- Brenda Noemí Rodríguez Ortiz, miembro del motoclub Águilas Rodantes desde hace cuatro años, habló sobre su experiencia como mujer biker en Aguascalientes, un mundo lleno de pasión, pero también de retos.
Su incursión en el motociclismo comenzó gracias a un exnovio apasionado por las motocicletas. Tiempo después, Brenda decidió convertirse en piloto independiente y finalmente se unió a Águilas Rodantes, un motoclub exclusivamente femenino. “Somos hermanas por elección y estamos aquí por convicción”, comentó.
Dentro del motoclub, Brenda encontró una red de apoyo y compañerismo que se refleja en cada rodada. Sin embargo, reconoció que abrirse paso como mujer biker no ha sido fácil. “Nuestra fundadora Jessie, en paz descanse, enfrentó obstáculos para posicionarnos. Se enfrentó a hombres machistas y homofóbicos que no entendían por qué participábamos en este mundo. Ella abrió el camino y seguimos honrando su legado”, señaló.
Águilas Rodantes forma parte de la Unión de Motociclistas de Aguascalientes, un espacio que Brenda describe como inclusivo y solidario. “Como su nombre lo dice, es unión, aquí somos bienvenidas, tanto mujeres como hombres. Nos respetan, nos incluyen y siempre nos reciben con las alas abiertas”, aseguró.
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Finalmente, Brenda invitó a más personas a sumarse a esta experiencia. “Tomar el manubrio y sentir el viento te ayuda a dejar atrás los problemas. Disfrutar el momento te renueva y te hace olvidar las preocupaciones”, dijo.
Aunque reconoció que aún queda mucho camino por recorrer para alcanzar la inclusión total en el motociclismo, Brenda destacó que cada rodada es un paso más hacia el cambio. “Es una lucha constante, pero poco a poco estamos marcando la diferencia”, concluyó.