El Observatorio de Violencia Social y de Género acompaña a más de 100 personas víctimas de feminicidio, desaparición y violencia sexual
A pesar de los recursos limitados, la organización busca garantizar que las víctimas no paguen por el acompañamiento ni el acceso a la justicia
La impunidad y la falta de eficiencia en el sistema de justicia siguen siendo grandes obstáculos para las mujeres en México, según Mariana Ávila
En Aguascalientes, el Observatorio de Violencia Social y de Género se ha consolidado como una organización civil fundamental para la defensa de los derechos humanos y el acompañamiento de víctimas de violencia. Mariana Ávila Montejano, presidenta del Observatorio, compartió en una reciente entrevista su visión y los retos que enfrenta la organización en su incansable labor.
El Observatorio nació hace más de dos décadas con la misión de documentar la violencia contra las mujeres en el estado de Aguascalientes. A lo largo de los años, su labor ha evolucionado, convirtiéndose en una organización civil constituida hace 10 años, que hoy acompaña a más de 100 personas que han sido víctimas de violencia sexual, desaparición, feminicidio, tortura y otras violaciones a los derechos humanos. Ávila explicó que, en conjunto con 27 organizaciones a nivel nacional, han logrado documentar y visibilizar casos que abarcan desde desapariciones hasta feminicidios en todo el país “Nosotras iniciamos documentando situaciones de desaparición, feminicidio y violencia sexual. Actualmente, prioritariamente acompañamos a víctimas directas, indirectas incluidas familias y colectivos que luchan por justicia”, afirmó.
A pesar de la creciente demanda de acompañamiento, Ávila señaló que subsistir como organización ha sido cada vez más difícil debido a la falta de recursos. A pesar de ello, el Observatorio sigue adelante con iniciativas como la realización de bazares y talleres para generar fondos que permitan financiar los traslados y estancias de quienes necesitan apoyo fuera de Aguascalientes: “Estamos convencidas de que ninguna víctima debe pagar absolutamente nada por acceder a la justicia y la verdad”, expresó.
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Además de sus acciones en Aguascalientes, el Observatorio también brinda apoyo a víctimas en otras ciudades del país. Este compromiso implica movilizarse a lugares como Morelia, Guadalajara y Vallarta para asistir a las familias en la identificación de personas localizadas sin vida y en la revisión de carpetas de investigación por feminicidio.
La presidenta del Observatorio también habló sobre los retos del sistema de justicia en México, especialmente en lo que respecta a la justicia penal para las mujeres. Aunque el sistema de justicia ha experimentado cambios para eficientar los tiempos, Ávila señaló que, en la práctica, las mujeres siguen enfrentando barreras para acceder a la justicia y la verdad: “Las carpetas de investigación siguen atoradas, las audiencias se difieren, y el sistema está tan lleno de omisiones que la impunidad sigue siendo la norma”, afirmó con preocupación.
Más allá de la atención directa a las víctimas, el Observatorio también se ha convertido en un espacio de formación en derechos humanos. Ávila explicó que uno de sus objetivos es empoderar a las personas para que aprendan a defender sus propios derechos: “Cuando acompañamos a una persona, no le decimos: ‘Nosotras vamos a hacer todo’. Más bien, le mostramos cómo puede acceder a la justicia por sí misma”, destacó.
El Observatorio también cuenta con programas de voluntariado y prácticas profesionales, donde jóvenes se suman a la causa, contribuyendo al trabajo en equipo que ha caracterizado a la organización desde su fundación.
A pesar de las dificultades, Ávila considera que la mayor satisfacción del Observatorio es el apoyo mutuo que se brindan sus integrantes y las familias a las que asisten: “Lo que nos dicen las familias es que nos consideran su familia. Hemos estado con ellas en los momentos más difíciles, y eso nos motiva a seguir adelante”, concluyó.