- Las fallas geológicas en Aguascalientes han sido causadas por la sobreexplotación de los mantos acuíferos, provocando daños significativos en más de 2 mil construcciones
- El especialista destacó la necesidad de realizar estudios preliminares, como topografía y mecánica de suelos, para garantizar la seguridad de las edificaciones.
- A pesar de la escasez de peritos calificados en la región, Roque Cruz recomienda a las constructoras mantener una cultura de calidad y realizar los estudios necesarios para asegurar construcciones adecuadas
El ingeniero Armando Roque Cruz, vicepresidente de la Unión Mexicana de Asociaciones de Ingenieros (UMAI), señaló que uno de los principales problemas actuales en Aguascalientes son las fallas geológicas. Explicó que estos fenómenos comenzaron a ser estudiados desde los años ochenta en colaboración con la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA).
Según los estudios realizados, las fallas han sido ocasionadas por la sobreexplotación de los mantos acuíferos, lo que ha llevado a las autoridades a identificar y georreferenciar más de 300 km de fallas, además de censar más de dos mil construcciones dañadas. Los daños van desde fisuras en muros hasta viviendas que se han vuelto inhabitables.
Roque Cruz destacó la importancia de realizar estudios preliminares, como topografía, impacto ambiental y mecánica de suelos, para evaluar adecuadamente las condiciones del terreno. Como extitular de la Secretaría de Gestión Urbanística, Ordenamiento Territorial, Registral y Catastral (SEGUOT), mencionó que durante la administración anterior se hizo obligatorio realizar estos estudios para conocer la realidad del suelo y garantizar la seguridad de las construcciones.
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Añadió que los fraccionamientos no pueden ser autorizados si no presentan estudios de geología, geofísica y mecánica de suelos, los cuales deben ser firmados por peritos especializados; sin embargo, actualmente hay menos de diez peritos calificados en la región. También recomendó a las constructoras mantener una cultura de calidad y realizar los estudios preliminares necesarios para asegurar que las edificaciones sean adecuadas.
Para concluir, enfatizó que, aunque no se pueden controlar las fallas geológicas, es fundamental aprender a convivir con ellas. Mencionó que ha trabajado en construcciones afectadas por estas fallas, donde, junto con un equipo multidisciplinario, se analiza el comportamiento de las edificaciones para garantizarles una vida útil adecuada.