El banquete de los pordioseros
El cordero yace en Broadway
“Mantén tus dedos fuera de mi ojo. Mientras escribo, me gusta mirar las mariposas de vidrio que hay alrededor de todas las paredes. Las personas en mi memoria están prendidos con alfileres a eventos que no recuerdo muy bien, pero estoy escribiendo uno para verlo desmenuzarse, descomponerse y alimentar otra clase de vida”.
The lamb lies down on Broadway.
Hay muchas cosas de qué escribir hoy, tú sabes, es 22 de noviembre, el día que la Iglesia recuerda a Santa Cecilia, patrona de los músicos, y eso es un tema prácticamente ineludible, pero la publicación del disco The lamb lies down on Broadway de los ingleses de Genesis, justamente el 22 de noviembre de 1974, es decir, hoy se cumplen cincuenta años de que el mundo conoció esta sublime obra maestra de la música en el siglo XX, nos invita a dedicar el Banquete de hoy a este majestuoso disco, y por supuesto, a darle un repaso a esta joya de rock progresivo.
Por muchas razones, especialmente musicales, The lamb lies down on Broadway es un disco básico en la enorme estructura que representa el rock en todas sus formas y expresiones, pero particularmente en esa delicia que llamamos rock progresivo. Es un disco conceptual, es decir, narra una historia, es decir, si habláramos de música de concierto, o música clásica, o académica o culta, o como quieras llamarle, esto sería un gran poema sinfónico, hay una historia que se desarrolla a lo largo de esta producción, pero más allá de la incuestionable aportación musical de esta obra, resulta muy significativa porque es el último disco de Peter Gabriel como cantante, letrista y flautista de Genesis, después de este álbum, Gabriel se separa de Genesis para iniciar una muy fructífera carrera solista que nos sigue sorprendiendo hasta este momento, recordemos que Peter Gabriel acaba de publicar un nuevo disco en el año 2023 llamado I/O, y en honor a la verdad, no deja de sorprendernos con su inagotable discurso musical. Después de que Peter Gabriel se separa de Genesis, muchos comentaristas y críticos musicales de la época no dudaron en señalar que esto sería el fin de la agrupación británica, pero ya conoces la historia, Genesis no tardó en entender que era más fácil conseguir un baterista que un cantante, así que Phil Collins pasó a ser la voz principal contando con el apoyo de Chester Thompson en la batería y la fórmula resultó ser la correcta, pero eso es otra historia.
The lamb lies down on Broadway, sexto álbum en estudio de Genesis, nos narra la historia de Rael, un joven de Puerto Rico que vive en la ciudad de Nueva York y todos los personajes con los que interactúa a lo largo de esta alucinante narración llena de angustia, pesadilla, muerte, como un estado entre lo real y la más fértil imaginación, la historia, por supuesto, es muy compleja y es necesario seguir la trama mientras escuchamos el disco esto es, sin duda, una maravillosa experiencia encontrando un equilibrio casi perfecto entre literatura y un excelente rock de la más fina manufactura.
Las dificultades durante el proceso de grabación del disco fueron constantes, principalmente por el hecho de que Peter Gabriel pasaba mucho tiempo trabajando con el cineasta, guionista, y posteriormente director de orquesta William Friedkin, y esto además de la insistencia del cantante de escribir todas las letras del álbum, provocaron una situación muy tensa al interior de Genesis, la ruptura de Peter Gabriel con sus antiguos compañeros parecía ya inevitable.
La recepción del disco entre los seguidores del rock progresivo, especialmente de Genesis, fue de contrastes, para algunas personas se trata del mejor trabajo en estudio del grupo británico, otras lo recibieron con ciertas reservas, no es un disco fácil de escuchar y exige una atención especial del auditorio, digamos que en una primera instancia los verdaderos seguidores de Genesis fueron los que lo arroparon con admiración, pero con el paso del tiempo, ya nadie duda de que estamos hablando de una de las piezas fundamentales del rock en el siglo XX y con un impacto, presencia e influencia que permanece hasta nuestros días, y aunque es un disco del que no se buscó originalmente que se desprendieran algunos éxitos, eso que en la mercadotecnia se llaman “singles”, el álbum tiene algunos de los temas musicales más emblemáticos de Genesis, como por ejemplo, el tema homónimo y central que es con el que abre el disco, “In the cage”, un verdadero clásico como es “The Carpet Crawlers”, “The Lamia” o “The silent sorrow in empty boats”. Tiene además un número considerable de temas instrumentales con un discurso musical muy convincente y con características muy narrativas por lo que decíamos líneas arriba que de ser música de concierto podríamos considerarlo, sin duda, como un poema sinfónico, ese género musical dentro del romanticismo creado por el virtuoso del piano y compositor Franz Liszt.
Después del lanzamiento del disco Genesis terminaba, sin duda, el mejor de sus períodos, fue la última vez que trabajaron juntos Phil Collins en la batería, Tony Banks en los teclados, Steve Hackett en la guitarra y Peter Gabriel en las voces con todos sus elementos histriónicos que fueron parte de la identidad del mejor génesis. The lamb lies down on Broadway es, musicalmente hablando, una de las mejores obras en el siglo XX, hoy lo recordamos a cincuenta años de su lanzamiento.