Bajo presión
Fisuras
En cuanto ayudarme a enfrentar a otros caballeros, advierte Don Quijote a Sancho Panza, tendrás que mantenerte a raya, finaliza la escena en el primer libro de Miguel de Cervantes el capítulo en que embate contra los molinos de viento creyendo que eran gigantes amenazantes. Así, a distancia, se mantuvo la presidenta Claudia Sheinbaum en el desencuentro entre Adán Augusto López Hernandez y Ricardo Monreal Ávila, enviando como intermediaria a la secretaria de Gobernación.
No puedo evitar intervenir el Nocturno a Rosario de Manuel Acuña para describir la imagen del encuentro convocado por la presidenta, al final lo que se difundió fue una fotografía en la que en medio de nosotros, la representante de la presidenta como un Dios, aparece Rosa Icela Rodríguez entre los legisladores morenitas como muestra del jalón de orejas que desde la presidencia se ha dado a quienes patalearon para conseguir un protagonismo que únicamente duró unos cuantos días en la discusión pública.
Al final, Ricardo Monreal y Adán Augusto López fueron convocados por la presidencia para dirimir sus diferencias, en la conferencia matutina, una vez más, se minimizó el hecho para anunciar que no había fisura alguna en el movimiento. Con todo el poder que se ejerce en la realidad desde el Poder Ejecutivo, Sheinbaum Pardo acota el “malentendido” a una diferencia de opiniones que puede ser resuelta en lo oscurito y no de manera pública cuando se trata de dinero público.
Una muestra más del uso público del discurso oficial que aprovecha las conferencias mañaneras para intentar establecer una verdad que no se relaciona con los hechos. La discusión entre los legisladores morenitas tiene que ver con el uso del dinero para influir en sus bases sociales y comprar el apoyo de sus correligionarios en las cámaras que presiden, en ningún momento ha estado en riesgo el apoyo de la masa a la presidenta, ese poder con que Claudia Sheinbaum puede ejercer sus funciones sin que se haga mella a su legitimidad.
La unidad en torno a la presidencia queda intacta, se acabó el pleito, Morena no corre ningún riesgo, se continuará con el servilismo a la presidencia, lo de menos son las acusaciones de presuntos actos de corrupción en el Senado, que de manera vehemente señaló en tribuna Adán Augusto López.
Tras el regaño de la presidenta no se investigará quién resguarda los archivos del Senado, ni se revisarán los contratos de mantenimiento de los elevadores el recinto legislativo, los dos legisladores tendrán que pensar nuevas formas de conseguir protagonismo, eso sí, sin raspar las vestiduras de Morena y, sobre todo, sin inmiscuir al partido.
Después del jalón de orejas, la presidenta puede transitar hacia el fin de año sin distracciones, promoviendo a más no poder los resultados de su estrategia de seguridad para así incidir en la percepción pública, aunque el país siga siendo un infierno; mientras que los legisladores tendrán que guardarse y no dar más señales de sus diferencias; felices fiestas y ya.
El problema es que de acabarse el pleito tal y como ordena la presidenta, se disolverán las acusaciones realizadas desde el Senado por presuntos actos de corrupción. Lo que hasta ahora se sabe es que el senador mintió, porque el “Servicio de guarda, custodia, conservación y administración” de los expedientes que conforman los juicios de amparo, controversias constitucionales y acciones de inconstitucionalidad y controversias constitucionales para el Senado, es un contrato por cuatro millones de pesos anuales y no de 360 millones en seis años, como aseguró Adán Augusto; mientras que sobre el contrato para mantenimiento de los elevadores, la Auditoría Superior de la Federación ya manifestó que no ha encontrado inconsistencia alguna en ese contrato; de hecho, la ASF ha realizado a las dos anteriores legislaturas casi 70 auditorías y todas las observaciones resultado de estos ejercicios ya fueron solventadas, lo que no implica un triunfo a favor de Ricardo Monreal, sino el estricto cumplimiento de la ley por parte del Senado, que es lo menos que se puede esperar.
Tras el jalón de orejas de la presidenta a estos legisladores, lo único que queda claro es que la ausencia de organismos autónomos para exigir la rendición de cuentas obligatoria al gobierno deja en la indefensión a la ciudadanía, a merced de la interpretación exagerada de quienes buscan los reflectores para sus mantener vigente su carrera política.
Central
No es poca cosa la declaración de Alfredo Cervantes al descartarse como candidato a la presidencia municipal de Aguascalientes, si bien aún falta un tramo largo para que Teresa Jiménez designe al sucesor de Leonardo Montañez, los cambios que realice la gobernadora en su gabinete y en el Congresito serán una muestra efectiva del apoyo a un proyecto político trabajando y encarrerado, del que sabremos más a inicios del próximo año, por así convenir a los intereses del grupo de la gobernadora, en el que desde hace muchos años lo importante ha sido trabajar como equipo antes que los protagonismos personales, lo que Morena en Aguascalientes no acaba de entender.
Coda. No puedo evitar pensar en Thomas Hobbes y una de sus frases en el Leviatán: “El infierno es la verdad vista demasiado tarde”, mientras sigamos creyendo las explicaciones oficiales sobre los desencuentros en el terreno político, más lejos estaremos de reconocer lo que realmente está ocurriendo en las disputas por el poder.
Ps. Agradezco a Francisco Javier Chávez Santillán su deferencia a mi persona en su columna Para redescubrir la Patria chica, así como los comentarios de Jesús Medina que me llevaron a rascar un poco en el Leviatán de Thomas Hobbes.
@aldan