Claudia Sheinbaum: Primeros Días como Presidenta de México

El pasado 1 de octubre fue la toma de posesión del presidente de México 2024, Claudia Sheinbaum. En sus primeros 40 días ha enfrentado grandes desafíos como el aumento de la violencia en Chiapas y Sinaloa, paros y controversias por la reforma judicial, y dudas sobre la seguridad pública. Además, ha presentado su presupuesto 2025 y avances en el Plan Nacional Hídrico.

Uno de sus momentos clave frente al mundo fue su participación en el G20, realizado en Brasil, donde propuso crear un fondo global con el 1 % de lo que se destina al armamentismo para financiar el programa de reforestación más grande de la historia. Esta iniciativa busca posicionar a México como un referente en temas ambientales a nivel internacional.

Este agitado comienzo se da tras la entrega de la banda presidencial de México de Manuel Andrés López Obrador, compañero de partido de la actual mandataria. Desde entonces, Sheinbaum enfrenta grandes expectativas como líder de Morena y como la primera presidenta del país.

Violencia en Chiapas y Sinaloa

Octubre fue un mes duro para la presidenta, marcado por conflictos armados en Chiapas y Sinaloa. En el norte del país, se registraron tiroteos entre facciones del cártel de Sinaloa, lo que obligó a muchas personas a permanecer encerradas en sus casas durante semanas. Los hechos de violencia escalaron con el asesinato del alcalde de Guerrero, quien supuestamente se habría negado a negociar con las bandas locales. Su cabeza fue hallada en una camioneta blanca.

En Sinaloa, los enfrentamientos entre los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán y los seguidores de Ismael “El Mayo” Zambada han escalado desde la captura de este último por autoridades estadounidenses en julio. Además, en Chiapas, fue asesinado a tiros el padre Marcelo Pérez, un sacerdote reconocido por su labor humanitaria y sus denuncias contra los grupos criminales en la región.

Como respuesta, Sheinbaum envió a las zonas de conflicto a su secretario de seguridad, Omar García Harfuch, para supervisar las zonas afectadas y aumentó la presencia militar en las regiones conflictivas para mitigar la violencia.

Paros y controversias por la reforma judicial

Un reto clave que ha enfrentado la presidenta Claudia Sheinbaum es el descontento generado por la reforma judicial aprobada en septiembre, impulsada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador. Esta reforma establece la elección popular de jueces y magistrados, un cambio que ha causado una fuerte oposición dentro del Poder Judicial. Ante este panorama, los trabajadores del sector declararon un paro laboral indefinido.

La situación se agravó con la dimisión de la presidenta de la Suprema Corte, Norma Piña, y otros siete magistrados.

Avances en el Plan Nacional Hídrico

Por otro lado, en una de sus últimas conferencias mañaneras, la presidenta ha anunciado una inversión de 8 mil millones de pesos destinados a proyectos hídricos, mejora urbana e infraestructura en Acapulco. Sheinbaum también afirmó que este proyecto forma parte de las acciones para estar preparados ante lluvias intensas o fenómenos naturales de alto calibre.

Las zonas que tendrán prioridad en el abasto de agua son Baja California Sur, Sonora, Durango, Zacatecas, Tamaulipas, San Luis Potosí, Durango-Coahuila, Guanajuato, Colima, Veracruz, Oaxaca, Guerrero, Zona Metropolitana del Valle de México, Acuaférico Campeche y otras obras de protección contra inundaciones en Tabasco.

Transparencia sin corrupción

Recientemente, la presidenta anunció la desaparición de dos organismos autónomos, una medida que podría generar inestabilidad política. Sin embargo, aseguró que esta decisión busca aumentar la transparencia y combatir la corrupción. Para eso, trabajará en conjunto con la Secretaría Anticorrupción, con el compromiso de resguardar los datos personales de los ciudadanos.

Presupuesto 2025

Un hito clave dentro de estos primeros meses de gestión ha sido la presentación del presupuesto 2025, paquete económico que la presidenta calificó como “muy responsable”. Además, afirmó que se garantizará la continuidad de los programas sociales, el respeto a los grandes derechos y la austeridad republicana.

El titular de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, detalló que el presupuesto total es de 9.3 billones de pesos, esto significa un incremento nominal del 2.6 % respecto al 2024. Los recursos se distribuirán de la siguiente manera:

2.8 billones de gasto no programable, incluida la deuda.
2.2 billones destinados a la salud.
1.2 billones para programas sociales.
996 mil millones para proyectos de inversión.
723 mil millones para educación.
297.8 mil millones de pesos para seguridad.

Sheinbaum también señaló que durante 2025 podrían evaluarse posibles reformas adicionales aunque hay muchas oportunidades de recaudación sin la necesidad de implementar una reforma fiscal profunda.

En paralelo, la mandataria enfrentó críticas de la agencia calificadora Moody’s que calificó la nota crediticia de México como “Negativa”, alegando que se debe a los riesgos institucionales derivados de la reforma al Poder Judicial. En respuesta, la presidenta enfatizó: “La economía de México está sólida y fuerte”.

Fuentes