Memoria y Esperanza
35 años de la fundación del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas
El domingo 3 de noviembre de 2024, más de diez mil personas participaron en una peregrinación convocada por la Diócesis de San Cristóbal, para celebrar el centenario del natalicio del obispo Samuel Ruiz García, que fuera titular de esa diócesis de enero de 1960 hasta mayo de 2000 (murió el 24 de enero de 2011). Durante la caminata, los participantes exigieron justicia por el asesinato del sacerdote tsotsil, Marcelo Pérez Pérez, defensor, como Jtatik Samuel, de los derechos de los pueblos indígenas, que había sido ultimado el pasado 20 de octubre; los peregrinantes exigieron también que los grupos criminales que operan en Chiapas, sean desarmados y desarticulados. (1)
Y sí, es que este año 2024, es un año de varias conmemoraciones de hechos y actos relacionados de manera directa con la historia de Chiapas y, además, relacionados entre ellos. Los cien años del nacimiento de Jtatik Samuel Ruiz, cincuenta años del Congreso Indígena de Chiapas, treinta y cinco años de la fundación del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, A.C. -objeto de estas líneas-, y treinta años del levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, conocido coloquialmente como el Frayba, se funda por iniciativa e impulso del obispo Jtatik Samuel Ruiz, con el apoyo de la Orden de Predicadores o dominicos, el 19 de marzo de 1989, en San Cristóbal de Las Casas, lugar en donde tiene su sede y actúa como asociación civil.
Hace unos días publiqué en LJA.MX (2) un artículo refiriéndome a los cincuenta años del Congreso Indígena que se celebró en San Cristóbal en 1974. En ese texto resalté la importancia y trascendencia, hasta nuestros días, de ese magno evento de organización y participación indígena. Pues bien, la organización indígena y las luchas de las comunidades, motivaron la necesidad de la fundación del Frayba. Cuentan así sus actuales miembros:
“Nos han compartido que, como antecedente, el Congreso Indígena del 74 desembocó para las siguientes décadas, en una álgida lucha por la tierra; la respuesta oficial fue la represión y la apuesta al cansancio para quienes demandaban su derecho legítimo a la tierra y el territorio que ancestralmente ocuparon.” (3)
Así que el Frayba nace como un instrumento para los pueblos y comunidades, en la defensa de sus derechos tanto sociales como individuales, apoyando la lucha de los pueblos por la tierra y defendiéndolos de la represión del Estado y de los finqueros.
Pocos días antes de su fundación, se celebró en San Cristóbal un “Curso Básico de Derechos Humanos”, precisamente los días del 10 al 12 de marzo de 1989. Lo organizó el Centro de Derechos Humanos Fr. Francisco de Vitoria, O.P., de los frailes dominicos de la Provincia de Santiago, de México. Participé en el curso, impartiendo algunos temas, por invitación de Fray Miguel Concha Malo, presidente en ese entonces del Centro Vitoria. El curso tenía por objeto, contribuir a la formación de las personas que formarían parte del Frayba, como fundadores.
Coordinó el curso el jurista salvadoreño Benjamín Cuellar, entonces exiliado en México y que fungía como secretario del Centro Vitoria. El curso se planeó como parte de una formación integral: teológica, filosófica y jurídica. El aspecto teológico fue impartido por Fray Jorge Rafael de la orden de los dominicos; la fundamentación filosófica fue expuesta por el también dominico Fray Mauricio Beuchot, a quien conocí personalmente en ese curso, hicimos amistad y, muchos años después, fue mi asesor de tesis de doctorado; y la parte jurídica, me tocó impartirla, recuerdo que lo hice en dos partes, una primera, la explicación de los derechos humanos según estaban normados en la Constitución General (los personales eran llamados “garantías individuales”) y, la segunda, exponiéndoles el “uso alternativo del Derecho”, esto es, la posibilidad del uso de la juridicidad en favor de los derechos de los pobres.
El Frayba se concibe así mismo como instrumento para los pueblos, como parte orgánica de sus luchas, “de las luchas del Chiapas de abajo” (4); son los pueblos los que lo hicieron nacer. Don Samuel Ruiz, su fundador, le encomendó al Frayba, mantener la herencia de la iglesia liberadora, esto es, que no sustituye a los pueblos “sino que transita, acompaña y es parte de sus construcción histórica como sujeto que se reconoce y lucha por su libre determinación.” (5)
Los miembros del Frayba, consideran que en estos treinta y cinco años, han conservado sus principios iniciales, y su apuesta ha sido “caminar junto a personas, colectivos y comunidades que luchan por defender y promover los derechos humanos como una forma de construir el bien vivir y la justicia verdadera”. (6)
El Frayba se considera a sí mismo guardián de la memoria: “Nuestra labor documentalista nos ha llevado a construir un acervo de la historia del Chiapas profundo. Esta historia pertenece a quienes la han vivido. Tenerla implica el deber moral de remembrar, devolverla e impulsar con ella la transformación social y rebeldía a los sistemas de opresión.” (7) Esta labor de “guardianes y guardianas de la memoria”, es una tarea de excepcional importancia para el impulso de las resistencias de las comunidades en defensa de su territorio y dignidad. Al no olvidarlas, ayuda a no desperdiciar la riqueza que aportan las experiencias de lucha.
Felicitaciones, por estos 35 años, al Frayba y a las personas que lo integran. También un enorme agradecimiento por la labor que llevan a cabo, cada vez en situaciones más difíciles, por la enorme violencia cada vez más creciente que vive Chiapas, sin que los gobiernos federal, estatal y municipales hagan nada por evitarla.
Notas:
1 “Marchan miles por la paz en Chiapas y exigen justicia para cura asesinado. También celebran cien años del nacimiento de Samuel García (sic)” nota de Helio Henríquez, en La Jornada, 4 de noviembre de 2024.
2 Jesús Antonio de la Torre Rangel, “A cincuenta años del Congreso Indígena de 1974”, en LJA.MX, 22 de octubre de 2024, p. 23.
3 “35 años del caminar del Frayba. El ejercicio de la memoria para seguir andando”, en Caminos que se encuentran, Agenda Conmemorativa, Frayba, 2024.
4 Idem
5 Idem
6 Idem
7 Idem