Aguascalientes es tierra de grandes artistas, lo menciono con orgullo, ¿y por qué no habríamos de estar orgullosos de las buenas cosas que suceden en la tierra que nos vio nacer? Aguascalientes es considerada, con todo merecimiento, cuna del nacionalismo mexicano, los tres grandes representantes nacionalistas son o tienen que ver con esta tierra de la “gente buena”, parafraseando a don Alejandro Topete del Valle, en la música Manuel María Ponce, originario de Zacatecas, pero creció y se formó aquí en Aguascalientes, ya lo decía el maestro Barrios cuando fue director de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes: “Ponce es de Aguascalientes, fue a nacer a Zacatecas pero luego se regresó”. En la literatura tenemos al genial y sublime Ramón López Velarde, también nacido en Zacatecas pero con un fuerte arraigo aguascalentense, y finalmente en las artes visuales, específicamente en la pintura tenemos a Saturnino Herrán, él sí nacido en Aguascalientes y considerado con toda justicia como el más pintor de los mexicanos y el más mexicano de los pintores, murió muy joven pero dejó un legado que enriquecerá por siempre el mundo de las artes visuales de nuestro país.
Sí, en efecto, hay que decirlo a grito abierto y sin inhibiciones, una de las más grandes fortalezas de Aguascalientes es su oferta cultural, -creo, por cierto, que debería fomentarse con convicción y pasión el turismo cultural- y es que nuestro estado es y ha sido sede de grandes acontecimientos culturales, y al mismo tiempo ha generado una buena cantidad de artistas en todas las disciplinas y ramas de las bellas artes, pero tú sabes, amigo lector, lo mío es la música, aunque por supuesto soy un apasionado lector y disfruto como pocas cosas en la vida la visita a un museo o a una galería de arte, pero bueno, hablemos de música.
Muchos han sido los grandes músicos que han nacido o se han hecho en Aguascalientes, no pretendo en este espacio hacer un recuento de todos aquellos que han ennoblecido el arte de Orfeo y que han tenido impacto e influencia a nivel nacional, incluso internacional, sólo un breve recuento, mencionar a un puñado de luminarias que han impactado con su música en México y más allá de nuestras fronteras, tenemos el caso, por supuesto, de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes que sin haber ido todavía al extranjero, asignatura pendiente, por cierto, logró destacar entre la crítica especializada en grandes capitales culturales del mundo como Londres, Berlín o Barcelona con la grabación para el sello Naxos de música del maestro Silvestre Revueltas, específicamente el breve poema sinfónico Sensemayá, La Noche de los Mayas y la suite para Ballet La Coronela trabajando bajo la dirección del maestro Barrios. Por supuesto, el trabajo del maestrísimo Jorge Aguilera y su ensamble vocal Noche Lírica que ha hecho que el estado de Aguascalientes se escuche en Macao, China como un referente cultural de México. El maestro Daniel Romo que triunfó con su Coro Amicitia en la tierra de la ópera, Italia, y ahora quiero aterrizar la idea citando a la soprano de Aguascalientes Laura Romo que se presenta esta noche en el Teatro Aguascalientes con un repertorio compuesto por Arias de Giacomo Puccini, inmenso compositor de Luca en Italia y acompañada por nuestra gloriosa Orquesta Sinfónica de Aguascalientes.
Laura Romo eligió libremente el apasionante canto operístico, quizás pudo optar por otro género en donde obtuviera fácilmente el reconocimiento, ¿y por qué no? el ingreso económico fácil que ofrece la música popular, o peor aún, la música populachera, desechable, úsela y tírela, pero no, ella decidió recorrer el camino difícil, ese que está reservado para unos cuantos, que exige técnica irreprochable, compromiso, pasión, renuncia a muchas cosas, porque la profesión así lo exige, y mucha paciencia para empezar a ver los resultados.
Tiene 20 años de carrera, esto podría ser mucho en la trayectoria de cualquier cantante popular, y sin embargo, en el canto lírico es apenas el tiempo justo para empezar a cosechar lo sembrado, y de verdad que ella lo ha hecho. Su formación musical la inició en Aguascalientes y la continuó en grandes escuelas y academias de música europeas. Mira, en realidad no quiero entretenerme repasando su currículum, es mejor escucharla y conocer su trayectoria para tener una mejor idea de qué tipo de cantante estamos hablando.
A lo largo de estos 20 años de carrera ha incursionado con la misma solvencia en la ópera como en el oratorio y ha abordado con la misma pasión el lied o el lenguaje sinfónico, por ejemplo, en su historia ha tenido papeles protagónicos en óperas como Otello, Tosca, La Boheme, Sour Angelica, La Nozze di Figaro, Cosi fan tute, Lños cuentos de Hoffman; ha participado en obras como Stabat Mater de Pergolesi, el Gloria de Vivaldi, el Réquiem de Fauré, Theresienmesse de Haendel, La Petite Messe Solennelle y Stabat Mater de Rossini. Como ya lo he comentado, el lenguaje de la sinfonía que recurre a la voz tampoco le es ajeno, Beethoven, Mahler, Liszt, entre otros.
Su talento, compromiso con su majestad la música, y la pasión que esta actividad exige, la han llevado a presentarse en escenarios de México, Italia, Francia, Dinamarca, Suiza, Austria, Omán, y desde el 2018 trabaja en la ópera de Montecarlo en Mónaco, es decir, una de las mejores casas de ópera del mundo en donde entre otras personas conoció a Plácido Domingo.
Esta noche Laura Romo se presenta en el escenario del Teatro Aguascalientes con nuestra Orquesta Sinfónica con un repertorio compuesto por arias de Puccini trabajando bajo la dirección del maestro Fernando Lozano. Ahí nos vemos a las 20:30 horas si Dios no dispone lo contrario.