Aclaraciones
Antes de darnos cuerda con los temas que marcaron la agenda política en nuestro Agüitas, queremos publicar íntegramente una aclaración que se nos hizo llegar sobre lo expuesto ayer en este espacio, respecto al PRI y sus terrenos. Esto lo hacemos en compromiso con la apertura al diálogo, el debate y la escucha de todos los puntos de vista. Al respecto, nos enviaron lo siguiente:
“En relación a la nota publicada en (SIC) día de ayer en La Purísima Grilla, me permito aclarar lo siguiente: Que los sectores y organizaciones del PRI son órganos autónomos que pueden contar con patrimonio jurídico propio. Quienes hemos tenido la oportunidad de dirigir desde la presidencia del partido, en mi caso particular, somos ajenos a cualquier injerencia en la toma de decisiones, ya sea de índole político o en lo que se refiere a su estructura patrimonial, desconociendo en este momento su situación jurídica actual o su patrimonio.”
Norma Esparza Herrera
Exsenadora y expresidenta del CDE PRI
Continuamos con nuestra programación habitual
Aclarado el tema del PRI y sus terrenos, seguimos con nuestra programación habitual. Vámonos directo a lo sucedido en la sesión de Cabildo del Municipio de Aguascalientes, donde los integrantes aprobaron los proyectos que se ejecutarán con el presupuesto participativo.
Este mecanismo no es solo una asignación de recursos, sino una vía para incentivar la participación ciudadana en la toma de decisiones. A diferencia de otros modelos, aquí los vecinos no son espectadores, sino actores clave: presentan propuestas, deliberan y deciden qué obras y mejoras necesita su comunidad.
Ahora, el reto es garantizar que el presupuesto participativo funcione como una herramienta de verdadera incidencia social y no solo como un ejercicio burocrático. Para ello, se necesita transparencia en la ejecución de los proyectos y un seguimiento efectivo que demuestre que la voz de la ciudadanía realmente cuenta en la construcción de un Aguascalientes más democrático y funcional.
Sin relevancia
Hubo quienes minimizaron la participación ciudadana, desestimando el esfuerzo de quienes armaron proyectos y los presentaron ante el municipio. Tal es el caso de la regidora Martha Márquez, quien, en su intervención, aseguró que no estaba en contra de los proyectos aprobados, pero que estos no representaban la realidad de lo que ocurre en las calles de la ciudad. Dijo que estos proyectos “no tienen relevancia” y que, desde su perspectiva, el presupuesto participativo “es solo una estrategia para callar a los ciudadanos”, pues nadie los escucha, ni el alcalde, ni los panistas… solo ella.
En respuesta, la regidora Cindy Ruvalcaba la exhibió, señalando que ni siquiera estuvo presente en la sesión previa, donde se analizaron a fondo todos los proyectos. En su contrarréplica, Márquez acusó que los proyectos aprobados obedecen más a intereses políticos, ya que la mayoría se concentra en zonas donde el PAN tiene mayor presencia, mientras que las colonias del oriente de la ciudad, donde hay mayores necesidades, fueron ignoradas. En ese sentido, hizo un llamado para que en la colonia Rodolfo Landeros se atienda la problemática de tuberías, que según su información, llevan 28 años sin mantenimiento.
Martha vs. Martha
La regidora Martha González respondió a su tocaya Martha Márquez, lamentando que una representante popular minimizara el esfuerzo de los ciudadanos que participaron, reduciendo su trabajo a “obras mediocres y sin sentido”. Recordó que 81 grupos de ciudadanos presentaron proyectos, y descalificar su esfuerzo de esa manera es una falta de respeto.
Para rematar, nuevamente Cindy Ruvalcaba lamentó que se desconociera la convocatoria del presupuesto participativo, la cual especificaba claramente los cuatro rubros en los que podían inscribirse proyectos: recreación, deporte, imagen urbana y cultura. Al final, Márquez insistió en que los que realmente se burlaban de la ciudadanía eran los regidores panistas. Total, una discusión de nunca acabar.
Quietecitos
Quienes se la llevaron en calma fueron los diputados locales, que en su sesión semanal del pleno no se ausentaron, no discutieron y hasta se respiraba paz entre los grupos parlamentarios. Sin embargo, le aplicaron una jugada a la bancada de Morena: se votó un punto de acuerdo para declarar el 2025 como Año de la Mujer Indígena y Rural.
Aquí lo curioso es que semanas atrás, la bancada guinda, a través de la diputada Irma Reza, propuso exactamente lo mismo y les dieron palo, argumentando que “una leyenda en una hoja de papel no simbolizaba nada”, y que se necesitan acciones, políticas y leyes reales para garantizar igualdad a las mujeres.
Pero ahora, con la misma propuesta impulsada por la diputada panista Alma Hilda Medina Macías, de repente todos estuvieron de acuerdo. Si bien es un avance para este sector de mujeres, ¿para qué rechazar la misma iniciativa semanas atrás solo porque venía de Morena? En fin, solo ellos y sus egos se entienden.
También se bajó del barco
La renuncia de José Antonio Garza Tristán como comisionado del Instituto de Transparencia del Estado de Aguascalientes (ITEA) llega en un momento clave para la rendición de cuentas a nivel local. Con la reciente desaparición de los organismos de transparencia a nivel federal, se vuelve aún más importante fortalecer las instituciones estatales que garantizan el acceso a la información. En este sentido, la ciudadanía debe mantenerse atenta, pues aún faltan las leyes secundarias en materia de transparencia. Más que nunca, es fundamental que Aguascalientes blinde sus mecanismos de acceso a la información y continúe apostando por la rendición de cuentas. En un contexto nacional complicado, la transparencia local no debe quedar a la deriva.