- El proyecto del dr. Omar Gutiérrez Navarro en la UAA emplea imágenes hiperespectrales para observar tejidos internos sin necesidad de biopsias invasivas
- Esta tecnología permite identificar tejido sano y dañado mediante la medición de perfusión y niveles de oxígeno, siendo de gran utilidad para prevenir amputaciones en pacientes diabéticos
- Aunque la tecnología es costosa, el equipo está trabajando en desarrollar una versión más asequible que permita ampliar su acceso y beneficio
El dr. Omar Gutiérrez Navarro, miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) nivel 1 y docente investigador en la UAA, presentó un proyecto que utiliza imágenes hiperespectrales, las cuales capturan luz visible e invisible, aprovechando una “ventana de oportunidad” en la que la luz penetra la piel y revela lo que hay debajo sin intervención. Este proceso emplea luz hiperespectral, que se distingue de la luz visible, ya que la cámara hiperespectral detecta una gama más amplia de longitudes de onda, lo que permite analizar las estructuras internas de los tejidos.
Con esta tecnología, es posible medir la perfusión, es decir, el flujo de sangre y otros fluidos en el tejido. Si el tejido está sano, responde de una forma particular; en cambio, el tejido dañado o necrosado reacciona de manera diferente. “La hemoglobina, al mezclarse con el oxígeno, emite una respuesta específica”, explicó el dr. Gutiérrez Navarro.
Actualmente, la validación de estos resultados se realiza mediante biopsia, un procedimiento invasivo. Para evitarlo, el equipo ha desarrollado un pulsioxímetro adaptado al dorso del pie. Este dispositivo permite estimar los niveles de oxígeno en diferentes zonas del pie y comparar esos valores para verificar la precisión de los datos obtenidos.
Una vez identificada la zona afectada, es posible mapear el tejido dañado y determinar su extensión. Este tipo de tecnología no invasiva resulta especialmente útil en pacientes diabéticos con úlceras en los pies, quienes, debido al daño en los nervios, pueden no notar la gravedad de sus heridas. En estos casos, el médico suele enfrentarse a la difícil decisión de amputar una parte o el pie completo. Con esta herramienta, el equipo busca proporcionar al médico una evaluación más precisa, permitiendo determinar qué tejido sigue siendo viable y optimizando las posibilidades de recuperación.
El impacto de una amputación es devastador no solo en términos físicos, sino también psicológicos, y puede llevar a los pacientes a estados emocionales críticos. Evitar amputaciones innecesarias es uno de los principales objetivos de este proyecto.
El proyecto se encuentra actualmente en su primera fase de desarrollo. La UAA cuenta con un dispositivo hiperespectral capaz de capturar 51 canales simultáneamente, en contraste con las cámaras convencionales de nuestros teléfonos, que solo capturan en tres canales; sin embargo, el alto costo de esta tecnología plantea un desafío, y el equipo trabaja en desarrollar una versión más accesible económicamente.