Tchaikovski y Beethoven en el séptimo concierto de temporada | Orquesta Sinfónica de Aguascalientes por: Rodolfo Popoca Perches - LJA Aguascalientes
21/03/2025

Orquesta Sinfónica de Aguascalientes

Tchaikovski y Beethoven en el séptimo concierto de temporada

No podría decir que fue sala llena, las primeras cuatro o cinco filas tenían algunas butacas vacías, el resto de la planta baja lucía lleno, no sé cómo estaría el acceso en el primer piso, pero por lo que vi desde mi lugar, y sobre todo por la cantidad de gente que bajó por las escaleras al terminar el concierto, ese lugar también estaba generosamente poblado, y es que se contaban con todos los elementos para disfrutar de un concierto casi perfecto, entendiendo que la perfección humanamente no existe, un programa suculento, que desde el papel lucía atractivo, un solista que es garantía, no sé cuántas veces ha tocado aquí el maestro Alexander Pashkov, pero es un pianista muy conocido y apreciado por el público melómano de Aguascalientes y también muy querido por la OSA.

El Concierto para piano No.1 de Tchaikovsky, un verdadero monumento del lenguaje concertante, y la Sinfonía No.5 en do menor, Op.67 de Ludwig van Beethoven, un verdadero coloso del sinfonismo universal, deben garantizar una excelente entrada en cualquier sala de conciertos en que se programen. A estos ingredientes debemos agregar que la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes es, inobjetablemente, una de las mejores orquestas del país, y no olvidemos que el lenguaje del romanticismo se le da muy bien al maestro Román Revueltas, me queda claro que especialmente Tchaikovski es un compositor que el maestro entiende y proyecta con una pasión incuestionable. Y en efecto, este séptimo concierto de temporada emanaba el más delicioso aroma del romanticismo musical, con esta característica tan propia de los grandes compositores románticos de darle sentido al dolor convirtiendo el sufrimiento en monumentales obras de arte, desde Beethoven, el último de los clásicos, y el primero de los románticos, pasando por Brahms, Schumann, Schubert, Tchaikovski, Chopin hasta llegar al atormentado Mahler estaban todos familiarizados con la tragedia, la soledad, la incomprensión, la muerte, y supieron darle cauce a todo ese dolor a través de su majestad la música. Todo este repertorio del romanticismo exige una pasión desbordada para una digna ejecución, pero al mismo tiempo, un público lo suficientemente sensible e igualmente apasionado para dejarse seducir por los encantos de esta fascinante música, y lo menciono porque en la sala del Teatro Aguascalientes se sentía cómo toda esa magia que surgía desde el escenario envolvía a todos los asistentes, pero ya ves, nunca falta un despistado que no se da cuenta en dónde está, ni qué tipo de música tiene la oportunidad de conocer, yo creo que no conocía nada de esta desbordada exquisitez musical, mucho menos de disfrutarla. Una persona, un señor que presumo, iba solo, se sentó atrás de mí y sin el menor escrúpulo, se la pasó mandando mensajes en su celular, incluso hablando por teléfono como si estuviera en un café, un amigo que estaba sentado a dos butacas de él, y con quien coincidí en el intermedio, me hizo el comentario muy molesto, pero con esa misma carencia de escrúpulos continuó con la misma tendencia en la segunda parte del concierto, pero ahora sí, fue una niña que yo calculo que tendría unos 7, o tal vez 8 años que le dijo que por favor guardara silencio, y muchas otras personas voltearon a verlo con justificada indignación, alguien escuché que le dijo que si así lo deseaba, saliera de la sala, esta persona se quedó en su lugar, pero finalmente guardó su teléfono. No entiendo cómo es posible que alguien, teniendo la oportunidad de escuchar en vivo monumentos musicales como los programados el pasado viernes, se distraiga en plena sala, con un teléfono celular, por un lado resulta deprimente cómo alguien puede estar tan dominado por la tecnología y depender de ella como si del agua o del aire se tratara, y entristece también la sumisión de muchas personas sin oponer la menor resistencia a estos aparatos que han dominado la voluntad humana desdeñando lo que verdaderamente debería atraparnos como el arte, porque tú lo sabes, el arte enriquece y tiene el poder y la facultad de hacernos mejores personas, en fin, así las cosas.

Pero hay que destacar los mejor, y lo mejor fue la música, todo se combinó para que este fuera, de verdad, un gran concierto, el programa, el solista, la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes, el maestro Revueltas que hizo un gran trabajo, y el público que casi llenó el Teatro Aguascalientes dando continuidad a esta tendencia de la primera temporada de conciertos de nuestra máxima entidad musical de tener excelentes entradas en el Teatro Aguascalientes que, por ahora, sigue siendo la casa de la OSA, habrá que ver qué sucede con la Sala de Conciertos de la Sinfónica de Aguascalientes en el complejo Tres Centurias, esperamos que realmente la reparen y se pueda habilitar para conciertos sinfónicos, este en el fin para el que fue creada, y claro, para ser al asa de nuestra amada Sinfónica. 

El día de mañana, en el octavo concierto de temporada se da continuidad a la iniciativa de presentar las 106 sinfonías de Franz Jospeh Haydn, a quien se atribuye la creación de este gran lenguaje musical, la sinfonía. Mañana viernes 21 de marzo disfrutaremos de las sinfonías quinta, sexta, séptima y octava, dirige el maestro Román Revueltas. Ya sabes, los conciertos son a las 20:30 horas en el Teatro Aguascalientes, ahí nos vemos si Dios no dispone lo contrario.


Show Full Content
Previous Impulsan Sectur y GAFSACOMM el desarrollo turístico en el sur-sureste de México
Next Ciencia para la conservación ambiental y animal | Ambientalistas por: Ruth Montserrat Serafio Méndez
Close

NEXT STORY

Close

LJA 10 de Septiembre 2016

10/09/2016
Close