste para convencerla?
–Con las artes de la política y la amistad, señor Presidente– respondió el regiomontano, devolviéndole la cortesía al Mandatario.
La política es así, obedece a reglas de la lógica. Lo ganado ayer jamás es eterno. Cada día se construye el futuro. Hay algunos agentes maliciosos que se especializan en destruir lo construido, en inundar lo ya drenado. Por fortuna existen los obreros que levantan los muros de la defensa de la ciudad.
Lo interesante en este dialogo es que el Presidente de la República tomó una determinación relevante al distinguir al Estado de Aguascalientes por medio de la recia personalidad de una eficiente dama de la política hidrocálida, la licenciada Lorena Martínez Rodríguez. Enrique Peña Nieto ofreció a la clase política local, una enorme ventana pública al colocar a “La Nueva Política” al frente de la Procuradora Federal del Consumidor.
“En la política la forma es fondo, y lo que resiste, apoya”, afirmaba el gran maestro de la política mexicana, Don Jesús Reyes Heroles: Así las cosas “La Nueva Política”, Lorena Martínez Rodríguez, ha sido exaltada por el Gobierno de la República, y sin duda está vigente. Hoy la razón le asiste, y quienes resisten, apoyan; esa es una verdad incuestionable.
Meses atrás, la entonces alcaldesa de Aguascalientes había estrechado las manos del Presidente Peña Nieto, quien acudía a inaugurar la segunda planta ensambladora de la empresa Nissan mexicana instalada al sur de la capital de Aguascalientes. En aquel evento público, el Mandatario tomó del brazo a la Alcaldesa y reiteró que la tenía dentro de su corazón; afectuoso como es con sus amigos, con un beso en la mejilla, la invitó a integrarse a su gabinete una vez que el periodo constitucional municipal hubiese concluido, lo que sucedió el 31 de diciembre pasado.
Cuatro años atrás, Lorena Martínez Rodríguez había iniciado una campaña conocida como “La Nueva Política”, con el objeto de obtener la candidatura del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Partido Verde (PV) y Partido Nueva Alianza (PANAL), al Gobierno del Estado de Aguascalientes. Aquel proyecto rumbo a la gubernatura del Estado no cuajó, y sin embargo la Alianza de partidos nacionales le propuso que aceptara la candidatura a la Presidencia Municipal de Aguascalientes, Ciudad que concentra el 75% del electorado de todo el Estado. Con disciplina institucional, Lorena Martínez desarrolló su proyecto electoral y obtuvo una fantástica votación de 160 mil sufragios que legitimaron su ascenso a la Alcaldía de Aguascalientes para el periodo 2011-2013.
La popularidad en política social de Alcaldesa de Aguascalientes alcanzó niveles extraordinarios durante su primer año de ejercicio con la instauración de dos proyectos emblemáticos de buen gobierno: El Programa de Prevención del Delito: Convive Feliz; y el Proyecto de Bienestar Social y Seguridad Ciudadana, denominado Línea Verde; ambos instrumentos han sido retomados como experiencias exitosas para la implementación de políticas públicas en todo el país.
Justo a la mitad de su gobierno, “La Nueva Política” declinó la invitación que su partido le hizo para postularse como candidata a Senadora de la República, argumentando ante la opinión pública que estaba obligada a responder a la confianza que la ciudadanía le había brindado en las urnas, por lo tanto, se mantendría como alcaldesa hasta el fin de su periodo constitucional, lo que cumplió sin olvidar su legítima aspiración de contender por la candidatura de gobernadora del Estado de Aguascalientes en los próximos comicios de 2016.
Algunos promotores de la vida política local de Aguascalientes expresaron la pertinencia de que Lorena Martínez se arraigara en Aguascalientes para garantizar su presencia y actuación pública por medio de algún cargo en el gabinete del actual Gobernador; otros consideraban que la delegación federal de SEDESOL sería un espacio político ideal para su inmediata proyección política; unos más pensaron que una posición partidista la colocaría en la antesala de su aspiración a ser candidata a gobernadora y la promovieron como Presidenta del Comité Estatal del PRI, cargo que ya había ocupado años atrás.
Ciertamente el secreto de la política consiste en mantener la vigencia, pero resulta irrelevante el cargo, o la distancia, para garantizar la presencia real de un político entre el electorado. Tanto así, que muchos políticos han sido descalificados debido a su evidente ausencia entre los electores.
Lorena Martínez Rodríguez ha sido reconocida por su penetración entre los sectores más populares de Aguascalientes. Su ejercicio de gobierno le ganó muchos adeptos solidarios, a pesar de que por motivos electorales también se allegó desencantos.
Recordemos: “lo que resiste, apoya”; así que las resistencias políticas serán definitivas para la construcción del porvenir.
El reconocimiento que el primer mandatario ha hecho en favor de la licenciada Lorena Martínez Rodríguez, como el justo apoyo a la magnífica labor que ella realizó en la floreciente Aguascalientes, nos enorgullece a todos los aguascalentenses que sabemos de los esfuerzos por corregir varios de los problemas que la ciudadanía sufría.
Nos auxilió a disfrutar de nuestro entorno con programas y acciones; pero sobre todo con su especial dedicación a cumplir con su palabra empeñada tres años antes.
Bien por ella y bien por todos nosotros. Gracias señor presidente.