Combo 4T: “Pa’ quete” pasees.
De los visionarios detrás del Gas Bienestar y los jueces del Bienestar, llega el lanzamiento más innovador de la Cuarta Transformación: el flamante “Paquete Pasees” o, como con cariño lo han bautizado, el “Paquete Turístico 4T”. Durante su presentación estelar, Martí Batres, director del ISSSTE (y, en un dato que no tiene absolutamente nada que ver, hermano de la ministra Lenia Batres, quien busca un lugarcito en la elección judicial), compartió los detalles de este revolucionario proyecto. También sería un buen momento para recordar que esta misma administración busca terminar con las “herencias” en cargos públicos… excepto, parece, cuando les conviene.
Volvamos al Paquete: una experiencia inolvidable que comienza con una salida desde el AIFA (sí, ese aeropuerto que sigue luchando por un lugar en los mapas internacionales). El viaje se realiza en uno de los dos aviones de Mexicana de Aviación -¡dos aviones son más que suficientes para un país, después de todo!- con destino directo al aeropuerto de Tulum. Allí, el recorrido incluye hospedaje en hoteles del Tren Maya administrados por la SEDENA, una garantía de seguridad y excelencia… en teoría.
El broche de oro es el tour por el Tren Maya, donde, quién sabe, quizás le entreguen una estampita de AMLO y un detente “por si acaso”. Así que, si usted es un ferviente creyente de la 4T y busca la máxima experiencia transformadora, este paquete es para usted. Eso sí, la devoción guinda se da por descontada.
Sociedad Civil vs Ministras
Hace unos días comentábamos en este espacio cómo ciertos aspirantes a un cargo federal en el Poder Judicial comenzaron, de forma discreta pero evidente, su propia versión de una “campaña velada”. En su mundo, la legalidad es flexible y la prohibición de actos anticipados de campaña parece más una sugerencia que una norma. Entre entrevistas estratégicas, visitas a colonias y actividad desbordada en redes sociales, queda claro que algunos juristas no solo buscan un escaño, sino también el premio al descaro político.
El caso más sonado, y predecible, es el de las ministras asociadas a la 4T: Yasmín Esquivel, Lenia Batres y Loretta Ortiz, quienes han sido denunciadas ante el INE por actos anticipados de campaña y, para agregarle un toque de escándalo, presunto uso indebido de recursos públicos. Según los denunciantes, la asociación “Defensorxs AC”, estas figuras han estado promoviendo su imagen antes de tiempo y a costa del erario, lo que ha llevado a solicitar una investigación exhaustiva. Además, se exige que eliminen las publicaciones electorales en redes sociales, aunque, siendo honestos, probablemente ya estén guardadas en algún archivo por si acaso.
Quizás, para futuras campañas, estas ministras deberían recordar que las leyes aplican incluso para quienes las interpretan. Aunque ese sería otro nivel de transformación.
Más bola que engrudo
En el Instituto Estatal Electoral (IEE) parece que el engrudo no solo se les hizo bolas, sino que además se les pegó a las manos. Con el proceso electoral a la vuelta de la esquina y nuevas reglas en el horizonte, el IEE celebró ayer una de sus sesiones de Consejo. ¿El propósito? Definir las comisiones electorales y otros asuntos internos que, en teoría, deberían fluir con normalidad. Pero, como era de esperarse, el espectáculo dejó mucho que desear.
El momento estelar llegó cuando se propusieron incluir dos puntos en el orden del día: primero, discutir si los órdenes de gobierno deben abstenerse de promover el voto (no sea que confundan promoción con autopromoción), y segundo, la estructura electoral. Lo que siguió fue un show digno de un sketch cómico. La nueva secretaria electoral, visiblemente nerviosa, protagonizó una coreografía de incertidumbre: pasaba de la mesa al asistente, del asistente a la presidenta, de vuelta a la presidenta y, como en un partido de fútbol amateur, el balón -o más bien, la duda- iba y venía sin un destino claro.
La confusión escaló al debatir cómo votar los puntos: ¿incluían el orden del día completo o solo los temas particulares? Mientras tanto, los consejeros y asistentes parecían más perdidos que turistas sin mapa. Este proceso electoral promete ser un terreno inexplorado, con muchas “áreas de oportunidad”. Esperemos que, al menos, encuentren el manual de instrucciones antes de que todo termine en un fuera de lugar.
No hay plazo que no se cumpla
Ayer, en la sesión de la comisión permanente del Congreso del Estado, se escribió el desenlace de una telenovela legislativa: Alejandra Peña Curiel finalmente tomó protesta como diputada. Esto, tras dos largos meses desde que Aurora Vanegas solicitara su licencia y después de que el Tribunal Electoral del Estado prácticamente les diera una cátedra jurídica a los diputados al desestimar su argumento para retrasar la incorporación de Peña. En otras palabras, no les quedó de otra más que cumplir con lo que debieron hacer desde el principio.
En rueda de prensa, la recién estrenada diputada Ale Peña, con una elegancia digna de diplomática, se limitó a declarar que su objetivo estaba cumplido, que pasaba la página y que no iniciaría otros procesos legales contra quienes, con creatividad cuestionable, retrasaron su toma de protesta. Según sus palabras, viene a “sumar y generar acuerdos”, claro, “mientras las condiciones se den”. Traducción: habrá que ver qué tan dispuestos están sus compañeros a no tropezarse entre ellos mismos.
Por fin, el Poder Legislativo está completo. Eso sí, habría que reconocer que esta legislatura sabe cómo entretenernos, aunque sea por sus desatinos. Al menos ahora podrán enfocarse en lo que realmente importa… o en lo que les alcance el tiempo.