Con la canción del charro cantor Jorge Negrete, “Yo soy mexicano”, del compositor y músico Manuel Esperón González, todos a todo pulmón, en una sola voz a cantar:
Yo soy mexicano, mi tierra es bravía, palabra de macho que no hay otra tierra más linda y más brava, que la tierra mía. Yo soy mexicano y orgullo lo tengo, nací despreciando la vida y la muerte, y si echo bravatas, también las sostengo. Yo soy mexicano, por suerte mía. La vida ha querido que por todas partes se me reconozca por mi valentía. Yo soy mexicano de nadie me fio, y como Cuauhtémoc cuando estoy sufriendo, antes que rajarme, me aguanto y me río.
Con este patriotismo, devoción, lealtad, fidelidad, fervor, pundonor, respeto y amor a nuestro país, iniciamos el MARCA TEXTOS de este lunes.
Existen historias de muchos extranjeros que pisan tierras mexicanas. Se enamoran de nuestro México lindo y querido. Atraídos por la cultura, el folclor, la gastronomía, las oportunidades de crecimiento que ofrece nuestra nación en diversos aspectos. Hay otras personas que su madre o padre son mexicanos, casados con un esposo o esposa de otro país, llevan en sus venas sangre azteca.
Es el caso de la judoca nacida en Londres, Inglaterra, el 20 de febrero de 1996, hija de madre mexicana y de padre keniano: Prisca Awiti Alcaraz. Conquistó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de París 2024, en la categoría de los 63 kg, por la vía de la sumisión ante la eslovena Andreja Leski, en la Arena Champs de Mars. Siendo la segunda presea en esta justa olímpica veraniega parisina para la delegación mexicana. Y la primera medalla en la disciplina de judo en la historia del olimpismo nacional.
Prisca Awiti Alcaraz, desde la edad de los 8 años inició a practicar el judo, combinándolo con la gimnasia. A la edad de 12 años le realizaron unas pruebas físicas gimnásticas, donde concluyeron que, por su alta estatura, le era imposible seguir practicando la gimnasia, por lo que decidió irse por el judo.
Al terminar el combate sus hermanos (también practican judo, dos retirados y tres activos; radicados en Londres, Inglaterra), se abrazaron para felicitar a su hermana. Lágrimas de alegría, sinónimo de que se concretó el objetivo al pisar París.
Este fue el camino que recorrió Awiti, para poder subir al pódium con su medalla de plata en París 2024: venció a Nigara Shaheen del equipo de refugiados, en la tanda de los octavos de final dejó fuera a la polaca Angelika Szymanska (posicionada en el cuarto lugar del mundo y subcampeona mundial). En los cuartos de final la nacida en Londres con nacionalidad mexicana le ganó a la austriaca Lubjana Piovesana, en las semifinales se enfrentó a la croata Katarina Kristo. En la gran final se enfrentó a la eslovena Andreja Lesky.
En el año del 2017 Prisca se inclinó para representar a México, ya que en la Gran Bretaña no se dio la oportunidad de competir por esta nación, en las olimpiadas de Tokio 2021 Prisca se quedó en el puesto número cinco.
Las lesiones acompañaron a Prisca, en su andar para llegar al pódium parisino, estuvo seis meses fuera de circulación sin practicar el judo, sufrió una lesión en la cabeza, alejándola por 8 meses de toda competencia. Por esta circunstancia no pudo hacer equipo con Inglaterra, es ahí donde sale a relucir la sangre azteca, ya que su entrenador le preguntó si tenía el pasaporte mexicano por el lado de su madre. Bajo ese argumento se puso en contacto con la selección mexicana de judo. Pasaron tres meses y se concretó el trámite ante las instancias correspondientes en México, se logró que Awiti defendiera la bandera tricolor. En el mes de octubre empezó a competir por México.
Sus logros de la londinense mexicana: bronce en Juegos Panamericanos, plata en el Campeonato Panamericano México 2021, medalla de plata en el Campeonato Panamericano en Calgary, Canadá 2023. Medalla de plata en los Juegos Olímpicos de París 2024.
Otro ejemplo de deportista de padre o madre mexicana, casada o casado con un extranjero, nacido en otro país, que decide competir y representar a México. El clavadista mexicano Osmar Olvera, a la edad de 13 años, Canadá le ofreció becas, mejores condiciones de entrenamiento,para que representara al país de la hoja de Maple. El atleta azteca se acercó con su madre Mayanin Ibarra y su papá Sergio Olvera para pedir un consejo y tomar una decisión de irse por Canadá o por México. El primer paso fue que el joven clavadista se fuera 15 días a Canadá, con el objetivo de que conociera el país canadiense. Osmar regresó a México, no le gustó la vida por el país rojiblanco. Se tomó la decisión definitiva de continuar su proceso en tierras mexicanas y buscar a la mejor entrenadora de clavados. Contactaron a la entrenadora Ma Jin.
La entrenadora Ma Jin salió de su natal Beijing, China, el 18 de marzo del 2003. Se instaló en la CDMX, convirtiéndose en la entrenadora de la Selección Nacional de Clavados, dirigió a Paola Espinoza y Rommel Pacheco, París 2024 son sus quintos Juego Olímpicos en dirigir a los clavadistas mexicanos.
Osmar Olvera debutó en las olimpiadas de Tokio 2020, antes ganó medalla de oro en el Campeonato Mundial de Deportes Acuáticos Doha 2024.
Olvera, con 20 años de edad, es una de las cartas fuertes de la delegación mexicana para ganar una presea en París, competió en el trampolín de 3 metros individual y sincronizado haciendo dupla con Juan Celaya.
Osmar Olvera debutó el 2 de agosto del 2024 en la final de trampolín de tres metros sincronizados ganando la medalla de plata (3 para México), sus siguientes citas con la alberca olímpica son el: 6 de agosto en la eliminatoria previa trampolín, 7 de agosto semifinales trampolín de tres metros, 8 de agosto final de trampolín de tres metros.
Todos somos mexicanos.
Hasta aquí el MARCA TEXTOS de hoy.
