La sobrerrepresentación de Morena y sus aliados en el Congreso y la anunciada reforma judicial hasta ahora han sido “subestimadas” por los mercados, pero éstos podrían tener “una reacción acumulada” si la eliminación de contrapesos y la fragilidad del Estado de derecho terminan por crear incertidumbre económica, advirtió el banco estadounidense Citibanamex.
Hasta ahora, dada la moderación en las reacciones de los mercados desde el triunfo electoral del oficialismo, es posible que quienes ya descuenten esas reformas consideren que, aunque debiliten la democracia, no implicarán políticas económicas antimercado ni debilitarán la macroeconomía.
Puede ser que tengan confianza en que la política económica del próximo gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum aprovechará el nearshoring y mantendrá un favorable clima de negocios, aun cuando las reformas impliquen la pérdida de contrapesos, señala el banco en una nota elaborada por su área de Estudios Económicos.
El problema, advierte, es que la pérdida de contrapesos y sin un Estado de derecho sólido, la perspectiva de que se concrete la incertidumbre económica “crece fuertemente” y en consecuencia aumenten las primas de riesgo.
Debido a que los inversionistas “parecen estar subestimando los riesgos del nuevo escenario político”, en sus pronósticos macroeconómicos Citibanamex anticipa un debilitamiento de las variables principales.
Estima que seguirá la depreciación del peso, que cifra en 10% desde la elección del 2 de junio, y que el PIB crecerá menos tanto este año como en 2025. Apunta también que desde la elección la bolsa de valores ha perdido casi 7% de su valor.
“El mercado no parece haber descontado completamente que sí habrá una mayoría calificada de Morena y que sí se aprobará la reforma judicial; también parece haber desdeñado el impacto político negativo de ésta y otras reformas, así como subestimado su riesgo económico”.
Las previsiones incorporan la tendencia al riesgo por parte de los agentes económicos. Pero en la lógica de “esperar a ver”, los pronósticos se vuelven más frágiles porque los inversionistas reaccionarán con fuerza a cada cambio relevante de la política pública por parte de lo que describe como “nuevo régimen”.
En el futuro, podría desencadenarse “una reacción acumulada de los mercados, que hasta ahora se han mantenido contenidos”, advierten los analistas del banco estadounidense.